Localización…
Mérida es la capital de la comunidad autónoma de Extremadura. A sus alrededores nos encontramos con diferentes pueblos, algunos de ellos son: Esparragalejo, Aljucén, El Carrascalejo, Mirandilla, Trujillanos, Don Álvaro, Torremejía, Calamonte, La Garrovilla…
Climatología…
Esta ciudad tiene un clima mediterráneo. La temperatura media en verano suele rondar los 25 grados (lo cual no significa que no pueda alcanzar los 35 grados que se registraron un año). En invierno, esta temperatura media está en torno a los 10 ó 11 grados.
Festividades…
Carnavales.
Es una fiesta muy popular en la ciudad, donde se llevan a cabo comparsas, entre las cuales muchas de ellas están relacionadas con el mundo romano.
Semana Santa.
Asiste mucha gente de otras provinciales y lugares del mundo ya que tiene un atractivo especial. La clave es que recorren restos históricos como por ejemplo el anfiteatro romano.
Festival de teatro clásico.
Se celebra los meses de julio y agosto en el teatro y anfiteatro.
¿Qué visitar?...
Esta antigua ciudad fue fundada en el año 25 a. C., por Roma, por orden del emperador Octavio Augusto. En aquella época esta ciudad se conocía con el nombre de Augusta Emerita y siendo la capital de la región de Lusitania. La ciudad cuenta con una gran variedad de monumentos relacionados con esta época y de origen romano, que actualmente se siguen conservando.
En su conjunto Mérida es una ciudad de patrimonio nacional.
Teatro romano.
Es uno de los mayores atractivos turísticos de la ciudad.
Este antiguo teatro romano se inauguró entre los años 15 y 16 a. C., siglas que se pueden observar en las inscripciones situadas sobre las dos puertas de acceso a la orchestra. Desde su puesta en marcha se realizaron multitud de actuaciones y representaciones, lo que derivó en la obligación de reformar el teatro. Pasados los años y con el cristianismo ya implantado por completo en la aquella sociedad, se va dejando de utilizar el teatro, ya que las representaciones se consideraban inmorales. Esto repercute sobre el teatro de forma bastante negativa ya que se llega a la situación de su abandono total. Algunas estructuras se van derrumbando y las demás partes quedan cubiertas por arena y polvo, excepto la parte más elevada del graderío. En ella se podían ver, aún, siete asientos, conocidos como las Siete Sillas (cuya leyenda cuenta que fueron utilizadas por varios reyes moros mientras pensaban y decidían el destino de esa ciudad).
En 1910 se comenzó a excavar, y encontraron, tras largos años de duro trabajo, esta maravilla escondida. Este teatro romano tiene la peculiaridad de que, tras pasarse siglos enterrado bajo la arena, sin conocimiento alguno de su ubicación exacta, vuelve a resurgir y además lo hace de manera que vuelve a funcionar, es decir, recupera su función original, la de servir como teatro. Para ello, en 1933, se comenzó a celebrar en él el Festival de Teatro Clásico, que se sigue celebrando actualmente. La última reforma conocida fue en el año 1964 llevada a cabo por manos del arquitecto Menéndez Pidal.
Su estructura o sus partes son las siguientes (la mayoría se pueden visitar, hay otras zonas que tienen el acceso restringido por razones de protección contra el deterioro):
1.- El Graderío (cavea). Tiene una capacidad de hasta 6000 espectadores. Para acceder al graderío debes seguir el camino que rodea la fachada del teatro hasta llegar a una de sus trece puertas para poder entrar. El graderío está dividido en tres sectores, ya que en aquella época primaba la diferenciación entre las distintas clases sociales.
2.- La Orchestra. Este es el espacio reservado para el coro.
3.- El escenario (pulpitum). En sus orígenes el suelo estaba hecho con madera. Tiene un frente muy bonito. Al escenario se puede entrar por tres puertas situadas en el frente de éste, por otra central o por dos más, laterales.
4.- Peristilo. Tras el escenario se construyó una gran zona de jardines llamada peristilo.
5.- Culto imperial. No se sabe con exactitud para qué servía o qué utilidad tenía esta sala, pero al indagar un poco más en aquellas excavaciones encontraron la cabeza del emperador de Roma que ordenó su construcción, Augusto. Por ello se cree que esta era una zona de culto.
6.- En esta zona se encuentra lo que se considera una casa con variadas piezas de mosaicos.
Anfiteatro romano.
Este tipo de construcción es muy conocido debido a la multitud de películas que podemos ver de romanos, como por ejemplo la de Astérix y Oblelix.
El anfiteatro romano se ideó a la par que el teatro romano, pero fue construido un par de años más tarde. El anfiteatro se pudo inaugurar en el año 8 a. C., como se puede ver en las inscripciones del propio lugar.
¿Qué se hacía en el anfiteatro? Bien, pues en este lugar se celebraban juegos en los que participaban gladiadores en luchas entre animales o entre animales y hombres (venationes).
Por desagracia, al igual que el teatro, el anfiteatro se dejó de utilizar y se abandonó totalmente, quedando inmerso en las arenas, enterrado con el paso de los años.
Es cierto que el anfiteatro siglos más tarde se comenzó a conocer con el nombre de Naumaquia que quiere decir, lugar donde se representaban batallas navales. Pero en 1919, cuando se consiguió excavar por completo, volvió a sus orígenes en cuanto a su nombre.
El anfiteatro también sufrió varias reformas, pero se conserva su estructura.
1.- El graderío. En primer lugar, tenemos el graderío que al igual que el teatro consta de tres divisiones, distinguiendo las clases sociales. Aunque al visitar el anfiteatro puede dar la sensación de existir tan solo dos secciones, no es cierto, existían tres. Esto es debido a que con el paso del tiempo se ha deteriorado tanto que se han perdido casi todos sus restos. Se puede acceder a él mediante 17 puertas que se encuentran a lo largo de toda su fachada.
2.- La arena. Esta parte, comúnmente conocida con el nombre de la arena, tiene una forma ovalada o elíptica, y era el lugar donde se llevaba a cabo el espectáculo de las luchas.
3.- En el centro de la arena nos encontramos con una gran fosa que tiene forma de cruz. Se cree que pudo ser una zona de almacenaje de las jaulas de los animales combatientes o almacenaje del material utilizado para el espectáculo.
El circo romano.
El circo romano también es otro de los atractivos de esta ciudad, y además, al igual que el anfiteatro, es muy conocida su estructura debido a las películas.
De hecho, en aquella época antigua, los espectáculos que más llamaban la atención del público eran los celebrados en el anfiteatro, pero también los que se desarrollaban en el circo.
El circo es una construcción que podía recoger a un elevado número de espectadores, debido a su gran extensión. Y, actualmente, el circo romano de Mérida es uno de los poquitos que se pueden visitar casi por completo.
Su planta mide cerca de los 400 metros de largo y 100 de ancho. Tiene forma ovalada, excepcional para las carreras de carros conducidos por un auriga que se realizaban en aquella época. Estos carros podían estar tirados por dos caballos (bigas) o por cuatro caballos (cuadrigas).
Cuenta con un graderío que nuevamente se ve dividido en varios sectores. La arena tiene esa característica forma ovalada también y en su centro se encuentra dividida en dos partes por la mitad, mediante lo que se conoce como spina, que es una especie de plataforma. También cuenta con doce cárceles o cocheras, seis a cada lado, que se utilizaban para que los carros se pudiesen situar antes del comienzo de la carrera.
A todas estas zonas puedes asistir y visitarlas con un guía que te va explicando cada detalle perfectamente. A continuación voy a dejar el resto del recorrido al que ya asistí por cuenta propia.
Embalses y acueductos.
-Acueducto Rabo de Buey – San Lázaro.
-Embalse de Proserpina.
-Acueducto de los Milagros.
-Embalse y acueducto de Cornalvo.
Calzadas, puentes y vías.
-Puente romano sobre el río Guadiana.
-Puente romano sobre el río Albarregas.
-Puente romano de la alcantarilla.
-Vías de Emerita.
Alcazaba.
-Alcazaba árabe.
-Aljibe.
-Conventual santiaguista.
Foros.
-Pórtico del Foro.
-Templo de Diana.
-Arco de Trajano.
-Foro provincial.
