ALBARRACÍN.
En nuestro viaje por estas tierras del norte de España, en la zona de Teruel, llegamos y paramos en Albarracín, un bonito lugar rodeado de montañas.
Alojamiento…
Nos alojamos en el Hotel Arabia, que se encuentra en la calle Bernardo Zapater, número 2 en Albarracín (Teruel), en el cual, he de decir que nos trataron muy bien. Buen servicio y rápido. Además he de añadir que no había overbooking, es decir, que el número de turistas alojados en el hotel no era excesivamente alto, lo cual hizo que la estancia fuese mucho más cómoda.
Visitas…
Durante nuestra estancia visitamos los entrañables y típicos lugares habilitados para los turistas de aquella zona.
Para ello, cogimos / sacamos un bono que incluía visitas a distintos lugares y el precio por él era bastante económico. Lo cogimos junto al bono itinerario para poder realizar, ya que estábamos allí, una visita guiada por la zona. Fuimos dos personas y nos salió por un total de 18,00 euros, es decir, por persona serían 9,00 euros.
El bono incluía la visita guiada al Museo del Albarracín, que era el antiguo hospital del siglo XVIII, y al Museo Diocesano, lo que antiguamente era el Palacio Episcopal del siglo XVIII también.
Museo…
Aquí, en esta ciudad, nos sorprendió gratamente encontrarnos en un museo con unas piezas de cerámica que deberían estar, por su elevada categoría en el museo de la Alhambra de Granada, pero por otros motivos están aquí, en esta singular ciudad. Esto se debe, prácticamente, a que son joyas musulmanas ( de ahí lo de la Alhambra) que fueron encontradas en el Castillo de Albarracín. Son tres piezas, que constituyen una mínima, pero a la misma vez representativa, muestra del magnífico conjunto de lozas musulmanas que hemos podido recuperar gracias a las excavaciones llevadas a cabo en el castillo de este lugar.
Esta colección cerámica, que es una de las más importantes de la península, las puedes encontrar en el museo de Albarracín (además de mucha más historia antigua de esta zona) y, podemos decir que está compuesta por una amplia variedad de formas y tipos decorativos. Entre ese conjunto de esa colección cerámica podemos destacar, debido a su singularidad y belleza de la forma, estas tres piezas, que a groso modo podemos decir que son:
Un plato con una insignia o dibujo en el fondo, representando a un pájaro, el cual en ciertas zonas se ve un poco borroso, debido al tiempo que hace desde su elaboración.
Un jarrón con decoración típica de aquella época, aunque la parte superior del jarrón está un poco dañada, ya que le faltan algunos picos.
Un cuenco, que tiene grabado una especie de marcas y que, aunque se conserva bastante bien para los años que tiene, se pueden apreciar ciertos rasgos de haber sido utilizado con frecuencia.