Monte da Penha

Continuamos hablando de Guimarães, en esta ocasión no de la ciudad en sí pero sí de un lugar cercano y casi de obligada visita como es el Monte da Penha. Guimarães se puede visitar perfectamente en una mañana, con lo que nos queda la tarde para visitar este lugar.

Otra gente aprovecha para hacer un Braga-Guimarães en un día, a no ser que tengáis los días contados, no me parece la mejor opción ya que en Braga uno se puede tirar un día, visitando por la mañana su centro histórico (del cual seguro que os dejaréis algo) y luego ir al Bom Jesús y al Santuario de Sameiro.

Cómo llegar

Si hacéis caso a mi recomendación tendréis menos de medio día para visitarlo, por lo que lo mejor es llegar hasta aquí con un teleférico o funicular que sale de las afueras hasta el Monte da Penha.

2, 80 cuesta la entrada, me parece un precio bastante asequible, recuerdo que en Madeira costaba el doble o triple, aunque es cierto que es mucho más grande. Si haces ida y vuelta, se queda en 4, 50 euros y si utilizáis el carné joven se queda en 2, 30 euros.

Mi recomendación es que subáis en teleférico básicamente por la falta de tiempo, y el bajar lo hagáis caminando aunque seguir las señales porque es fácil perderse al tener muchas desviaciones ya que hasta el Monte no llega solo gente de Guimarães sino de otras "freguesías" cercanas. La bajada se puede unir con la visita a alguna iglesia como la de San Gualter pero que yo no vi por falta de tiempo.

En coche también se puede llegar, posiblemente sea la opción más numerosa, tiene un aparcamiento delante del Santuario da Penha y otro aunque muchísimo más pequeño en la cima del Monte da Penha.

Y si os gusta la bici de montaña, el lugar también puede servir para hacer este deporte pero me parece bastante difícil subirla para gente que no haga pendientes normalmente en bicicleta.

Un poco de historia...

El lugar como tal tendría su importancia ya que es el punto más elevado en Guimarães pero como lugar religioso fue en el siglo XVIII cuando un francés construyó una pequeña capilla dedicada a Santa Catalina (o Catarina en portugués).

El lugar adquirió una mayor importancia a finales del siglo XIX, cuando en 1893 se construyó una estatua en la cima del Monte da Penha dedicada al Papa Pío IX. Pero no fue hasta que la década de los 30 cuando se construyó el Santuario da Penha. Por desgracia, hubo un incendio en 1939 con lo que se retrasó el final de las obras hasta 1947.

Ya posteriormente, en 1989 se creó el teleférico que comunica la ciudad de Guimarães con el Monte da Penha, y sus alrededores se convirtieron en una zona recreativa.

El Monte da Penha, el santuario y sus alrededores

Si vamos en teleférico este nos dejará por detrás del Santuario del Monte da Penha, también llamado Santuário de Nossa Senhora do Carmo da Penha, al estar dedicada a la Virgen del Carmen.

La iglesia (o santuario) en sí mismo me parece bastante inferior tanto a la del Bom Jesus como la de Sameiro. El estilo de la iglesia es el "art decó" de la década de los 30 y está hecha del granito procedente de la región.

La verdad es que me parece un estilo que atrae poco a la vista. Lo único destacable son ciertas estatuas que se encuentran en el interior y poco más. La iglesia es bastante grande ya que en el mes de agosto se hacen romerías hacia el Monte da Penha.

A continuación, iremos a la cima del Monte da Penha, existe un mapa para seguir un itinerario pero mi experiencia subiendo hasta la cima me demuestra que es muy fácil perderse ya que las señales son mínimas y también que uno se desvía fácilmente.

De camino a la cima, tendremos varias imágenes de santos en determinadas partes del camino, algunas son muy curiosas ya que no están en una capilla como pasa en la del Bom Jesús sino dentro de grutas o pequeños lugares estrechos. También de destacable es el mismo recorrido, como se ve en la segunda fotografía, el lugar es muy bello de por sí.

Una vez lleguemos a la cima tendremos una panorámica excelente de Guimarães y sus alrededores, y la verdad es muy preciosa al ser este lugar el sitio más elevado, nos da unas fantásticas vistas. Una de mis preferidas por mi viaje a Portugal.

La estatua dedicada al Papa Pio IX es la que se ve en esta fotografía, en sí mismo no creo que sea lo más bonito de la cima, sino el propio paisaje y también el tener un buen lugar para fotografiar a la iglesia. Es decir, la cima tiene un valor más valioso de mirador que de monumento en sí mismo.

El lugar al ser una buena zona recreativa, es bastante explotada turísticamente. Podremos subir a un mini-tren para darnos un recorrido, el tren está pensado más en gente mayor, cualquier persona se recorre perfectamente el lugar andando e incluso ciertas partes dudo que llegue el pequeño tren. También existe varios restaurantes, un pequeño merendero y un campo de minigolf.

La otra parte del Monte da Penha se encuentra al lado contrario de la cima, al otro lado de la iglesia. En esta parte, existe la capilla original del francés aunque totalmente reformada y otros pequeños santos como el de la fotografía de arriba, donde hay un santo dentro de una pequeña cueva.

El lugar se puede visitar rápidamente en uno hora o dos horas por lo que es bastante recomendable su visita, es el mejor espacio verde que uno puede recorrer en Guimarães y es una buena alternativa a la Citãnia de Briteiros, un pequeño castro que solo se puede visitar si se dispone de coche.

En conclusión, la razón principal de visitar el Monte da Penha, no es en ningún monumento religioso como pueda ser el Bom Jesús, el lugar sí que tienen ciertos parecidos como explotación turística pero poco más. Los alrededores son preciosos y se tienen unas vistas geniales, por lo que recomiendo mi visita al Monte da Penha.