Fiesta sin parar en Poseidi parte 2

Después de haber acabado la primera parte con toda la información detallada sobre lo que deberías traer, las instalaciones y los precios, ha llegado el momento de ver qué es lo que realmente pasa en el mejor camping de la historia. Aquí escribiré como un mini diario de un fin de semana en Poseidi.

Así que, ¡empecemos!

Llamas a tus amigos y les propones pasar el fin de semana en algún lado porque el tiempo en Salónica en julio es horrible, demasiado sol y calor. Obviamente, se entusiasman con la idea y empiezas a pensar en posibles lugares a donde ir. Sin embargo, tu cartera no está lo suficientemente llena como para ir a un hotel y tampoco hay hostales en la península de Calcídica, que es la opción más cercana para irse de vacaciones. Alguien propone ir a un camping gratuito, pero no a todos les apetece irse de vacaciones a un sitio tan callado y tranquilo. Algunos quieren salir de fiesta día y noche y conocer a gente nueva.

Alguien tiene que encontrar la solución que contente a todo el mundo. Y yo ya sé que tú, al haber leído la parte uno de este blog, ya tienes en la cabeza la imagen de Poseidi. Les dices todo lo que sabes sobre el sitio y que es la mezcla perfecta entre unas vacaciones baratas, fiesta y conocer a mucha gente. Entonces todos pensáis: "bueno, no sé muy bien cómo será pero, ¿por qué no? ".

Así que, empezáis a hacer la maleta para pasar un fin de semana en Poseidi. Y además, estamos a principios de julio, cuando todos los universitarios han acabado sus exámenes y sabes de seguro que habrá muchísima gente.

Tú eres ese tipo de personas a los que no le gusta tener problemas con la gente, así que sabes que te lo pasarás genial allí. Pero antes de sacar conclusiones apresuradas quieres investigar un poco y enterarte de qué va la cosa.

Hablas con tus amigos por teléfono, organizas la hora a la que quedaréis y vais todos juntos a la estación de autobuses donde cogeréis el autobús que os llevará a Poseidi. Todo el mundo tiene una mochila llena de ropa, un saco de dormir, champú y todas esas cosas importantes que necesitarán y cada dos o tres personas, alguien se encarga de llevar una tienda de campaña.

¡Hala! Me has hecho caso y te has comprado una hamaca para llevártela, estoy muy contento y ¡te aseguro que no te arrepentirás!

Viernes por la mañana y el sol te atonta un poquito. Pero solo pensar en el mar y en la locura de fin de semana que te vas a pegar hace que se te suban los ánimos. Te compras un café para el camino y esperas a tus amigos en la estación de buses "KTEL", donde todos cogeréis el autobús que os llevará al "paraíso".

Por fin después de media hora de retraso llegan tus amigos. Deberías enfadarte con ellos, pero en verano parece como que no merece la pena. Vais a estar juntos todo el fin de semana, ¿por qué te ibas a enfadar?

Os dirigís a las taquillas para comprar los billetes (que son más o menos 10 euros para estudiantes). Preguntas por los billetes a "Poseidi" y pronto verás la enorme cola llena de otros estudiantes que también se dirigen al mismo sitio.

Ya estás un paso más cerca de tener el billete en tu mano, te diriges hacia el autobús que va lleno e intentas encontrar espacio para tu equipaje. Al final tendrás que llevarte la mayoría de las mochilas contigo porque no habrá espacio, pero de todas maneras no te importa, total por media horita...

Si estás cansado y tenías pensado dormir en el autobús, olvídate, no va a ser posible a no ser que no te importe el ruido o te hayas llevado tapones para los oídos. Te recomiendo que no duermas y disfrutes del viaje, sobre todo si es tu primera vez en Calcídica.

Primer día: viernes

¡Ya has llegado! ¿Qué puedes hacer primero? Como ya dijimos en la primera parte, tienes que ir a las taquillas antes de entrar en "tierra santa". ¡Ah! Y espero que no te hayas olvidado de tu carné de identidad, porque sin él no vas a poder entrar, ¡lo siento!

Por suerte, todos habéis traído lo que necesitabais así que estáis listos para registraros. Alguno tiene que ser rápido y correr a ponerse a la cola. Después de una hora, o quizás más, finalmente es vuestro turno para registraros. Tienes que rellenar un papel con información personal y la gente que trabaja allí os hará una foto para el carné que os darán. No te preocupes si no sales guapo, está en blanco y negro (y esto no es Facebook así que deja de quejarte). También se van a quedar con tu carné de identidad en la entrada, y solo te lo podrás llevar cuando te vayas (mejor para tí, porque así no lo perderás por el camping).

Después de todo el aburrido papeleo, finalmente ¡conseguirás entrar en el camping! Ahora solo tenéis que encontrar un sitio para asentaros con vuestras tiendas de campaña y prepararos para el fin de semana que se avecina.

Esta es la parte más difícil. Hay gente que llega cuando abren el camping de Poseidi para dejar sus tiendas de campañas listas, se van, y más tarde volverán en verano. Así que te encontrarás con alguna que otra tienda de campaña extra y menos espacio disponible para ti.

Pero no te preocupes, la "suerte del principiante" está de tu parte y tan solo después de una hora buscando, encontrarás espacio suficiente para colocar todas las tiendas de campaña y tu hamaca nueva. Además has encontrado justo un sitio con bastante sombra por las mañanas. ¡Un auténtico milagro!

No me puedo creer que ninguno de vosotros sepa cómo montar una tienda de campaña. No seáis vagos, ¡solo tardaréis diez minutos!

Tienda de campaña: lista.

Cosas: todo dentro de las tiendas.

Hamaca: colgando de un árbol.

Pues hala, ya estás 100 % listo para ¡hacer lo que te plazca! . Sigue siendo por la tarde y te da la sensación de que te estás derritiendo del calor, así que ¿por qué no ir a la playa? Ve a la playa y no te olvides de llevarte la crema de sol. ¡No quieres parecer un tomate por la noche y gastarte todo tu dinero en yogures para curar las quemaduras!

Ponte el bañador, llévate todo lo necesario y vete corriendo al mar. Experimentarás un primer "contacto visual" con el chiringuito. Si no te gusta el sol, hay algunas mesas donde te puedes sentar a la sombra y no hace falta que pidas nada.

El sol es tan fuerte que decides dejar tus cosas e ir al agua, mientras que tu amiga tiene la muy mala suerte de estar en uno de esos "días malos" y se quedará en la arena y se pondrá celosa.

Intenta llegar al agua sin llenar de arena a toda la gente que está tumbada tomando el sol. Es una tarea muy dura intentar tener cuidado y ser rápido al mismo tiempo porque la arena está muy caliente.

¡Ah!... ¡Por fin en el agua!

Te sientes vivo de nuevo. Decides que te vas a quedar ahí dentro una hora y nadar. Después de haber hecho una demostración de vuestras habilidades de natación, decidís volver a ver cómo esta vuestra amiga, que está sola y probablemente aburrida.

Esperemos que haya sido lista y se haya traído un libro con ella, así que cuando la veis decidís que es la hora del café.

Hay una norma no escrita del camping de Poseidi que dice que si llevas el suficiente tiempo allí, nunca te comprarás nada del chiringuito porque te gastarás todo tu dinero muy rápido. Pero si solo vas a estar aquí un fin de semana y es tu primera vez, no sigues esa norma.

Estás en Grecia, así que os pedís lo que normalmente tomáis: un "frappé" griego, excepto uno de vosotros que decide empezar con las cervezas. ¡Buena elección!

El chiringuito en la tarde del viernes o sábado ¡Llenísimo!

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Y recuerda, toda esa gente son estudiantes de tu edad. ¡Ni niños ni abuelos!

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Tu amigo al que le encantan los deportes, ve el voley playa y decide meterse en el equipo para demostrar sus aptitudes. Los demás se quedan charlando tranquilamente a la sombra.

Después de un par de horas, el sol ya no pega tan fuerte y decidís volver a la playa para pasar el rato allí, nadar y ver el atardecer.

El tiempo ha pasado tan rápido que son ya casi las ocho y media de la tarde. ¿Quién tiene hambre? Obviamente todos después de tantas horas en la playa. Ahora viene la gran pregunta: ¿qué hacemos primero? ¿Ducharnos o comer? Al final decidís dividiros y como mientras estoy escribiendo me está entrando hambre, os hablaré del equipo que se decidió por comer primero.

La cola en el restaurante es un poquito larga, pero no tardarás mucho en comer. El restaurante cierra a las 10 y tampoco hay muchas opciones para comer. Sin embargo, siempre hay una solución fácil: espaguetis con carne picada o patatas fritas con algún tipo de carne. Vayas donde vayas, siempre estarán estas dos opciones.

Ya has tomado la decisión: pollo con patatas fritas. También has cogido un melocotón, un pepino, una ensalada de tomate y un trozo de pan. Te diriges al cajero para pagar, sacas tu tarjeta y la pantalla te da dos opciones: 3. 50 o 3. 80 euros. Vale, podría ser más barato, pero de todas maneras sabes que te sentirás llenísimo incluso antes de acabar el plato.

Alguien de tu grupo coge los espaguetis y los demás optan por el arroz con carne. Todo el mundo prueba un poquito de los otros platos y te das cuenta de que te esperabas una comida mucho peor, pero al final acaba estando bastante bien

Coméis un poco rápido porque queréis iros a duchar antes de que todo el mundo vuelva de la playa y las duchas se llenen. Os lleváis los platos y volvéis a las tiendas.

Ves a mucha gente esperando fuera de las duchas en vuestro camino de vuelta, ahí es cuando te das cuenta de que la "suerte del principiante" te ha abandonado. ¿A quién le importa? ¡Estás de vacaciones!

Algunos decidís que no os ducharéis esta noche, porque de todas maneras el agua salada del mar es terapéutica, pero los demás se van a las colas de las duchas.

Los que se quedan atrás, se van a comprar unas cervezas de la pastelería y se sientan alrededor de la tumbona a relajarse. Los dos que llegaron primeros, los más afortunados, son los que se tumban en la hamaca, pero también habéis sido listos y habéis traído sillas para que nadie se quede insatisfecho.

Algunos de vosotros os empezáis a sentir un poco cansados y decidís meteros en las tiendas a echaros una siesta. Los que se la juegan y pasan de dormir serán los que hagan de despertador mientras empiezan las copas y juegos de beber.

Para cuando los del "equipo cerveza" se están acabando su primera cerveza, los que se habían ido a duchar han vuelto y se han encontrado con unos amigos que han decidido presentaros. Todos os ponéis a jugar al "anillo de fuego".

Los "limpios" todavía no han cenado todavía y el restaurante justo acaba de cerrar. Pero no pasa nada porque ahora es cuando se ha convertido en una cafetería y se van a comprar hamburguesas con patatas o un sándwich de pollo para cenar. Incluso los más hambrientos se compran dos sándwiches y se los comen en menos de 10 minutos. Esto es lo que pasa cuando te pasas el día entero en la playa y no comes.

Una vez satisfechos, ¡ha llegado la ora de empezar a beber! Ahora es cuando todos se despiertan.

Habéis encontrado una mesa grande y empezáis a jugar al mejor juego de beber: "el anillo de fuego". Hay mesas fuera de los mini mercados y del restaurante. Primero mira dentro del mini mercado pero no encontrarás nada porque estará lleno todo. La siguiente opción es el restaurante. Por suerte, has encontrado una mesa vacía para ti y tus amigos y decidís quedaros ahí.

Os vais al mini mercado a comprar una botella de tres litros del típico vino blanco barato, que se llama retsina para poder jugar al anillo de fuego. Y también llamáis a más gente para que se una.

Ha llegado el momento de jugar. Después de cinco rondas, todos empezáis a sentiros un poco mareados, pero todavía es pronto para bajar al chiringuito porque estará vacío.

¿Qué hacer en este momento? ¿Crees que ha llegado la hora de conocer gente?

La respuesta es, sin duda, ¡sí!

Empiezas a andar por las tiendas de campaña donde te encontrarás a gente que haciendo pequeñas fiestas o que te empezarán a hablar y te ofrecerán una copa gratis. Encontráis al grupo de amigos más "guay" y decidís quedaros con ellos.

Algunos preferís seguir andando y buscar a más gente.

¡Hala! Te acabas de encontrar a los amigos de antes con los que estabais jugando al anillo de fuego. Te enseñan un par de juegos de beber más y bebéis todos juntos.

Después de beber lo suficiente, creo que ha llegado el momento de ir al famoso chiringuito. Ya está lleno de gente, pero conseguís un pequeño espacio para bailar y enseñar de lo que estás hecho. Empiezas a sentir calor y os tomáis un rato para bañaros en el mar.

Ahora todo es mucho mejor y podéis seguir bailando.

Después de tres horas sin parar de bailar, creo que ha llegado el momento de volver a las tiendas de campaña. El sol empieza a salir y no te apetece ni lavarte los dientes, pero no te preocupes, yo sé que lo puedes hacer, confío en ti.

Segundo día: sábado

Al día siguiente te despiertas un poco cansado pero emocionado por lo que has vivido hasta ahora. Solo necesitas desayunar un poco, una bebida y un café frío para hacerte sentir mejor.

Por suerte habéis encontrado un banco justo afuera del mini mercado para disfrutar del café a la sombra. También os ponéis a jugar a las cartas hasta que se despierten los demás y podáis ir a la playa.

Después de una hora, al fin todo el mundo está despierto y listo para pasar el día entero en la playa. Os ponéis el bañador, cogéis un par de palas y ya estáis listos. Cuando estás de camino a la playa os dais cuenta de que se os ha olvidado el agua. ¡Qué mal! Alguien tiene que volver a las tiendas para cogerla, ¿quién va a ser el afortunado?

Los demás decidís dónde ir. Alguno propone la idea de ir un poco más lejos en la playa donde no haya tanta gente y donde haya espacio para jugar a las palas. Por algún extraño motivo a todos les parece bien ponerse a andar bajo el sol abrasador y os empezáis a alejar de la gente

Después de media hora, llegaréis casi a la costa de la que os hablé en primera parte, que se llamaba "Miti".

Cuando llegáis os dais cuenta de que la caminata bajo el sol ha merecido la pena. El agua es mucho más limpia que en la zona del chiringuito, hay espacio de sobra para dejar todas vuestras cosas sin quitarles el ojo de encima y puedes relajarte y pasar un día tranquilo.

Decidís quedaros hasta que se pone el sol. Después todos pensáis en lo mismo: COMIDA. Sí, es la hora de comer. Tenéis tanta hambre que podrías hacer como Aníbal. Pero no, por favor, no empecéis a comeros los unos a los otros, tan solo imagínate el pollo con patatas que te está esperando.

Después de acabar con la comida, llega el momento de ducharse. No me he olvidado del hecho de que algunos ayer no quisisteis ducharos, así que, por favor, usad mucho champú hoy.

Ahora estáis llenos, limpios y listos para entrar en acción. ¿Cómo vais a empezar la noche? Alguien dice que hay una película en el cine y a todos les gusta la idea de empezar así relajados. Algunos vais al mini mercado a comprar cerveza y palomitas para la película mientras otros vais a buscar dónde está el cine y para coger asientos para todos.

El cine de Poseidi

Fuente

Bueno, la película no era muy buena, pero todavía es pronto y ¡os queda toda la noche por delante! Esta noche no queréis hacer como ayer, queréis probar algo diferente. Hay un pequeño parque de juegos justo antes del chiringuito donde os quedáis a pasar el rato.

Después de sentiros como niños otra vez, decidís volver a las tiendas. Escucháis música muy alta que viene de todas partes porque casi todo el mundo se ha traído sus altavoces. Parece una competición, gana quien tenga la música más alta. Vosotros os decidís quedar con aquellos que tienen la mejor música. No deberías ser tímido, creo que después de casi 24 horas aquí ya sabes como van aquí las cosas. Todo el mundo es amigo de todos.

A tus nuevos amigos les apetece ir al chiringuito, pero vosotros no queréis ir dos días seguidos, así que os buscáis otros nuevos amigos con los que ir a comprar algo de beber y a sentaros en la playa. Compráis todo lo necesario y camináis hacia la playa. Son casi las 4 de la mañana, pero la playa está vacía.

Encuentras un sitio justo debajo del chiringuito donde quedaros tranquilos, porque un poco de música de fondo no molesta. Hace muchísimo calor por la noche así que decidís ir a bañaros un poco. Te puedo asegurar que los que se quieren bañar se arrepentirán. El mar está mucho más limpio por la noche.

El tiempo ha pasado tan rápido que ni os dais cuenta de que son las 6 de la mañana. El sol empieza a salir y os giráis para ver el chiringuito lleno de gente. Mucha gente empieza a bajar a la playa porque no hay espacio suficiente en el chiringuito. Intentáis entrar al chiringuito pero es imposible así que volvéis a la playa para bailar ahí con tus amigos.

Un último baño antes de ir a dormir siempre es la mejor manera de cerrar la noche. Incluso aquellos que no quisieron bañarse antes se están bañando. ¡Perfecto! El agua está buenísima y el sol no te molesta. Es la mejor temperatura.

Vamos ahora a desayunar (o cenar, depende de como lo mires). ¿Quién tiene fuerzas para lavarse los dientes? Mmm... nadie.

Tercer día: domingo

Por desgracia, hoy ya toca decir adiós al camping. No te puedes creer que el fin de semana haya pasado tan rápido, incluso tu cuerpo se encuentra cansado de la falta de sueño pero tu mente se encuentra tan llena de energía que podrías pasar ahí todo el verano. Qué mal que ya tengas los billetes para tu próximo destino de vacaciones. Pero bueno, ahora ya sabes dónde ir el próximo verano y podrás quedarte mucho más tiempo.

Por última vez vais a la pastelería y disfrutáis del desayuno y un café y empezáis a hablar y a opinar sobre el camping y sobre cómo os lo habéis pasado. Todos estáis de acuerdo en que queréis volver.

Todavía tenéis un poco de tiempo hasta que llegue el autobús así que os dais un último baño en la playa. Algunos todavía tenéis hambre y vais al restaurante a comer algo. Lo importante es que todos vayáis a la hora que habíais quedado a las tiendas de campaña para empezar a hacer las mochilas.

La cola para el restaurante.

Fuente

Hacer la maleta es la parte más aburrida cuando te vas a un camping, porque seguramente te olvides algo de las muchas cosas que te has llevado. Pero como sois muchos y más o menos organizados, en menos de una hora todo estará listo y no os olvidaréis nada.

Volvéis a la entrada para hacer el "check-out" y recoger vuestros carnés de identidad. El autobús ha llegado y os está esperando, algunos empezáis a meter las coas mientras los otros hacen el check-out.

Espero que a nadie se le haya acabado el dinero porque todavía falta por pagar el autobús de vuelta. Si alguien se ha pasado gastando y ahora no le queda nada, no le dejéis allí, dejadle un poco de dinero, al fin y al cabo ¡es vuestro amigo!

Todo el mundo está listo para marcharse. Os subís al autobús, le echáis un último vistazo al camping, pero no os preocupéis porque ya sabéis que el próximo verano volveréis. Hasta entonces, ¡disfrutad del resto del año!

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