Ilha Campeche

Ilha do Campeche

Con esta entrada os contaré un poquito como fue nuestra visita a una de las islas más bonitas de Brasil. Sin dudarlo ni un momento, puedo decir que es un auténtico paraíso que combina playas cristalinas y naturaleza exótica.

No debe confundirse con el barrio de Campeche, en la zona sur de la isla, situado a unos 14 Km del centro de Floripa y a unos 11 Km del conocido barrio Lagoa da Conceição, que, dada su situación en la costa este de la isla, también cuenta con una preciosa playa de 11 Km de extensión y abundantes bares y restaurantes a su entrada, muy frecuentada por los surfistas, aunque un tanto peligrosa para los niños pequeños por este mismo motivo, su oleaje. Por ello, uno debe tener cuidado al bañarse si el mar está muy bravo.

En frente de este barrio, y en medio del océano atlántico, cerca de la costa a unos 2 Km de la playa de campeche, se sitúa una isla bastante pequeña, “Ilha do Campeche”, la cual no llega a tener 1 Km2, de unos 500 m de ancho y 1 Km y medio de largo, (por lo que probablemente recibe este nombre). El acceso es comúnmente en barcos pesqueros que ya organizan sus viajes de ida y vuelta para los turistas, acondicionando los barcos con salvavidas. En su zona más norte, cuenta con una playa, aunque no muy grande, totalmente paradisíaca, desde los colores hasta ese fondo donde puedes perderte entre los numerosos árboles.

Por lo general, la playa de la isla no comparte ese comportamiento salvaje de la playa del barrio isleño de Campeche. Al igual que la isla, la playa también es pequeñita: unos 500 m de arena blanca y sus aguas totalmente calmas (pues el resto de la isla la cobija del mar abierto) que se asemejan a las de una piscina. Es increíble la tonalidad que tienen sus aguas, pues tal cual como parece en las fotos, incluso mejor todavía, el agua es de ese color que se nos muestra en las fotos del Caribe, una mezcla de verdes y turquesas que personifican el paraíso.

Área Protegida

Es un sitio totalmente recomendable para los turistas, pues además de su belleza innegable y cantidad de especies exóticas, tanto de flora y fauna, posee gran cultura arqueológica.

La isla está protegida y ya desde 1940 la isla está cuidada por la Asociación Couto de Magallanes. Más tarde, en el año 2000, declarada Patrimonio Arqueológico y Paisajístico Nacional por el Instituto de patrimonio histórico y artístico nacional (IPHAN) y constituye además, por lo que dije en el párrafo anterior, un área de preservación ambiental cuyo objetivo es conservar las especies exóticas y evitar su desaparición. En la actualidad, ambas autoridades gestionan la preservación de esta isla, entre otras actuaciones, con monitores en la isla encargados de anotar el número de pasajeros que entran así como controlar las actitudes de los mismos.

Su nombre probablemente se deba a la abundancia en la isla del Pau de Campeche, un árbol de crecimiento espontáneo, más característico de América Central, que antiguamente se usaba para teñir los tejidos ya que de aparente color “madera” cuando está fresca, se vuelve roja en contacto con el aire. Así pues, sometiendo la madera a fermentación es posible obtener el colorante pastoso.

Cuando la isla estuvo habitada, parece que había un asentamiento de pescadores, que comenzaron a desarrollar plantaciones de mandioca que les servía como alimento. Hoy en día, dado que todas las actividades han sido erradicadas de la isla, salvo los paseos organizados para turistas, puede disfrutarse de toda la vegetación original que vuelve a repoblar la isla.

Además, en ella se encuentran 10 yacimientos arqueológicos, más de 100 petroglifos (nosotros logramos ver algunos en una de las rutas de senderismo que hicimos con un guía), y pinturas rupestres que demuestran que la isla estuvo habitada en la prehistoria.

Por ello, en la actualidad, únicamente se permite la entrada a 800 visitantes al día y durante un máximo de 5 horas (lo que para el turista es de agradecer también para no formar parte de una masividad de gente que impide disfrutar de la belleza que el paisaje ofrece). Cuando el barco llega, se notifica la entrada de X turistas (tantos como vengan en la embarcación) y después de transcurrir las 5 horas, ese mismo número de turistas debe volver a Florianópolis.

En esta isla no existen hoteles, alojamientos ni posibilidad de acampar, pues está abierta al turista únicamente para que la conozca pero se intenta preservar su importancia arqueológica y su exuberante naturaleza nativa. Por ello, únicamente podrás encontrar en la playa dos pequeños “chiringuitos” de madera en los que podrás pedir alguna bebida fresquita.

Precios:

• agua desde 2 reales (€0. 60)
• cervezas a 5 reales (€1. 45)
• Caipirinhas a 5 reales (€1. 45)

También hay comida, (cuando yo fui solo recuerdo ver la opción de un plato combinado de pescado y

arroz o patatas y tampoco recuerdo el precio, pero no era caro).

Otro puesto de madera, situado a unos metros de la playa, donde te informarán de las rutas de senderismo (trilhas en portugués) que ofrece la isla.

Qué Hacer en Ilha do Campeche

No es que la isla ofrezca gran cantidad de actividades, pero es que tampoco tendrás mucho tiempo de disfrutarla. Ya acercándote, la belleza de Campeche sorprende a cualquier persona.

1. Una de las posibilidades es simplemente tumbarte en la playa y disfrutar del sol y de las vistas que ofrece. Cuidado porque la zona de baño está delimitada (algo de lo que ya te informan al bajarte del barco ya sea el señor que os lleva en el barco o el “monitor” que os recibe en la isla) para evitar accidentes con los barcos que transitan en la orilla o con los bañistas que hacen snorkel.





Además hacia la zona derecha de la playa (situándote de frente a ella según llegas) podéis acceder a una calita más íntima si cabe, aunque el camino es un poco pedregoso, por lo que si no llevas un par de tenis o un calzado cerrado, no es muy recomendable.



2. Otra de las actividades, como ya me adelanté a decir, es la práctica de snorkel. Tienes la opción de alquilar unas gafas en el propio barco que os lleva por un precio de 15 reales (€4. 35), o por el contrario una vez llegada a la isla también puedes contratar un barquito que te lleva a una zona más retirada para realizar la actividad (que dicho sea de paso parece más interesante ¿no? Que hacerlo únicamente en la orilla de la playa) y cuesta alrededor de unos 35 reales (€10) por persona (si no recuerdo mal, pues nosotros no lo hicimos, únicamente hablo de memoria de lo que nos comentaron al bajar del barco). No cabe duda, de que es increíble. Teniendo en cuenta que las aguas son tremendamente claras y que se puede apreciar perfectamente el fondo y la fauna tan característica que puebla la isla, hace que las ganas de practicar snorkel incrementen más aun. Claro que desde mi punto de vista lo mejor es hacer el viaje en barco, y que lleve a una zona un poco más profundo, pues lo que puedes ver en la orilla es “poca cosa” aunque no quita que no sea genial ver pequeños bancos de peces diminutos nadando por debajo de ti.



3. Otra actividad, no menos interesante que yo siempre recomiendo, es hacer alguna caminata. En esta isla únicamente se puede ir con la compañía de un guía lo que es muy útil porque va haciendo paradas en algunos de los puntos más significativos (como algunos de los petroglifos que vimos) y va contando la historia y leyendas de la isla, y te ayuda a reconocer las especies más exóticas de la vegetación.

Son de corta duración y además muy llevaderas, de baja exigencia física. Pueden hacerse incluso en chanclas, así que con eso se dice todo.

Cuando nosotros fuimos, nos ofrecieron dos caminatas: una de 5 reales y otra de 10 reales. Como no teníamos ni idea de la diferencia entre ambas, y las chicas del puesto nos habían recomendado cualquiera de las dos, escogimos la barata.

Se trataba de una caminata de unos 30 minutos por el interior de la isla, hasta llegar al punto más alto, con varias paradas en las que la guía nos explicaba algunas cosillas. Casi al comienzo de todo, nos encontramos con un petroglifo y nos estuvo contando la importancia de la isla en cuanto a contenido histórico. Después seguimos caminando entre la vegetación por caminos realmente bonitos, hasta llegar al final de nuestro camino, el punto más alto de la isla. Desde allí, hay una explanada de piedra a modo de mirador desde donde se puede apreciar la panorámica de gran parte de la costa de la isla, e incluso de algunas de las playas de Florianópolis.

En la cima, nos encontramos con un monolito de unos 9 metros de altura. Si para mi hubiese pasado desapercibido la guía le dio bastante importancia, y nos contó una historia sobre cómo había llegado hasta allí y cómo se había mantenido en esa posición vertical durante tanto tiempo.

Cómo Llegar a Ilha do Campeche

Para llegar a la isla de Campeche, únicamente se puede acceder en barcos pesqueros (o también en zodiac desde la localidad de Campeche). En ocasiones puede haber oleaje por lo que debes ir con cuidado y ponerte el chaleco salvavidas. A nosotros cuando volvimos, la barca tuvo tantos vaivenes que los que estábamos en los bordes nos empapamos por completo.

Tienes tres opciones desde las que partir:

• Playa do Campeche: 5 o 10 minutos - (48) 9922-4800.
• Playa de Armação do sul: 40 minutos - (48) 8416-6487.
• Playa de Barra da Lagoa: 1h 30 minutos - (48) 8481-9930 ou 8487-4521.

Al lado de cada puerto os dejo sus números de contacto, aunque aviso por mi experiencia que no es de extrañar si no responden.

Los precios varias entre los 50 y 70 reales (€14. 50 y €20. 30) (viaje de ida y vuelta). No hay un precio oficial pues son los pescadores los que ponen el precio y cuando vais en grupo siempre podéis negociar un poco. Está claro que también influye el puerto desde donde salgas, pues desde barra será más caro que partir desde Armação.

Nosotros escogimos la opción de salir desde Armaçao, un peqeuño pueblo de pescadores, ya que la comunicacion con lagoa era la mejor de todas. Además, alli dispones de algun bar y terrazas, donde nos paramos a tomarnos un helado cuando estábamos volviendo.

Para llegar a estos puertos, únicamente necesitas coger un autobús urbano que llegan a cualquiera de las tres localidades (depende desde donde salgas tendrás que informarte d la comunicación. Nosotros partimos un grupito desde la terminal de autobuses de Lagoa da Conceição hasta Armação en un único bus).

No hay horarios oficiales, varia todo en función de la demanda. En temporada alta habrá más viajes y en temporada baja menos, quizá llegas al puerto y te toca esperar un poco si sois solo un par de personas, o si sois un grupo amplio (como era nuestro caso) quizá el barco salga solo para vosotros.

El dia que decidimos visitar la isla, osotros, fuimos justo después de comer y nos dio tiempo a ver el atardecer desde Campeche. Una preciosa puesta de sol.

espero que os haya animado a ir. Desde luego si estás en florianópolis y vuelves sin haber visitado la isla... ¡no tienes perdón! Por el precio del viaje compensa muchísimo ir y disfrutar del paraíso y de la tranquilidad que te ofrece, además en un ambiente muy solitario únicamente con tu grupo de amigos, ya que el numero de visitantes es muy reducido y en un horario limitado.