Una semana en Estambul

Un viaje a Estambul no te deja indiferente. En un terreno tan próximo al nuestro y qué variedad de costumbres, religiones y etnias. Sin duda una experiencia súper enriquecedora que recomiendo vivir exprimiendo a tope cada rincón.

Una ciudad medio europea y medio asiática, en un país mayoritariamente musulmán, Turquía. Tenemos gran cantidad de prejuicios con Turquía (ya sea Estambul o Ankara). Sin embargo, hoy por hoy los conflictos están a la orden del día en toda Europa (y fuera). Quiero decir, que salvo une restricción directa, no considero que hay que limitar el viajar por las habladurías que escuchemos sin ningún fundamento. Lo que si me parece de gran importancia, al menos a título personal, cada uno puede cuestionarlo bajo su opiniòn propia, es que cuando uno viaja a países de costumbres tan diferentes, creo que es importante tener cierto grado de respeto por su cultura y su religión, aunque uno no lo comparta e incluso lo rechace. 

Volviendo a la chicha y a lo interesante, os contaré cosas que pueden serviros de utilidad si viajáis a Estambul, cosas que he aprendido con la experiencia de este viaje y que espero os ayuden. 

DINERO: LIRAS TURCAS

La moneda oficial son las Liras Turcas. Aunque allí la abreviación que usan TL, actualmente en cualquier banco que vayáis si queréis comprar esta divisa deberéis pedir TRY (han cambiado hace poco de moneda). Pues bien, aunque sabéis que podéis sacar dinero en efectivo en cualquier cajero, yo siempre prefiero ir con algo de efectivo de casa, nunca sabes qué puede pasar. Lo bueno es que Estambul todavía es Europa, y a diferencia de otros países si tienes tarjeta “Joven” (normalmente de débito) te permiten sacar 3 veces en cualquier cajero de otra entidad sin ninguna comisión.  Me había pasado en otros países del extranjero, que a pesar de tener esta ventaja con mi banco, la otra entidad me cobraba comisión (trapicheos entre entidades bancarias que no entiendo muy bien).

Otra de las recomendaciones para el viajero es ir siempre con una tarjeta de débito y una de crédito (o en resumen, dos tarjetas y al menos una de ellas de crédito). En mi caso no hice mucho caso porque iba a ver a una amiga por lo que siempre podría pedirle ayuda sin necesidad de crearme otra tarjeta a propósito del viaje. 

AEROPUERTOS

Para viajar a Estambul tenemos dos opciones de llegada: El Aeropuerto Internacional de Atatürk y el Aeropuerto de Sabiha Gökçen.

1. Aeropuerto Internacional de Atatürk

Este es el aeropuerto que acoge la mayoría de los vuelos llegados de cualquier parte del mundo. Por ello es el más importante, el más popular y el que goza de mejores comunicaciones con el centro de la ciudad, ya que se sitúa a unos 28 kilómetros, al oeste de la ciudad en la parte europea. 

Para moverse desde el aeropuerto a la ciudad existen varias posibilidades: alquiler de coches, contratados como en cualquier otro aeropuerto, poniéndose en contacto con las empresas de alquiler; servicios de transfer, contratando un coche particular con chófer que os espera a la llegada a un máximo de cuatro personas y os lleva hasta el hotel (puede reservarse online en http://www.istanbulairportminicab.com/).

- En taxis: por un precio de unos 10 euros (30 liras) y un tiempo medio de 30 minutos (ojo con los precios porque aumentan con la tarifa nocturna).

- En metro: aunque nosotros no lo utilizamos es la forma más barata. Hay que hacer trasbordo de la línea de metro M1 – Aksaray con la línea de tranvía T1 (hablando de llegar a Taksim claro, depende cual sea el punto de destino). Esta última es la forma más barata sin embargo es un poco engorroso para ir cargando con todo el equipaje, por no hablar de que el tiempo medio de viaje es de 1 hora.

- En autobús: desde mi punto de vista la mejor opción es el servicio de autobuses con la empresa Havatas, que hace unas cuatro paradas hasta llegar a Taksim, el punto céntrico de la ciudad: si uno lleva bastante equipaje es lo más cómodo y barato, ya que por 11 liras y en media hora te pones en el centro. Únicamente tienes que esperar los horarios de salida desde el aeropuerto que son cada media hora (a las horas en punto y a las horas y media). Aquí podéis consultar los horarios:  http://www.havatas.com/yolcuservisi/taksim-ataturkhavalimani.aspx

2. Aeropuerto de Sabiha Gökçen.

Este fue al aeropuerto que viajé yo. Su función es descongestionar al aeropuerto de Atatür, dividiendo así la congestión de pasajeros. Acoge la mayoría de vuelos domésticos, reservando casi la totalidad de vuelos internacionales a compañías de bajo coste. Este aeropuerto se sitúa al este de la ciudad de Estambul en la parte asiática de la ciudad, a unos 50 kilómetros (el doble que el otro aeropuerto).

Aunque a priori, toda la información que había leído en internet me decía quela comunicación de Sabiha con Estambul era un tanto tortutosa y compleja, he de decir que no lo he podido encontrar más sencillo.

Mi avión llegó en torno a las 20:00 horas, tardé apenas unos minutos en recoger la maleta y salí al encuentro del autobús. El Havatas esperaba justo en frente de la puerta de salidas, le dejo mi maleta al chófer quién me la guarda en el maletero y me subo a buscar un sitio. Sobre las 20:30h el autobús se dispone a salir, el chofer recorre el autobús de adelante atrás dándonos los billetes y recogiendo el dinero (14 liras, unos 5 euros) y ¡en marcha! A los 40 minutos ya estoy en Taksim esperando a que mi amiga me recoja. Puede que yo haya tenido suerte o lo que sea, poco tráfico, poca espera… pero me pareció muy sencillo, barato y muy cómodo. Al igual que la comunicación de esta empresa con Atatürk, el horario de salidas es cada 30 minutos (http://www.havatas.com/yolcuservisi/taksim-sabihagokcenhavalimani.aspx).

Existen también otras formas al igual que en el aeropuerto anterior, como el servicio de alquiler, el serivicio de transfer o los taxis (con un precio en torno a 40 euros).

ALOJAMIENTO BARATO

Para mi sorpresa alojarse en Estambul fue bastante más barato de lo que pensaba. En esta ocasión, dediqué parte del viaje a visitar a una amiga que estaba de Erasmus en Estambul y el resto de los días a recorrer el resto de la ciudad por mi cuenta. Por ello que los primeros días me quedé con ella, pero luego necesité un alojamiento. Reservé habitación en el “Holas Apartment” en Silsi por unos 200 euros. Entre todas las cosas buenas, destaco con mucha diferencia la proximidad a la zona de Taksim, el centro neurálgico de la ciudad. Es el punto donde encontrarás las mejores comunicaciones de metros, tranvías y autobuses, las mejores conexiones entre ellos, abundancia de taxis… por no mencionar que el Havatas (el medio de transporte para ir desde cualquiera de los dos aeropuertos a la ciudad te deja justo en ese punto). La zona de Taksim está abarrotada de hoteles, sin embargo en apariencia mucho más lujosos y, por supuesto, bastante más caros.

Holas Apartment

No tenía grandes esperanzas con el alojamiento la verdad. Normalmente, la habitación no suele ocupar gran parte de mi presupuesto. Prefiero tirar a alojamientos más baratos y gastar más dinero en excursiones o entradas culturales.

Una vez fuera de la zona centro, de las grandes avenidas, nos metidos en un entramado de callejuelas con escasa visibilidad, sin asfaltar, un tanto sucia con basura en las aceras… y llegamos a la puerta. Un tanto pequeñito parecía el sitio. En este hotel se abría la puerta con un código en un teclado numérico (el cual te facilitan por email en el momento de la reserva) y puedes entrar sin necesidad de llave. Lo primero como siempre el check-in, en el que la conversación con el recepcionista fue en una especie de inglés regulero ya que ni él ni yo (he de reconocerlo) no lo dominábamos muy bien. Después la habitación: en el último piso, muy espaciosa, con una cocina totalmente equipada y un baño pequeño pero completo. La única pega quizá, he de decir que internet funcionaba lo justito para recibir whatsapp o para buscar una ubicación en google maps…

La recepción (como norma) es 24 horas, por lo que normalmente no es necesario acordar hora de llegada (cosa que me gusta bastante, no estar pendiente de la hora de llegada). Tienen chicos trabajando en los turnos de mañana, tarde y noche con lo que consiguen cubrir todo el horario. Como os dije antes y como advertencia, el chico que está de noche habla el inglés más justito que os podáis imaginar. Por lo demás, un alojamiento más que recomendable.

¿INGLES? APRENDER TURCO

Esta es otra cuestión importante. Con el español tendrás que comunicarte por señas porque no es un idioma muy popular en Estambul. De hecho incluso con el inglés irás justito en muchos lugares ya que a pesar de lo que había escuchado (que en Estambul el inglés es un idioma muy frecuente) nos ha costado comunicarnos en muchos sitios. Aquellas zonas turísticas tienen personal bilingüe por lo que podrás perfectamente comunicarte en diferentes idiomas, incluso en las tiendas de recuerdos suelen hablar un inglés al menos entendible. Sin embargo a pie de calle para consultar dudas, en muchos restaurantes o cafés, puestos por la calle… es súper común que no hablen más que turco, por lo que deberás hacerte entender por señas (o cada uno a su manera!).

La amiga a la que fui a visitar llevaba 4 meses en la universidad. Me explicaba que incluso allí un bajo porcentaje de alumnos hablaban inglés. Por el hecho de tener uno (o más) estudiantes Erasmus las clases pasan a impartirse en inglés, sin embargo por el bajo entendimiento del alumnado suelen acabarse en turco, por lo que ni os cuento las dificultades de cualquier alumno extranjero. Por otro lado, desde este sector de movilidad académica, toda la documentación remitida a los estudiantes de intercambio está en turco… ¿Cómo puede ser? Email para documentación necesario, inscripciones en viajes o en cursos, horarios de clases, tarjetas de transporte… y sin embargo, los servicios de tranvía tienen el audio en los dos idiomas (turco e inglés) anunciando las paradas o las notificaciones necesarias a los viajeros.

Desde mi punto de  vista me extraña… con el inglés uno va a casi cualquier sitio. Con el español un poco menos pero podemos hacernos entender en muchas partes del mundo. Pero con el turco, uno no puede moverse más allá de Turquía y alguna que otra región próxima…

TIEMPO EN NOVIEMBRE + temporada baja (pocos turistas y pocas colas)

Dicen que Noviembre es mes de frío y lluvias. Pues así debería ser pero al igual que en Galicia, parece que Estambul también se ve afectado por el cambio climático y es que no pudimos tener más suerte. Debido a que decidimos viajar en este mes, nos llevamos prendas de abrigo en la maleta y sin embargo tuvimos un tiempazo. Temperaturas rondando los 20 grados, cielos despejados y un único día de lluvias (y aun así sin frío). Al viajar en noviembre sabíamos lo que nos podíamos encontrar y sin embargo tuvimos muchísima suerte. A eso se suma que es temporada baja, por lo que los precios son más bajos y no solo eso, si no que la presencia de turistas es… bajísima. A penas hicimos cola en los lugares más turísticos. Lo que más tardamos fueron 7 minutos esperando a subir a la torre Gálata. No podemos quejarnos de nada. Habíamos escuchado que era súper común esperar 2h de cola para poder entrar en el museo Santa Sofía, o que apenas podías dar dos pasos seguidos en el Gran Bazar. Creo que de esa manera no lo hubiese disfrutado tanto.

RELIGIÓN Y VESTIMENTA

Para alguien que nunca ha estado en un país de región musulmana es un choque cultural importante (y eso que coexisten varias religiones dentro de un marco europeo). La gran mayoría de mujeres llevan velo tapando el cabello, pero también una gran parte van totalmente cubiertas, enseñando únicamente los ojos (que en general suelen llevar muy maquillados). Me llama la atención la diferencia de estas costumbres, como dentro de una religión existen mujeres con tanta independencia, con la opción de ponerse o no velo, y por otro lado mujeres que aparentan ser totalmente sumisas al hombre, sin posibilidad de enseñar nada más que sus ojos (hasta el punto de que algunas llevan una rejilla cubriendo la mirada). Supongo que como nuestra religión católica, existirán diferentes doctrinas.

En cuanto al tema de las mujeres, en el museo de Santa Sofía nos proporcionaron un folleto sobre el islam donde nos explicaba que era la cultura occidental la que veía este gesto como una privatización de la libertad femenina, lo que sin embargo para ellas es una costumbre de su religión, religiones que nacieron en el desierto y que usaban este método para protegerse del sol y la arena, y que aún se conservan hoy en día.

Puede que nosotros no compartamos sus creencias o sus costumbres, pero en un país mayoritariamente musulmán somos nosotros los que debemos adaptarnos a ellos y respetar sus costumbres. No me refiero a llevar velo por la calle o rezar junto a ellos, pero sí a mostrar respeto a su cultura y religión. 

REZOS MEGAFONÍA

Este es uno de los aspectos más llamativos de Estambul, y desde mi punto de vista es una de las características que hacen de la ciudad un lugar tan peculiar. Existen ciertas horas en las que se escuchará a un hombre rezar por megafonía, cuyo audio llega a toda la ciudad. Siempre es a las mismas horas, y lo más llamativo: siempre es en directo, a tiempo real, no se trata de una grabación.

CAOS CONDUCCIÓN

La conducción es un auténtico caos (no exagero). En las calles principales existen pasos de cebra y semáforos, otra cosa es que se respeten. No hablemos de las zonas periféricas, sin ningún tipo d señalización ni iluminación. Lo coches campan a sus anchas, se paran y arrancas en ambos sentidos como les apetece: se guían por los pitidos emitidos de las bocinas de los coches. Ojo si eres peatón en estos sitios porque no hay contemplaciones jajaja.

En otros casos las incorporaciones a los carriles con cuanto menos caóticas: para incorporarse a una calle de tres carriles se rigen por la ley del más fuerte, incluso luchando con los autobuses: aquel que entre toda la maraña de coches consiga meter más el morro conseguirá incorporarse. Por otro lado los motoristas son unos artistas temerarios, ya que se meten como pueden entre todo este jaleo adelantando allí por donde tienen sitio. Por si esto no fuera poco es muy muy común ver a los conductores (incluso de los autobuses) hablando por teléfono… al final es una atracción más en esta ciudad…

IATI. ¿Es recomendable viajar con un seguro privado?

Esto desde luego es un consejo, una opinión personal que supongo muchos de vosotros compartiréis. Siempre que viajo (y más aún fuera de la unión europea donde no lleva mi cobertura de la seguridad social española) me gusta hacerlo asegurada. Prefiero “perder” 20 o 30 euros pero ir con la seguridad de estar cubierta si tengo algún accidente o percance. Es un gasto más del viaje a tener en cuenta, no como un extra o un gasto innecesario. Las grandes facturas de gastos médicos o simples ingresos hospitalarios en países extranjeros pueden suponer un gasto que acarree un problema el resto de nuestra vida, por no hablar que en algunos países no te atenderán si previamente no puedes demostrar que puedes asumir el pago de los servicios.

Antes de conocer esta compañía de seguros viajaba con cualquiera que viese en el momento que me ofertase un servicio básico, sin embargo en este viaje descubrí a IATI, y aunque sinceramente aun no he tenido que utilizarlo (afortunadamente) las referencias que tengo de otros viajeros son bastante buenas, además de todas las ventajas que presenta (para residentes españoles únicamente):

1) es una empresa española que se dedica únicamente a eso, una empresa de seguros y no una de esas multinacionales que abarcan diferentes áreas;

2) en caso de tener que utilizarlo no es necesario adelantar nada de dinero, podemos olvidarnos de la tarjeta de crédito;

3) La asistencia es en español, ya que por muy bien que dominemos cualquier otro idioma siempre es preferible usar tu idioma nativo para expresar una situación de emergencia, y con un operador directo, sin necesidad de llamar a ningún 902 y que te pasen de un teléfono a otro;

4) por supuesto el precio: es totalmente asequible y variable en función de las necesidades de cada viaje.

Espero que hayan sido datos de interés para todos aquellos que esteis pensando en viajar a Estambul, o para todos los que estéis buscando un nuevo destino turístico.