Al llegar a Copenhague. Día 1 - salir de la ciudad

Al llegar al aeropuerto de Copenhague

Bueno, te contaré sobre mi llegada a Copenhague y mi primera vez mojado por la lluvia danesa. Para ser honesto, además de todo el esfuerzo y las cosas, tuve problemas para llegar al lugar de alojamiento y entrar a mi apartamento, sin embargo, ¡todo salió bien y dormí en una cama esa noche!

Supongo que hubo un pequeño retraso en nuestro vuelo y llegamos al aeropuerto de Copenhague con aproximadamente media hora de retraso, de modo que mi organizadora del curso, Kathrine, que iba a recibirme en el aeropuerto para darme las llaves de mi alojamiento y ayudarme a llegar allí. Tuve que esperar mucho tiempo hasta que llegué a la sala de llegadas del aeropuerto de Copenhague. Allí encontré una conexión wi-fi en el aeropuerto y me conecté con ella a través de messenger y así fue como nos dijimos dónde encontrarnos.

Ya sabes, viendo todo desde arriba, desde la ventana del avión, todo parecía tan verde y fresco, que sentí curiosidad por mirar las previsiones meteorológicas y pensar que temperatura haría allí en Copenhague, porque era julio y hacía calor en Georgia en ese momento, incluso en algún lugar a unos 35 ºC, supongo, y decía que en Copenhague había 16 ºC o algo así y era una temporada de días lluviosos. Realmente no creía, que habría tantos días lluviosos y me trajeron un impermeable simple por si acaso, sin embargo, me di cuenta de que era un gran error no comprar un buen impermeable para esos días lluviosos allí.

Al entrar al aeropuerto siempre es difícil encontrar el camino hacia el equipaje y luego hacia la salida, sin embargo, siempre hay esos letreros que te indican a dónde ir. Sin embargo, se dice que debes seguir a las personas y yo hice eso y los seguí, por supuesto, primero fuimos al control de pasaportes y al control de equipaje y esas cosas y luego fui a recoger mi equipaje.

Después de un tiempo de espera, allí estaba mi equipaje, lo tomé y fui a la salida, porque sabía que Kathrine me estaba esperando por mucho tiempo. Tenía un cartel en sus manos y la reconocí por la foto de Facebook. Era bastante sociable y me explicó algunas cosas sobre cómo moverse por Copenhague y lo que necesitaba hacer. Acordamos que me compraran un reisekarte, que era necesario para moverse por la ciudad en metro, autobuses o trenes. Sin embargo, no fue nada barato. Todo era automático en la estación de metro del aeropuerto, donde compramos esta tarjeta y pagamos 250 DKK, de los cuales alrededor de 50 DKK eran un depósito más o menos y el resto del dinero podría usarse para el transporte.

A la ciudad

Y así fuimos al metro hasta mi parada , que se llamaba Frederiksberg y donde se encontraba mi alojamiento. Solo tenía que caminar 10 minutos o algo así y eso me pareció bastante fácil, sin embargo, me di cuenta de que estaba equivocado.

Bueno, Kathrine tenía algunas cosas de organización que hacer y, debido a que me esperó más de lo esperado, realmente no podía llevarme a los alojamientos y le dije que estaba bien y que estaba bastante segura de que podría encontrarlos. Así que ella me dio las llaves y me dijo cómo llegar allí y todo.

Pronto se anunció mi estación por megafonía y salí. Busqué esas cosas, por donde se entra y se sale y supe que la salida era donde estaba escrito "uit", que significa "fuera" o algo así. Puse mi tarjeta y eso fue todo, ¡estaba libre y no me podían multar por no pagar! Recuerda que debes siempre pasar el ticket para entrar y pasarlo para salir cuando te muevas por la ciudad de Copenhague, porque si los controladores te pillan, ¡te pondrán una multa bastante cara!

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