Días 9 y 10: Chiang Rai

Después de la bonita experiencia de Chiang Mai hicimos un último tramo en autobús hacia el extremo Norte de Tailandia para llegar a Chiang Rai. Esta zona se encuentra en la frontera con Laos y Birmania y hace un tiempo era una importante ruta de comercio de la droga y más en concreto del opio.

Chiang Rai es definitivamente más pequeña que Chiang Mai y no tiene mucho que ofrecer en cuanto a turismo, no obstante, nos gustó la torre dorada del reloj que sonaba con luces y música a cada hora y el mercado nocturno en la vía principal del pueblo.

Paramos un poco fuera de la ciudad y fuimos andando a ver el espectacular Wat Rong Khun o más conocido como "el Templo Blanco". Este es una construcción reciente y representa una reinterpretación de la arquitectura religiosa histórica tailandesa con una riqueza impresionante di decoraciones y esculturas. Parecía que realmente pertenece a un mundo encantado y cualquier foto que hiciese desde cualquiera de las perspectivas era maravillosa.

Aún en el mismo recinto sagrado había otros edificios igualmente espectaculares para ver, por lo que nos quedamos en este lugar mágico hasta el horario de cierre, disfrutando así también de los espectaculares colores cálidos del atardecer que se reflejaban en la blanca arquitectura. En mi opinión solo por esta parada ya merecía la pena el viaje hasta Chiang Rai.

Al día siguiente dimos otra vuelta por el centro y después fuimos hasta el aeropuerto. ¡Había llegado el momento de coger el vuelo y después el ferry para ir a las islas del sur! Descubre en este artículo dónde terminamos yendo.

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