Conocer una ciudad de la manera más económica posible
Un porque.
Sigo analizando si la frase “conocer una ciudad” será apropiada para el contenido de la siguiente publicación, ya que como se irán dando cuenta, me voy a referir más a vivir la ciudad que a conocerla, pero no quiero arruinarles la trama.
Hay un método casi milenario que sirve para no gastar ni un solo peso en el transporte cuando estas en una ciudad, una técnica que por años utilizaron nuestros antepasados y que probablemente o, mejor dicho, que fue la que hizo que el homo sapiens poblara a todos o casi todos los rincones del mundo, ¿Ya saben de que estoy hablando?, caminar, la simple acción de recorrer un trayecto con ayuda de tus extremidades inferiores y todos los músculos y terminaciones nerviosas que se ven involucradas, y para explicar un poco más mi idea les compartiré la anécdota del día de hoy.
En la fotografía: Pastores Himba, tribu semi - nómada de Namibia, África (Continente donde se cree que habitaron los primeros hombres), fotografía obtenida de (https://www.redbull.com/es-es/las-8-tribus-mas-raras-del-mundo).
Hace casi un mes que llevo viviendo en Nuevo Vallarta, una ciudad muy diferente a lo que estaba acostumbrado (Ciudad de México), ya sea en clima, ubicación de las cosas e inclusive forma de transportarme, es por eso que llevo ya casi esta semana intentando comprarme unas botas de trabajo para ir a la obra , el día de hoy por fin pude hacerme de un poco de espacio para ir a diferentes centros comerciales y buscar unas botas que realmente me convencieran, en Puerto Vallarta hay prácticamente como unos dos o cuatro centros comerciales realmente grandes en los que puedes ir a comprar cosas, La Isla, Galerias, y otras que en este momento no recuerdo con exactitud el nombre, yo fui a las plazas justo en el orden en el que las escribí, la Isla, es como una especie de mall al aire abierto con los locales comerciales dispuestos en una forma irregular orgánica y siendo cruzados por una especie de río artificial (dedico una publicación específicamente a describir este centro comercial), es lo que yo denominaría como el centro comercial más “fresón” donde puedes encontrar las típicas tiendas transnacionales de ropa a buen precio: H&M, Pull&Bear, Bershka, entre otras, yo me día la vuelta por distintas de las tiendas de zapatos para buscar las afamadas botas pero sin éxito alguno, las pocas que encontré eran de muy alto precio y no tan prácticas o funcionales. Seguí mi búsqueda al siguiente centro comercial de los nombrados, Galerías, y fue en ese momento donde comenzó mi recorrido a pie, el primer centro comercial del segundo, tienen quizá una separación de uno o máximo dos kilómetros por lo que puede sonar quizá hasta absurdo el tomar un autobús y esperarlo y realizar mejor una pequeña caminara de diez a quince minutos.
Mi recorrido en Galerías fue algo largo ya que este centro comercial si es más amplio, o al menos esa fue mi percepción, y me tomó bastantes horas recorrerla, el resultado fue muy similar al del primer centro comercial, una serie de tiendas con botas de seguridad de alto precio o que no me convencían por no tener casquillo o el por su diseño, creía que mis opciones se había agotado y no estaba muy seguro de donde podía ir para seguir buscando, saqué el celular de la bolsa y comencé a buscar en Google maps tiendas de botas de seguridad o al menos de zapatos que estuvieran cerca de mi ubicación, encontré una tienda llamada Arra que se encontraba a unas cuantas cuadras pero que era fácil de llegar en autobús, comí en la plaza comercial y me fui en dirección a esta tienda. Mi primer error fue no haber considerado que era domingo a las cinco de la tarde y que generalmente las pequeñas tiendas de ese tipo cierran, me había dado por vencido y aún tenía unas horas para encontrarme con unos amigos para ir al cine, observé en el mapa que la misma vialidad en la que me encontraba es en donde estaba el cine al que íbamos a ir, no me la pensé mucho y comenzó mi ejercicio del día.
En la fotografía: El centro comercial Galerias Vallarta, obtenida de (http://www.tribunadelabahia.com.mx/plasman-traves-del-arte-la-vision-del-cancer-mama/).
Sin más que hacer más que caminar.
Caminé, caminé y seguí caminando, era interesante ir pasando las distintas cuadras y analizando los diferentes locales comerciales, en ocasiones pasas una propiedad abandonada, en algunas otras la entrada a un lindo conjunto residencial, un parque, unas pequeñas plazas con estacionamientos, negocios de comida, y un sinfín de actividades más, y eso, es lo que me encanta de caminar por una ciudad que no conozco, te vas haciendo una idea de las actividades que realizan, de la gente que las frecuenta y de las oportunidades de negocio que podrían existir, por ejemplo, en mi primer caminata de un centro comercial al otro, me topé con muchos negocios de bienes raíces, tours de aventuras, farmacias y torres de departamentos, por lo que entiendes que esa es la zona donde generalmente hay mayor cantidad de turistas y si quieres comer algo meramente típico y económico, deberías de salirte de esa zona, en mi segunda caminata, a pesar de estar en una vialidad muy transitada e importante, se veían negocios más locales, vulcanizadoras, lavados de autos, tiendas mercantiles, central de abastos, negocios de herramientas, una universidad, y negocios relacionados con la vida de los locales, con cosas que día a día pudiera necesitar una persona que vive en la ciudad.
“Conocer la ciudad”.
Ahora voy a tocar un poco el porque de las comillas en esta frase, las ciudades son elementos complejos que están conformados por distintos factores, población, transporte, actividades económicas, historia, sitios de interés, parques urbanos, espacios olvidados, abandonados o vacíos, entre tantas cosas más; y comúnmente cuando viajas y turisteas por una ciudad el termino conocerla se refiere al hecho de haber ido a los distintos puntos turísticos, comido los platillos clásicos del lugar y salido de fiesta en la noche (no digo que esa sea la mentalidad general, pero es lo que comúnmente se piensa) para mí, conocer una ciudad es el vivir, observar y entender los sucesos del día a día, el darse cuenta que una calle está cerrada y genera tráfico en otra porque las escuelas están ubicadas en equis punto, o ver que los domingos los negocios locales cierran temprano porque la población es muy religiosa y si te acercas a una iglesia la vas a ver completamente llena, o que en España están acostumbrados a tener su hora de siesta y es por eso que muchos negocios cierran en un lapso de cuatro horas a la hora de la comida, o que en Italia las personas no acostumbran a desayunar alimentos salados ni pesados y se conforman con un café, un brioche o especie de pan dulce y la mayoría de las veces un cigarro (y por eso muchos tienen dientes amarrillos y un aliento muy peculiar en las mañanas), o que en los Países Bajos es tan popular y arraigada la cultura de la bicicleta que no les extraña ver a una oficinista de falda montada en una sin la preocupación que se le vea la ropa interior, no se si me estoy dando a entender, el caminar te lleva a lugares inesperados, a lugares para comer que nadie te ha recomendado porque pueden ser muy locales y por ver mucha gente y un rico olor te convence a entrar, y un sinfín de cosas más.
En la fotografía: Uno de los lugares que me topé en mi caminata, me llamó la atención la combinación de naturaleza, abandono y "modernidad".
El caminar te consumirá tiempo, mucho tiempo, no verás todos los lugares que te recomiendan las páginas de turismo o los sitios como tripadvisor, acabarás agotado, con una punzada en los pies, y se te abrirá el apetito de manera rotunda, pero al menos para mí, vale completamente la pena, me he encontrado con lugares increíbles y restaurantes riquísimos gracias a eso, en la publicación relacionada con esta “Los lugares que me he topado a pie” les demostraré ejemplos más claros y visuales de lo que les he venido diciendo.
En la fotografía: las famosas botas con casquillo.
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