28 de diciembre: Día de los Santos Inocentes

Con estas líneas, me gustaría dar las gracias a todos aquellos que han estado siguiendo mi blog este último mes. En realidad, estáis leyendo el que será mi último post, ya que he decidido poner fin a mi actividad como bloguero por el estés que me supone tener que escribir mis artículos...

Aquellos a los que haya entristecido la noticia y piensen que echarán de menos mis historias aburridas (aunque supongo que serán muy pocos), no os preocupéis: tan solo habéis sido víctimas de una broma, según manda la tradición española del Día de los Inocentes, que se celebra cada 28 de diciembre. Y si estabais empezando a alegraros y aliviaros porque ya no tendríais que leerme... pues no me leáis.

Puede que sea mejor explicar qué es una inocentada y por qué he empezado este post de una manera tan extraña. Una inocentada es como una versión española del día de las bromas (Fool's Day), que se celebra el 1 de abril en algunos países europeos, como Italia y Gran Bretaña. Como ya sabréis, el 28 de diciembre los cristianos celebran la festividad de los Santos Inocentes, que es la conmemoración del martirio de niños inocentes, a manos de Herodes el Grande, rey de los judíos. Este pasaje, que Mateo narra en su Evangelio, dio lugar a una serie de distintas tradiciones.

De hecho, en la Edad Media, se creía que era un día de mala suerte, en el que no se tenía que llevar a cabo ningún proyecto ni trabajo. Puede que por esta costumbre popular, fue ganando terreno otra nueva tradición, según la cual el 28 de diciembre era un día para hacer travesuras y bromas inocentes a familiares y amigos. La tradición cristiana, junto con algunos elementos paganos, dio lugar a una nueva y rara tradición, conocida como Fiesta de los Locos. Se trataba de un día para hacer bromas, como pegarle a alguien un trozo de papel en la espalda o cambiar la sal y el azúcar. Otra broma muy común consistía en cogerle prestado algo a un amigo, no devolvérselo y burlarse del dueño diciendo "inocente palomita que te dejaste engañar".

De hecho, todavía se suelen hacer este tipo de cosas en España, Latinoamérica y Filipinas. Además, el desarrollo de la tecnología y de los medio de comunicación han dado lugar a una versión más moderna de la tradición. Así, los periódicos publican noticias falsas, dibujos animados salidos de cómics o artículos absurdos. Por ejemplo, el año pasado una de las bromas que más éxito tuvo fue la que gastó jugador de fútbol Gerard Piqué, quien anunció que su hijo había nacido mucho antes de que ocurriera en realidad. Otro jugador de fútbol, Thibaut Courtois, fue víctima de una broma de uno de sus compañeros de equipo. Este año, le ha tocado al jugador italiano Luca Toni, del que se ha dicho que ha firmado un contrato con el F. C. Barcelona. ¡Le dieron un buen susto a los seguidores del Verona F. C. (su auténtico equipo) y puede que a los blaugranas también!

Este año, le he echado un vistazo a la prensa, en busca de inocentadas divertidas. La más interesante la he encontrado en esta noticia, publicada en la página web de RTVE, en la que se habla de una apertura en la política social del gobierno de China. En este caso, habría sido mejor que, en lugar de una inocentada, se hubiese tratado de una noticia real.

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