Un día en Washington D.C.

Un día en Washington D. C.

Antes de mudarme a Estados Unidos, hice una lista de las ciudades que quería ver y, por supuesto, puse la capital de Estados Unidos: Washington D. C. La visité durante mi viaje por el este de Estados Unidos y, en este post, os hablaré de mi experiencia allí.

Lo creáis o no, un día es suficiente para ver todo lo que Washington D. C. ofrece. Algunas personas que conozco, dicen que Washington D. C. es una ciudad muy aburrida para vivir y puedo llegar a entender el por qué. Es una ciudad preciosa, pero muy pequeña, por eso se puede visitar en solo un día y no tendréis que ir corriendo de un lado a otro.

Uno de los edificios más bonitos de Washington D. C.

La mejor época para visitarla

A cualquiera que le preguntéis que cual es la mejor época para visitar Washington D. C., os responderá que en primavera. Si le preguntáis por qué, os dirán: "por los cerezos en flor". Ahora, buscad "cerezos en flor Washington D. C. " y si vuestro primer pensamiento al verlo no es "¡madre mía! ", "¡Dios mío! " o "¡qué preciosidad! " os debo una cerveza.

Si no podéis visitar Washington D. C. en primavera, no os preocupéis. La ciudad es preciosa todo el año. Suele estar llena de gente ya que, al fin y al cabo, es la ciudad donde está la Casa Blanca y se celebran muchos eventos y conferencias que también atraen a mucha gente, pero eso forma parte de la experiencia de visitar Washington D. C.

¿Qué ver?

A pesar de que Washington D. C. es una ciudad pequeña, tiene muchas atracciones turísticas. Estas son mis favoritas:

• National Mall y sus numerosos museos

National Mall no es un centro comercial a pesar de su nombre en inglés. Es un largo paseo que ocupa todo el camino desde el Capitolio hasta el obelisco. Sin embargo, el National Mall no es un paseo como otro cualquiera, está lleno de museos y todos ellos merecen la pena visitarlos.

Este es el final (o el principio, dependiendo de por dónde empecéis) del National Mall con el edificio del Capitolio al fondo.

Si solo vais a estar en Washington D. C. poco tiempo, puede ser un poco difícil decidir qué museos visitar. Pero, aquí estoy yo para hacer vuestro trabajo más fácil; los museos que yo visité y que más me gustaron fueron: el Museo Nacional del Aire y el Espacio (con una exposición de rocas lunares), la Galería Nacional de Retratos (muy interesante y divertida, además si tenéis Snapchat, podéis utilizar el filtro de face swap con algunos de los retratos, pero no os riáis muy fuerte, que estáis en un museo), el Museo Nacional de Historia Natural (es enorme, pero tiene exposiciones muy interesantes) y la Galería Nacional de Arte (reservad unas cuantas horas para visitarla).

La mejor parte de la mayoría de museos de Washington D. C. es que no hay que pagar entrada. Podéis donar algo de dinero, pero nadie os obligará a hacerlo.

• El obelisco y el estanque reflectante

Cuando os acerquéis al obelisco os daréis cuenta de que es mucho más alto de lo que parece a lo lejos. Tiene un ascensor en su interior para poder subir hasta arriba del todo. Por desgracia, cuando yo fui lo estaban restaurando y no pude ver Washington D. C. desde arriba, pero me han dicho que es algo espectacular.

¿A que es precioso?

El estanque reflectante es una gran masa de agua en la que podéis ver los edificios reflejados en él y hacer bonitas fotos. No os metáis dentro o asustaréis a los patos que habitan en el estanque.

Esta es una parte del estanque.

• El Capitolio

Este es seguramente el edificio más famoso de Washington D. C. aparte de la Casa Blanca y es exactamente igual que el Capitolio de La Havana, México. Podéis hacer una visita guiada por él, pero os tenéis que apuntar con bastante antelación. La visita es gratis, pero tenéis que pasar un control de seguridad antes de entrar. Yo lo visité y me encantó. Nuestra visita fue muy educativa y aunque teníamos un tiempo limitado para verlo y teníamos que movernos de un lado a otro constantemente porque venían más grupos detrás nuestro, no fue una visita para nada estresante.

Pero no solo el interior del Capitolio es precioso. También es muy bonito por fuera. Además, el gran césped que tiene en frente es perfecto para hacer un picnic o para sentarse y admirar el Capitolio, así como otros edificios famosos de Washington D. C.

El Capitolio es uno de los edificios más famosos de Washington D. C.

• La Casa Blanca

Lo primero que pensé cuando vi la Casa Blanca por primera vez fue "¿esto es?, pero si es muy pequeña". Y es verdad, la Casa Blanca parece mucho más grande en las fotos. Pero la arquitectura es preciosa. Al igual que el Capitolio, podéis visitar algunas partes de ella. Para hacerlo, tenéis que contactar con vuestra embajada y os emitirán un permiso.

En este punto, me gustaría destacar que, por desgracia, no todos los países pueden visitar la Casa Blanca. Cuando me puse en contacto con mi embajada para preguntar si la podía visitar, me dijeron que no podían admitir mi petición porque "estaban centrados en otros asuntos". Esa fue su contestación. Así que nada.

• Embassy Row

Esta es otra parte exclusiva de Washington D. C. Embassy Row es el nombre que recibe una calle llena de embajadas de varios países de todo el mundo. Lo más curioso es que algunas de las embajadas están construidas con el estilo arquitectónico que representa a ese país. Es cierto que la calle Embassy Row está situada lejos del centro de Washington D. C., pero merece totalmente la pena visitarla.

• El Pentágono

El Pentágono es otro de los edificios característicos de Washington D. C. Esta monstruosidad de edificio tiene la forma de un pentágono, de ahí el nombre; es tan grande que tiene su propio código postal. Si trabajara ahí, estoy segura de que tendría un problema para recordar dónde está mi oficina.

No os podéis hacer una idea de lo grande que es el Pentágono si solo véis un lado desde la calle. Lo que me gustaría hacer es verlo con vista de pájaro, pero doy por hecho que es un deseo inalcanzable, ya que habrán infinitas normas con respecto al espacio aéreo de Washington D. C.

Para satisfacer vuestros antojos de dulce, tenéis que ir al restaurante Good Stuff Eatery y probar su especialidad "batido de nubes tostadas". Está delicioso y no es tan caro como puede parecer tomarse un batido en la capital. Podéis elegir dos tamaños (el grande y el pequeño) y varios sabores, entre los que se incluye el de tarta de lima.

Comida, bebida y alojamiento sin salirse del presupuesto

Washington D. C. no es el destino más barato al que podéis viajar, pero como la estancia será corta, vuestra cuenta no se quedará en números rojos.

Si estáis dispuestos a gastar mucho dinero en comida, en Washington D. C. encontraréis increíbles restaurantes. Si ese no es vuestro caso, podéis comer en alguna de las cadenas de restaurantes que la ciudad ofrece. Eso es justo lo que mis amigos y yo hicimos, comimos en Domino's Pizza y el dinero que ahorramos lo utilizamos para pagar la entrada de uno de los museos.

En cuanto al alojamiento, en este caso, Hostelworld es mejor que AirBnb. Mis amigos y yo nos hospedamos en un hotel que estaba situado a quince minutos de distancia de la Casa Blanca y pagamos la mitad de dinero que hubiéramos pagado si nos hubiéramos alojado más cerca.

También buscamos apartamentos de AirBnb, pero ninguna de las opciones era la adecuada para nosotros. Los sitios o eran muy caros o estaban muy lejos de todo y sin acceso a transporte público.

Unos cuantos consejos

En primer lugar, si podéis, evitad ir en coche por Washington D. C. Los parkings son inexistentes y tendréis que estar dando vueltas para encontrar aparcamiento durante más de media hora. Hablo desde mi propia experiencia. Es mucho más fácil ir andando o coger transporte público (aunque es bastante limitado, pero eficaz). Si pensáis utilizar transporte público, elegid el metro. Podéis comprar una tarjeta prepago y meter dinero en ella, en lugar de tener que pagar cada viaje.

En segundo lugar, reservad el alojamiento con antelación. Al ser la capital y al mismo tiempo una ciudad pequeña, las opciones de alojamiento más baratas se reservan con mucha antelación. Si queréis evitar el estrés de encontrar alojamiento en el último momento, buscadlo antes de comenzar el viaje. Reservar con antelación significa conseguir precios más bajos, algo muy bueno, sobre todo en Washington D. C. (irse de vacaciones a esta ciudad sale muy caro).

Y por último pero no por ello menos importante, prestad atención a lo que os rodea. Al ser la capital de Estados Unidos, Washington D. C. tiene muchos agentes de policía, pero eso no quiere decir que bajéis la guardia completamente. Y al igual que en cualquier otra gran ciudad, hay partes de Washington D. C. que es mejor evitarlas.

Una pequeña conclusión

Tengo que decir que no me impresioné al ver Washington D. C. como pensé que lo haría. No digo que no sea una ciudad increíble y, sin duda, tenéis que incluirla en vuestra lista de ciudades que visitar en Estados Unidos, pero yo no cruzaría el océano solo para verla.

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