Por qué decidí aprender alemán

Cuando me preguntan por qué decidí venir a Alemania de Erasmus, la primera respuesta que me viene a la mente es, porque quería aprender alemán.

Aprender idiomas, no es sólo una herramienta profesional, es mucho más que eso. Es el medio para romper las estructuras que nuestra lengua materna ha fijado previamente en nuestra mente; es la forma en la que, sumamos una nueva ventana a través de la que ver el mundo.

Porque eso son los idiomas, la forma en la que transmitimos lo que hay dentro de nosotros, y las posibilidades que éstos nos ofrecen para llevarlo a cabo, son limitadas, y determinarán, a su vez, la forma en la que acabemos pensando.

La verdad que el tema de los idiomas y la comunicación me interesa mucho, y hay dos vídeos muy inspiradores, ambos son charlas de TED, que hablan de ello.

El primero, se titula "Cómo tu lenguaje corporal puede modelar quién eres", por Amy Cuddy. En este vídeo, Cuddy nos explica, con evidencias científicas, cómo la forma en la que nos expresemos puede afectar la forma en que seamos. De esta forma, si decidimos adoptar una postura física que nos engrandezca, nuestro interior se engrandecerá con ella.

Esto se relaciona con el tema de los idiomas en el sentido en el que, la forma en la que hablemos, determinará también la forma en que seamos. Y el hablar distintos idiomas, puede darnos distintas perspectivas de la realidad, y, por lo tanto, abrir nuestra mente.

El segundo vídeo, por Lera Boroditsky especifica más sobre lo que estoy hablando, y se titula, "Cómo el lenguaje modela la forma en que pensamos". Boroditsky nos habla aquí sobre cómo el idioma que hablamos influencia la perspectiva que tenemos del mundo.

Un ejemplo muy gráfico que hace en el vídeo es como, en el idioma español, la luna siempre se ha utilizado para referencias poéticas, identificándose con los valores femeninos, mientras que el sol, se concibe como un concepto más agresivo, más inclinado a los valores masculinos. En cambio, en alemán, donde la palabra Sonne (sol) es femenina, y Mond (luna) es masculina, estos valores relacionados a las palabras se invierten, cambiando el concepto mental de cada uno.

La luna. Fuente: www.pixabay.com

Esto es tan sólo uno de los miles de ejemplos que hay de que los idiomas son las gafas a través de las que vemos el mundo. Las estructuras gramaticales, la importancia que se le da al sujeto frente al verbo dentro de una frase, todo eso, cae en nuestro subconsciente, y va de la mano de los valores de cada cultura.

Pero hay otros motivos más evidentes por los que aprender un nuevo idioma. Los idiomas, a fin de cuentas, son barreras interculturales; y cuando los aprendemos, las rompemos, uniendo las distintas culturas del mundo. Conocer un nuevo idioma nos permite conocer nuevas personas, y nos abre la puerta a nuevas oportunidades.

Fuente: www.pixabay.com

Un ejemplo de cómo utilicé en una ocasión el alemán en mi Erasmus para llevarme un bonito recuerdo, fue en un tren de vuelta de una excursión a un pueblecito de Bavaria, donde, al no haber sitios libres, me senté con cuatro señoras alemanas de la localidad. Ellas no podían hablar inglés, pero yo sí podía hablar alemán, y les hizo tanta ilusión encontrarse con una estudiante extranjera que estuviera aprendiendo su idioma, que se pasaron todo el trayecto contándome cosas sobre Bavaria, y su vida en el pequeño pueblecito.

Y por supuesto, aprender un idioma, especialmente en el mundo globalizado en el que vivimos hoy en día, queda muy bien en nuestro currículum, y puede facilitarnos la obtención de un puesto de trabajo, o incluso la posibilidad de buscarlo fuera de nuestro país natal en un momento dado. No se me ocurre mejor ejemplo, que el mío propio, ya que gracias al alemán, he tenido la oportunidad de trabajar durante mi Erasmus, y ganar un dinerillo extra. Cuento más sobre eso en mi post, "Trabajar en Erasmus".

Fuente: www.pixabay.com

Además, hoy en día, con tantas apps disponibles para aprender distintas lenguas, es mucho más fácil aprender un nuevo idioma, ya sea en casa, como en el autobús de camino a la Universidad...¡Nos quedamos sin excusas!

Y bueno, aquí acaba el post de hoy. En él, os he dejado los que son para mi de los motivos principales por los que aprender una lengua extranjera, pero estoy segura de que hay muchos más,... ¿Estás dispuesto a descubrirlos?

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