El Carnaval I

Hablar de los carnavales en España es sinónimo de hablar de fiesta y buen rollo. Seguramente los más conocidos de toda España, sean los de Cadiz, con su famoso concurso de chirigotas y desfiles o los de Las Palmas de Gran Canaria y Tenerife, donde el colorido, la elección de la reina del carnaval y el buen tiempo, crean una magnífica fiesta. Pero los carnavales, son una fiesta que se vive mucho en muchos puntos de toda España, teniendo pueblos donde es una fiesta con mucha historia y otros donde cada vez gana más enteros.

A nivel internacional, seguramente los carnavales más conocido, admirados y deseados, sean los de Río de Janeiro, Sao Paulo y en general los de las grandes ciudades brasileñas, donde la samba, los desfiles, el calor y la gente forman un gran espectáculo. Dentro de Europa, algunos de los más conocidos son además de los ya mencionados carnavales de Cádiz y Canarias, los de Venecia, que cuentan con mucha história, tradición, y de los cuales se puede decir que son más “serios”, con trajes diseñados especialmente para la ocasión y con sus distintivas máscaras.

Al fin y al cabo, los carnavales, son una fiesta y como en toda fiesta el objetivo principal de todo participante tiene que ser el pasárselo bien. La mencionar la expresión, “hacer el carnaval”,  nos vienen a la cabeza varias cosas, pero a mi la que primero me viene es el buen rollo, las risas y el perder la vergüenza por un rato. Por mi zona, donde yo vivo, en Segovia y donde yo estudio, Valladolid, los carnavales no son una fiesta que tenga mucha historia o tradición, pero si que se nota que es un fiesta que gusta a la gente. En la mayoría de casos, cuando sales de fiesta durante el fin de semana que duran estos, la gente va disfrazada, va a pasárselo bien y le gusta identificarse con la fiesta, aunque siempre hay gente a la que lo de disfrazarse no le gusta y sale sin disfrazar.

Pero de los carnavales que más me gustaría hablar y lo que más conozco, son los carnavales de mi pueblo, los carnavales de Chañe, en la provincia de Segovia.

Los carnavales de este pueblo, coinciden con la fiesta de los “quintos”, que son aquellos jóvenes que antiguamente iban a irse a la mili y el celebrar esta fiesta, les servía tanto para pasarlo bien antes de marchar como para recaudar algo de dinero antes de irse, con la “perra de carnaval”, de la que más adelante hablaré.

Como digo, los carnavales empiezan el viernes de carnaval y no acaban hasta el martes de carnaval, por lo que duran unos cinco días. El viernes, los “quintos” suelen salir a cenar y a tomar algo por los pinares, el río o cualquier sitio donde les venga bien, ya que no hay unas normas establecidas de cómo tiene cada uno que celebrarlos. Se suelen juntar más de una sola quinta, para ser más gente, aunque antiguamente, se juntaban solo los que ese año cumplían dieciocho años y los que eran de un año después. En mi caso nos juntamos hace ya un par de años o tres, todos mis amigos, de varias quintas diferentes, sin importar si éramos mayores o menores.

El día bueno para todo aquel que sale de fiesta es el sábado por la noche, que es el día que todo el mundo que sale se disfraza, o al menos casi todo el mundo. El sábado de carnaval también aprovechan los que fueron quintos hace ya años para salir todos juntos a cenar y seguramente recordar batallitas. Nosotros normalmente el sábado solemos movernos a otros pueblos más grandes o hay quien se acerca a Valladolid o Segovia de fiesta. Pero antes de todo esto, el sábado por la tarde, es día de ir a tomar algo con los amigos por los bares, eso sin, sin el disfraz aun puesto. Los quintos suelen pasar el día por ahí, dependiendo de cada uno donde quiera ir. Cuando yo fui quinto por ejemplo, pasamos el día en el pinar, comimos allí y estuvimos toda la tarde allí.

El domingo es un día sobre todo pensado para los niños, ya que se reúnen todos disfrazados en la discoteca a lo largo de la tarde y mientras padres y madres se pasan por los bares del pueblo. La gente que ha salido el sábado, el domingo suele reservarse, ya que menos para los niños que el lunes no tienen clase, para el resto tanto estudiantes de secundaria como universitarios y trabajadores, el lunes es día laboral. Los quintos al coincidir que no tienen clase el lunes, si que se suelen reunir para pasar la noche, la tarde o todo el día por ahí...

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