Deja de buscar dónde ir de Erasmus: aquí tienes 8 motivos para ir a Salamanca

Salamanca es una provincia y una ciudad de Castilla y León, en la península Ibérica. Hogar del Lazarillo de Tormes, Miguel de Cervantes y Yann Martel (autor de La vida de Pi), Salamanca es conocida por su centro histórico, considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, su clima... cambiante, y por tener las mejores fiestas de España. Después de 10 meses viviendo en esta ciudad, puedo decir que realmente me cautivó y que no me habría ido de Erasmus a ninguna otra parte del mundo.

Si las fotos de esta maravillosa ciudad no han sido suficiente para convencerte, aquí tienes 8 razones por las que Salamanca es la mejor ciudad para irse de Erasmus (sin ningún orden en particular):

1. Su belleza

No me cansaré de decirlo, pero Salamanca es realmente preciosa. Da igual adónde vayas, siempre estarás rodeado de historia; hay dos catedrales, una antigua y una más moderna, infinitas iglesias, la plaza mayor más bonita de España... Incluso las facultades están hechas de arenisca y llenas de cultura. Además, solo llueve unas tres veces al año, así que incluso en mitad del invierno la ciudad está preciosa y te pone de buen humor salir de casa a las nueve de la mañana, de resaca y oliendo a kebab, para dirigirte a una clase a la que ni siquiera quieres ir.

2. Coste de vida

Los precios en Salamanca parecen de chiste; puedes vivir como un rey por cuatro duros. Puedes alquilar un apartamento por 150-250 euros al mes, dependiendo de lo grande que quieras la cama o la habitación, y te bastará con 100-150 euros al mes para gastar en comida y bebida. De hecho, es más barato salir a comer o tomar algo en un bar de pinchos en Salamanca que cocinar en casa. Sin embargo, no te recomiendo que lo hagas: cerveza y tortilla todos los días no es un menú muy saludable.

3. Bares y restaurantes a montones

Salamanca no solo es barata, sino que hay tanta variedad de restaurantes que puedes ir a uno cada día durante un mes sin repetir (insisto, no es muy recomendable comer tortilla y beber cerveza todos los días, pero si lo fuera, Salamanca sería el lugar perfecto para vivir así). Además, Salamanca es y será siempre mi ciudad favorita para salir de fiesta. Acabarás en una relación de amor-odio con The Irish Theatre y sus martes por la noche: pagas 5 euros de entrada y tienes 10 copas gratis. No hace falta que diga nada más. Hay un bar para cada ocasión, una cafetería para cada resaca y un restaurante para cualquier antojo que tengas. No pasarás hambre en Salamanca.

4. La gente

La gente en Salamanca se preocupa por ti de verdad. Acabarás conociendo a tus vecinos, a la gente que con la que te cruzas todas las semanas, al señor de la tienda que quiere practicar el poco inglés que sabe contigo todos los domingos por la mañana cuando lo único que quieres es acostarte... Como estudiante Erasmus, lo más probable es que destaques un poco entre la multitud y que la gente te recuerde; pronto tendrás que ir antes a los sitios para que te dé tiempo a hablar con todo el mundo.

5. Su prestigiosa universidad

La Universidad de Salamanca, además de ser impresionante, es el Oxford español. Se trata de la universidad más antigua de España y a día de hoy sigue siendo una de las universidades más prestigiosas de Europa.

6. Su ubicación

Salamanca es una ciudad con todas las ventajas de una ciudad pequeña. Hay un sentido de comunidad y acabas conociendo a todo el mundo. Sin embargo, como Madrid está a menos de dos horas en tren no quedas atrapado en la burbuja salmantina y puedes escaparte el fin de semana, bien sea para ir de compras a Madrid, bien para coger un vuelo a Barcelona desde el aeropuerto de Valladolid. Salamanca es lo suficientemente grande como para no tener que cruzarte con quien no quieres, pero bastante pequeña para encontrar a tus amigos si te pierdes una noche de fiesta, en cuyo caso seguro que haces más amigos intentando encontrarlos.

7. La comida

Sé que esto tiene mucho que ver con los restaurantes... Pero madre mía, ¡la comida! La península Ibérica es famosa por su jamón y está muy claro por qué. El jamón en Salamanca es de los mejores que probarás, sobre todo el jamón de La Alberca, donde se rumorea que el alcalde es un cerdo que se pasea por las calles. Si te lo cruzas, tienes que darle de comer y acariciarlo como muestra de respeto. Y eso no es todo: en Salamanca saben cómo hacer buenas tapas. Incluso el 100 Montaditos aquí es mejor que en otros sitios.

8. El idioma

Siempre se nos recomienda que escojamos bien dónde nos vamos de Erasmus porque volveremos con el acento de esa ciudad. En Salamanca, al igual que en Madrid, no tienen un acento muy marcado ni un habla muy dialectal. La Universidad de Salamanca es famosa por sus estudios de Filología Hispánica, lo que la convierte en el sitio ideal para perfeccionar el idioma de modo que te podrás hacer entender en cualquier país de habla hispana.

Galería de fotos