¡Ciao, Roma! El caos del transporte

Llegué a Italia de la siguiente manera: mis padres, cada uno con dos maletas y la mirada angustiada, y yo cargada como una mula mis tres sombreros en la cabeza, con una mochila y otras dos maletas, una sonrisa de oreja a oreja y ni una sola palabra de italiano en la boca. Tampoco tenía ni la menor idea de lo que me deparaba mi Erasmus en Roma. Cuando por fin puse los pies en tierra firme en el aeropuerto de Ciampino, di el pistoletazo de salida al mejor año de mi vida.

Para que puedas vivir tu año Erasmus tan intensamente como yo lo hice, te voy a dar unos consejos, trucos y buenos destinos que te vendrá bien tener en la chistera. Además, también te voy a hablar de mis descubrimientos y, en definitiva, hablar desde mi propia experiencia en la gran Roma.

Transportes: errores que cometí y que no puedes repetir

En un mundo ideal hubiera llegado a Roma un mediodía. Habría recogido mis maletas en cinco minutos y cogido el bus para ir a la ciudad que esperaba a todos los demás turistas a la salida del aeropuerto. Veinte minutos más tarde hubiera llegado al centro, lista para conquistar la ciudad...

En un mundo ideal. Pero imposible en una ciudad como Roma, donde el transporte público es un verdadero quebradero de cabeza. Total, que mi llegada a Roma fue más bien así: llegada a las 11 de la noche, 30 minutos para recuperar mis maletas con dos ruedas menos que cuando las consigné antes de despegar. Y después 1 hora de espera para, por fin, conseguir un taxi lo suficientemente grande que no nos quisiera estafar con el precio. Al final llegué al albergue a la 1 de la madrugada tras una carrera más bien movidita por parte del conductor y una rueda de menos en mi maleta. Por eso, déjame que haga tu llegada a Roma un poco más fácil.

Para empezar, tienes que tener en cuenta que en Roma existen dos aeropuertos: Fiumicino y Ciampino. Dependiendo del modo de transporte que elijas tardarás entre 30 minutos y 1 hora en llegar al centro de la ciudad y pagarás entre 3 € y 50 €.

¡Ciao, Roma! El caos del transporte

Transporte: las distintas alternativas desde el aeropuerto a la ciudad

El taxi es la manera más práctica porque te deja directamente en la dirección de tu alojamiento. Pero ten cuidado, a pesar de que las tarifas estén reguladas, es probable que intenten estafarte. Sobre todo si llegas a altas horas de la noche. Asegúrate de establecer bien el precio con el chófer antes de subirte (el precio de tanto la carrera como el transporte de equipaje). No dudes en informar a los otros turistas sobre las tarifas, si no lo haces te arriesgas a que los demás taxistas se aprovechen. Las tarifas deben estar siempre escritas en las puertas de los taxis oficiales de Roma:

  • Fiumicino - Centro de Roma = 48 €
  • Ciampino - Centro de Roma = 30 €

los buses: la alternativa más sencilla. Con esta opción no te expones a ninguna estafa porque todo está escrito en las páginas web de las compañías (Busshuttle, Terravision, TAM, Cotral, Airportbus). La tarifa es de 7 € y las salidas son bastante frecuentes (más o menos cada media hora). Cuenta con que son de 45 minutos a 1 hora de trayecto. Todas estas compañías dejan en la estación central Termini, pero algunas hacen también paradas por el camino. Por eso te aconsejo que eches un vistazo a las páginas web para saber más sobre los horarios en función del aeropuerto así como las paradas disponibles. No hace falta que reserves por Internet ya que rara vez los buses se llenan. Así que siempre podrás comprar los billetes en el mismo sitio:

  • En Fiumicino, los buses se encuentran al fondo de la terminal 3, y las taquillas están situadas a la derecha antes de la parada de bus. Ten en cuenta que los chóferes no venden billetes tendrás que pasar por la taquilla antes de ir al bus.
  • En Ciampino, los buses se encuentran justo en frete de la salida del aeropuerto y podrás comprar los billetes en las cajas situadas dentro del miso aeropuerto o directamente.

El Leonardo Express desde Fiumicino es la lanzadera más rápida de todas para Fiumicino. El trayecto hasta la estación de Termini dura 35 minutos. El bus sale cada 15 a 30 minutos, depende de a qué hora llegues. Un billete cuesta 14 € y se puede comprar por Internet o en las máquinas Trenitalia de la parada de buses.

Si llegas a Ciampino, el bus urbano y el metro son las opciones más baratas. Con la línea 750 podrás bajarte en Laurentina y coger el metro B. Con la línea 520, podrás llegar a la línea A a través de las paradas de las estaciones Cinecittà y Subaugusta.

Hay distintos tipos de billetes:

  • 1 trayecto= 1, 50 €
  • 24 h= 7 €
  • 48 h= 12, 50 €
  • 72 h= 18 €
  • 7 días= 24 €

Transporte: las distintas alternativas para moverse por Roma

Dentro de la ciudad podrás optar por subirte al metro, tranvía o bus con este tipo de billete. Se compran en los tabbachi (estancos) o en las máquinas Atac situadas en las estaciones de metro. Cuidado porque los chóferes no venden billetes.

¡Ciao, Roma! El caos del transporte

Una vez hayas llegado a la estación solo te quedará ir al alojamiento. Para ello te aconsejo ir andando en el caso de que esté a menos de un kilómetro y medio de la estación. Si no, tendrás que coger el metro, el bus o el tranvía (o bien una combinación de los tres) y, si es así, buena suerte amigo. Sin exagerar, el transporte es uno de los grandes puntos débiles de Roma.

¡Ciao, Roma! El caos del transporte

Con un poco de suerte, tu alojamiento estará cerca de una línea de metro y no tendrás mayor problema. Existen tres líneas: A, B y C, y los mapas y paradas pueden consultarse en la misma estación. Si tienes que optar por otro medio de transporte, te aconsejo usar el tranvía y el bus como última opción. Desgraciadamente, la frecuencia de los buses deja que desear. Frente a esto no puedes contar ni con Google Maps, Moovit o el sitio oficial de Atac, solamente con tu paciencia.

Por último existe una línea de tranvía un tanto particular: la línea amarilla (el RMG) que sale de Laziali, al sur de la estación y va hasta Centocelle. Es una línea bastante fiable, pero que apenas se recomienda en las aplicaciones. Entre otras sirve la estación Porta Maggiore que tiene correspondencia con muchas otras líneas de tranvía.

¡Ciao, Roma! El caos del transporte

En cualquier caso, se paciente y prevé un margen de tiempo en tus horarios (sobre todo entre tu aterrizaje y llegada al alojamiento). Te aconsejo utilizar la aplicación Moovit combinada con Google Maps para los trayectos a pie. Tampoco dudes en preguntar por el camino, los italianos son muy serviciales.

Recapitulemos:

  • Asegúrate de la tarifa del taxi antes de subirte.
  • Consulta los horarios de los bus lanzadera con antelación.
  • Prevé un margen de tiempo entre tu aterrizaje y la llegada al alojamiento (de 1 hora y media a 2 horas).
  • Ve andando, en metro o en tranvía antes que en bus.

Otras cosas a tener en cuenta:

  • Ten siempre contigo dinero en efectivo, muchos establecimientos no aceptan tarjeta.
  • Presta atención a tus efectos personales en los transportes públicos (ten a la vista tu bolso o una mano en él a todo momento).
  • ¡Para moverte por el centro de Roma basta con ir andando!
  • Puedes hacer tu título de transporte mensual o anual en los puestos de Atac, situados en la estación de Termini o en los estancos para el abono mensual.

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