5 Formas baratas de viajar en Italia

Italia es un país fabuloso para hacer Erasmus. Cuenta con una historia muy rica y más del 70% del Patrimonio Mundial de la UNESCO, nada como disfrutar y visitar los maravillosos centros históricos, los pueblos perdidos en medio de la belleza natural de las montañas y los ríos... Sin embargo, viajar implica desplazarse, y esto no siempre es barato. Desde Milán, tengo mucha suerte, y hay muchas maneras de evitar estas barreras.

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Llegada a Milán, en la Stazione Centrale - Septiembre de 2016.

1. Trenitalia

Trenitalia es la red pública de trenes en Italia. Generalmente, no es la forma más barata de viajar, pero nada como estar atento. Para las ciudades más cercanas, como Como y Bérgamo, por ejemplo, definitivamente vale la pena. Para los residentes en Italia con menos de 26 años todavía es posible hacer la CartaFrecciaYoung (carnét joven), un carnét que permite tener descuentos del 50% en los trenes rápidos interurbanos cuando se reserva con al menos dos días de antelación. Esta tarjeta se puede hacer en línea (aqui) o en cualquier mostrador físico de Trenitalia, de forma gratuita. ¡Después solo queda disfrutar!

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2. Flixbus

Flixbus es una empresa de autobuses que funciona en Europa Central. Hay muchas conexiones entre diferentes ciudades y los precios van desde los 5€. Los autobuses son cómodos, hay un baño a bordo, enchufes para cargar los ordenadores, los teléfonos móviles y cualquier parafernalia electrónica. Hay wi-fi a bordo y todos los trabajadores son en general muy serviciales y amables.

Para encontrar buenos precios, es necesario reservar las entradas con dos semanas de antelación. Cuanto antes, más barato. Flixbus tiene incluso promociones muy a menudo y si cambias de opinión, puedes cancelar el billete hasta justo antes de la hora de salida, creándose un vale para ser usado más adelante. Para Android e Iphone, también hay una aplicación que puede ser usada para hacer reservas o cambios en cualquier lugar en ausencia de un ordenador.

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3. Ryanair

Ryanair es una de las compañías aéreas de bajo coste más conocidas de Europa. En Milán, opera en dos aeropuertos: Milán Malpensa y Milán Bergamo. Los precios son más que atractivos (el billete más barato desde Milán Bérgamo es hacia Bruselas y cuesta unos 7,99 euros - cifras de noviembre de 2016). Siempre hay algunas limitaciones: se paga el equipaje de mano y la elección de los asientos, pero nada que no se pueda evitar. Es una excelente manera de viajar a los países fronterizos o al sur de Italia, como Bari y Sicilia. Siempre hay una pequeña tasa de compra en línea que es alrededor de 1€.

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4. BlaBlaCar

BlaBlaCar es una aplicación que permite encontrar a conductores con quien compartimos salida y destino por un valor simbólico acordado en la salida. Aunque todavía no se usa mucho en Portugal, aquí en Italia es muy normal y hay varias opciones. Se paga mucho más cuando los viajes son a ciudades cercanas. Por ejemplo, fui a Turín pagando 6€ ida y 6€ vuelta con una pareja franco-italiana y fue muy divertido. Conoces gente muy interesante y divertida.

Importante añadir que se puede elegir el género del conductor. La página cobra una tasa de reserva por viaje que también ronda el euro. Basta solo con buscar en la página los horarios y los precios que más nos interesan. El pago puede hacerse con tarjeta de crédito o Paypal. También hay una aplicación para Iphone y para Android, extremadamente útil.

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5. Autoestop

Esta es la opción más barata de todas, pero requiere algo de suerte. Incluso hay un gran número de viajeros que ya utilizan esta técnica como una forma de ahorrar dinero en sus viajes. Los italianos son muy amables y están abiertos a esta idea. No lo he intentado todavía pero estoy dispuesto a hacerlo y ya lo he hablado con algunos colegas que también hacen Erasmus aquí en Italia. He escuchado muchas historias positivas. Sólo tienes que seguir las reglas de cortesía, elegir un lugar estratégico (entradas y salidas de autopistas o autovías) y esperar a un conductor simpático. La única desventaja es que no puedes elegir la hora de salida o llegada, lo que puede comprometer otras combinaciones y citas. ¡Pero hay que intentarlo!

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