4 cosas que hacer antes de irte (por tu salud)

Tu salud física y mental, dos cosas que son muy importantes para tu bienestar general. En la actualidad, parece que todos tenemos algún tipo de problema de salud, ya sea dermatitis o asma.

Así que, ¿cómo puedes asegurarte de ir bien equipado antes de irte a vivir a otro país unas semanas, meses o incluso un año? Aquí tienes mi plan de cuatro pasos de qué hacer antes de irte para asegurarte de que tu salud física y mental no se resienta. Como estudiante con problemas de salud tanto físicos como mentales, esto me ha ayudado a sobrellevarlo tanto en casa como en el extranjero y a estar tranquila, ¡algo muy necesario cuando tienes que mudarte y acostumbrarte a un país nuevo!

1) Visita a tu médico de cabecera y dile que te vas

Yo esto lo dejé para casi lo último (dos semanas antes de coger el avión, no lo intentéis, os vais a arrepentir) y me di cuenta de que es algo que deberías quitarte de encima al menos un mes antes de irte. Si tienes una problema de salud serio o una enfermedad mental que pueda ponerte en peligro a ti o a otros, es buena idea hablar con tu médico de cabecera con antelación para que te puedan hacer una revisión (análisis de sangre, de orina, etc. ), decirte cómo lidiar con tus dolencias, qué tienes que hacer cuando llegues, el papeleo que tienes que rellenar y tener tiempo para recetarte medicamentos, así como para que tú tengas tiempo de recogerlos (¡sobre todo si es medicación para tres meses! ).

2) Pide una carta médica (si tienes un problema de salud importante)

Yo lo recomiendo aunque no sea así, da igual lo pequeño o insignificante que sea tu problema. Antes de irte, pídele a tu médico de cabecera una carta (igual te cobran por imprimirla, pero vale la pena) en la que detalle cualquier problema de salud que tengas y la medicación que estás tomando, para poder informar a un médico de otro país lo antes posible y en caso de que necesites medicación rápidamente. Hace que sea más fácil explicar tu problema a tu médico extranjero, sobre todo para que puedan ver el estado del problema, los resultados de análisis recientes para hacerse una idea de tu estado de salud actual, la dosis que estás tomando y la medicación que necesitas.

3) Hazte con todo lo que necesites (vitaminas, analgésicos, inhaladores, etc. )

Para las cosas pequeñas (vitaminas y analgésicos), recomiendo hacerte con ellos con tiempo (cuando llegué a Italia tuve que aflojar 5 euros para analgésicos y casi 15 para antihistamínicos), sobre todo si es medicación básica como paracetamol, ibuprofeno y cosas así. Para los medicamentos con receta, como la codeína (analgésico muy fuerte), los inhaladores y otros medicamentos que se te puedan acabar, intenta hacerte con ellos con meses de antelación, para no tener que pedirlos todos de golpe. Puedes encontrar las vitaminas y minerales que necesites tomar en Holland & Barrett o en tiendas de comida sana especializadas y te costarán menos que en otro país (como las pastillas de arándanos rojos).

4) Pregunta a tu médico por la cantidad máxima de medicación para tu enfermedad

Normalmente, un médico puede recetarte medicación hasta para tres meses, a no ser que se trate de la pastilla anticonceptiva, que es para un año. Esto te proporcionará medicación para el futuro cercano y nada más llegar, deberás inscribirte en un médico local (si puedes) y explicarle que en unos meses necesitarás más medicación (con suerte, ese será bastante tiempo para avisar y te dará tiempo de lidiar con las montañas de papeleo que tendrás que rellenar).

Suena absurdo, pero son cosas que ni siquiera piensas antes de irte a hacer el tercer año en el extranjero y quitártelo de encima con meses de antelación te ahorrará muchos problemas y estrés, además de sangre, sudor y lágrimas, muchas lágrimas. Ahora lo que te estresará será batallar con el sistema médico extranjero, tener que pagar para las citas y asegurarte de tener buen nivel del idioma que sea ¡para que puedan entenderte!

Con algo de suerte, ¡no acabarás así!

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