Descubriendo pequeños tesoros - Iglesia de Santa Anastasia

Unas semanas atrás, viajamos a Verona. Como sólo teníamos un día para estar en la ciudad, anduvimos lo máximo posible tratando de conocer los puntos turísticos más relevantes. Al ir a todos los lugares a pie, al final del día estábamos exhaustas y volvimos para el hostel. En el medio del camino vimos una iglesia, y sin darnos cuenta de que el lugar era aquel, decidimos entrar. En aquel instante, el frío y a oscuridad de la noche se transformaron en luz, arte y música. La iglesia era la de Santa Anastasia, un lugar considerablemente simple por fuera, pero absolutamente increíble por dentro.

Quedamos hasta el final de la misa, el órgano aún estaba siendo tocado y era imposible contemplar la belleza de cada pared de la iglesia. Cada una de ella compuesta por infinidad de frescos que no dejaban que ni un pequeño espacio estuviese cuidado como es debido.

La iglesia tiene un estilo gótico y está situada en la parte antigua de la ciudad de Verona. Su construcción fue iniciada en 1280 y concluida en 1400.

Para los turistas de la ciudad, este es un lugar que no debe ser olvidado. En nuestro caso, entrar en la iglesia fue como estar en otro mundo, un verdadero colirio para los ojos después de un día agotador (excelente, pero agotador).

La belleza de la iglesia es innegable, la voluntad que tuve era la de sentarse en los bancos y apreciar con calma las pinturas. De alguna forma especial en este local, ellas son extremadamente profundas y llenas de significados. En pocos instantes el cansancio y el frío del lado de fuera habían sido totalmente olvidados y substituídos por un ambiente casi celestial, fue una experiencia increíble y totalmente inesperada.

Animada por el nuevo descubrimiento, intenté quitar algunas fotos. Pero, de la misma manera imprevista que apareció en nuestro día la iglesia de Santa Anastasia, también desapareció. La ceremonia acabó, las luces se fueron apagando poco a poco y no había ya nada que hacer allí. ¡Fue bueno mientras duró!

Pilas famosas de agua bendita. Sus bases fueron esculpidas de tal forma para tener a los hombres jorobados que sustentaban la estructura.

Las luces se apagaron, final de la experiencia.

Localización de la iglesia:

Piazza S. Anastasia, Verona, Provincia de Verona, Italia.