Continuamos recorriendo la geografía valenciana, exactamente hasta el pequeño municipio de la Vall de Gallinera.
Hablar de un solo pueblo en la Vall de la Gallinera sería caer un error ya que está formado por 595 habitantes según el INE (Instituto Nacional de Estadística) de 2014 divididos en ocho pueblos que van desde el único habitante de Llombay hasta Patró y Benialí que concentran la mayor parte de los habitantes del valle.
Esos ocho pueblos (Benirrama, Benialí, Benitaya, Benisivá, la Carroja, Patró, Llombay y Benisili) ya lo recorrimos en el artículo anterior que hable sobre la Vall de Gallinera, hoy toca hablar de la Foradà.
La Foradà (Foradada en valenciano normativo y como Horadada castellanizado algunas veces) es la montaña por excelencia de la Vall de Gallinera, su nombre proviene de "Forat" (agujero en valenciano) ya que la montaña tiene un gran agujero.
Como curiosidad mencionar que Gallinera no tiene nada que ver con ninguna gallina, es el nombre que recibe el río que pasa por la mayor parte de los pueblos (a excepción de Benisili) y cuyas mejores aguas encontraréis en la fuente de Llombay o en la fuente vieja de Patró.
Gallinera por tanto, no significa nada con las gallinas sino que derivaría del preromance "Kalinar" que significaría también agujero. El terreno montañoso hace que el valle se encuentre entre dos sierras, la del Almirante (o Almirant en valenciano) y la sierra de la Foradà donde se encuentra esta montaña.
¿Y que tiene que ver la Foradà con todo esto? Pues está claro, si uno ya conoce los ocho pueblos y sus caminos, falta por conocer sus montañas y la Foradà es la mejor forma de conocerla. La ruta de la Foradà es bastante famosa incluso mayor que la ruta de los 8 pueblos, la razón es la sencillez de la ruta en la que no hay muchas dificultades aunque luego, matizaremos.
Cómo llegar
Ya lo expuse en el artículo anterior las dificultades de comunicación de la Vall de Gallinera, guste o no es preciso coche para llegar a este valle o una buena bici de montaña.
En esta ocasión la ruta puede iniciarse en Benisivá, la Carroja o Patró, dejando el coche en cualquier de estos pueblos (que mientras no sea época veraniega habrá sitio de sobra) se podrá empezar la ruta.
La única manera de llegar a estos tres pueblos será por la CV-700. Los municipios más grandes más cercanos son los de Pego (a 10km) y un poco más lejos Gandía y Oliva en la provincia de Valencia, mientras que Denia y Javea hacia el sur.
Así que una vez dejado el coche empecemos. Como hay tres rutas voy a explicarlas individualmente ya que ambas confluyen en una y me parecería una estupidez hacer tres artículos con el mismo contenido cuando perfectamente se puede explicar en uno solo.
Sí uno elige Benisivá...
Posiblemente el camino más famoso, ya en Benisivá tendremos un cartel cerca de un bar indicándonos la ruta, cosa que de momento en 2015, Alpatró o la Carroja no tienen.
Al ser el camino más famoso, también está más cuidado que los otros dos por lo que si van niños o gente no acostumbrada al senderismo le podrá costar menos por este camino. El lugar tiene buena señalización por lo que es difícil perderse.
Desde Benisivá iremos hasta los restos del convento de San Andrés, ya indiqué que las pocas piedras desaparecieron y ya solo queda unos pocos árboles. Además de carteles recordando el lugar. ¿Y por qué es importante el lugar?
En la Vall de la Gallinera hay dos fiestas importantes, uno es la fiesta de la cereza que se celebra a finales de mayo, cada año en un pueblo distinto y se celebra en honor a la cosecha generada por la cereza, además de ser una buena fiesta para promocionar las cerezas de la Vall de Gallinera.
Y otra es la alineación solar de la Foradà, el convento se construyó en ese lugar ya que dos veces al año exactamente el 8 de marzo y 4 de octubre (dedicado a San Francisco y por tanto interesante ya que el convento era franciscano), el sol ilumina el agujero de la Foradà creando un fenómeno muy curioso que cada año reúne a centenares de personas, por desgracia el último 4 de octubre de 2014 hubo nubes que lo impidieron. Pero muy recomendable la visita por esas fechas.
Continuando el camino, habrá una bifurcación, por la izquierda a la "Era del tío Camilo" que haremos 1km más de camino, se llega arriba de la montaña por un camino distinto pero termina pasando por la Cova del Moro (que luego explicaré) y la Foradà.
Si se elige el de la derecha llegaremos a la cueva y fuente de Moragues, desconozco si el agua puede o no ser potable pero por si acaso llevar agua siempre. Será la única fuente que encontremos por el camino.
Continuamos andando hasta que encontremos la bifurcación que une los caminos de Patró, la Carroja y Benisivá, cogeremos el camino de la izquierda para continuar nuestro camino a la Foradà.
Si uno elige la Carroja...
La Carroja es el único de los pueblos donde no se puede ver el agujero de la Foradà pese a ello, desde la Carroja se tiene el camino más corto. Pero tiene el inconveniente de que al no ser el más transitado, su estado sea irregular, habrá veces donde deberemos escapar bastante de la vegetación y otras en las que no hay problema.
Otro problema es la señalización que no tenía, para llegar habría que preguntar y saber muy bien por donde, ahora más o menos uno puede llegar pero yo pienso que se puede perder uno.
Del camino de la Carroja deberemos ir hacia arriba pasando el "Meson la Cueva" (único bar del pueblo), pasaremos por el cementerio y continuaremos todo el rato el camino hasta que un poco antes de que se acabe (de ahí la dificultad) encontraremos el camino con un pequeño cartel (un poco más pequeño que un libro) indicándonos el camino.
Pero me reitero, si alguien nunca ha ido por la Carroja es fácil de que pueda perderse. Continuaremos el camino (y aquí entra la parte de la vegetación), pasaremos por varios lugares siempre en sentido ascendente al principio un poco en zig-zag hasta que lleguemos a la famosa bifurcación.
Debido a la vegetación es su dificultad pero el camino en si mismo no es difícil. El camino de la Carroja es el de abajo en la bifurcación, por lo que continuaremos todo recto de camino a la Foradà.
Si uno elige Patró...
El camino de Patró (y por su cercanía el de Llombay y Benisili) pienso que es el más desconocido pero también el más largo ya que si localizáis un poco la Carroja está a 2 km de Patró.
Para llegar al camino es sencillo (a diferencia del de la Carroja) ya que habrá que llegar a la fuente Vieja de Patró (la "Font Vella" en valenciano y en los carteles) y en la fuente, llegar a la carretera. Veremos un cartel y un camino en la curva, pasaremos por varios cerezos que en marzo o abril será muy bonito ir hasta que lleguemos a la bifurcación.
Y las tres se unieron...
Para entender los caminos hay uno ascendente, uno descendente todo recto (el de la Carroja), descendente a la izquierda (el de Benisivá) y otro más o menos recto a la derecha (el de Patró). Ya sin importar el camino nos quedará hacer una subida que nos llevará hasta lo alto de la montaña.
En lo alto de la montaña podremos ver las vistas del valle y es que se considere el pulmón verde la Marina Alta (la comarca en la que se engloba) es por algo. A partir de aquí recomiendo ir primero a la cueva del Moro, es una peculiar cueva que se entra por un corral hecha en medio de la montaña.
Su nombre indica que un "moro" la hizo, aunque existían leyendas de que ahí habría riquezas pocas tenían los "moros" agricultores de la época. Es un buen lugar para descansar sobre todo en días calurosos al estar fresquito el lugar, tiene una ventana en la que tiene buenas vistas del valle.
Una vez repuestas las fuerzas, vamos hacia la Foradà, por el camino veremos algunos corrales que debido al lugar tan aislado se han conservado.
Antiguamente (es decir hace 60 o 70 años) había una economía de subsistencia en lugares rurales como este y existían muchos pastores, que muchas veces eran niños o jóvenes, a veces dormían por la noche cerca de la Foradà y estos lugares servían tanto de refugio de las ovejas como de los propios pastores aunque los mejores corrales se han conservado al otro lado de la montaña cerca de la Carroja y en próximos artículos hablaré sobre ellos pero no dejan de ser curiosos, los dos o tres que hay cerca de la Foradà.
Son pequeños pero no están mal para hacerse una idea. Se dejaron de utilizar en los años 50 y 60, coincidiendo con el éxodo rural.
Antes de llegar veremos un cartel que nos indicará el camino a la Foradà, en algún momento puede haber alguna dificultad sobre todo si vamos por camino que no es, pero yendo con cuidado se llega al famoso agujero. Y una vez arriba a contemplar las vistas, si os sale un buen tiempo como el de la tercera fotografía podremos contemplar el mar, además de ver los ocho pueblos en sintonía con la naturaleza.
A la vuelta, tocará hacer el mismo camino donde tengamos el coche. Como alternativas podremos hacer una circular yendo a la izquierda de la Foradà camino al Peñal Gros y después visitar el Castillo de Benissili o incluso podremos tomar camino hasta Alcalá de la Jovada del que me encargaré de mostrar en un futuro artículo.