Tunja, una aventura de tres días / Parte 3

Al tercer día nos levantamos un poco tarde e hicimos un gran desayuno, café, fruta, pancakes, jugo, todo eso dejó muy llenas; como yo partiría relativamente temprano, aproximadamente a las dos de la tarde de ese día, ya no teníamos tiempo de hacer muchas cosas más, pero el papa de Laura invitó a almorzar, que era justo lo que faltaba para complementar la grata experiencia que ya había tenido, probar un plato tipico de la región; esto fue apenas una hora depures de haber desayunado, así que ya imaginaras lo que viene.

Nos llevo al barrio Libertador, una zona llena de restaurantes que sirven los platos tipicos de la región, es muy reconocida por su Cuchuco de trigo, una gran sopa que lleva cuchuco de trigo, evidentemente, fríjoles verdes, papas, como todo buen plato boyacense, condimentos y los demás ingredientes están a disposición de quién lo prepare; se sirve acampanado de un gran trozo de espinazo de cerdo, pero cuando digo un gran trozo es enserio un gran trozo, puedo asegurar que el que me sirvieron no podría cubrirlo por completo con mis dos manos; usualmente este plato se come junto a una picada que es compartida por la familia.

Es común que las grandes familias de la ciudad salgan a almorzar juntos los fines de semana, en especial el día domingo, por ello es por lo que todos los restaurantes de la zona se encuentran llenos a tope, así que no es sorprendente que sea difícil encontrar un lugar libre. La atención al cliente tiende a ser un poco difícil, pues a pesar de que muchas personas están encargadas de prestar el servicio, no dan basto por la cantidad de gente que llega.

El cuchuco de trigo es un plato exquisito, pero desafortunadamente no pude disfrutar de él como me hubiera gustado, pues como mi amiga, Laura, y yo habíamos desayunado poco tiempo atrás una gran cantidad de comida, estábamos muy llenas, demasiado diría yo, aun así la porción de cuchuco que logre comer estaba deliciosa, y las papas criollas de la picada me encantaron, por poco me las como sola.

De allí salimos directamente al terminal, en el camino pasamos justo frente a la iglesia Las Nieves,

y en el poco tiempo que quedaba Laura logro narrarme parte de la historia del libro 'Amor y Crimen' escrito por Hernan Joaquin Fonseca Jimenez, el libro se desarrolla justamente en Tunja y uno de sus eventos principales tiene lugar allí, en la iglesia Las Nieves, por eso no puedo despedir esta entrada sin recomendarlo, yo aun lo tengo en mi lista de libros pendientes.

A pesar de que solo tuve tres días para conocer Tunja, siento que fueron muy fructíferos, pues visite muy bellos lugares, aprendí muchas cosas y me lleve muy lindas fotos. Definitivamente si tienes la oportunidad de visitar Tunja no dudes en hacerlo.

A Tunja puedes llegar fácilmente desde el terminal del norte de Bogota, la capital de Colombia, el presupuesto que necesitaras puede no ser muy alto, depende de lo que quieras hacer, por supuesto no puedes olvidar tu cámara, pues seguro podrás tomar muy bellas fotos, la ciudad se presta mucho para eso.

Su arquitectura colonial, sus pequenos escondites, como el café 'La Pinacoteca' o 'Madame Lili', la bella Biblioteca Patiño Rosselli y los otros muchos lugares que no logre conocer hacen de Tunja un lugar ideal para visitar

Ahh y por supuesto, si no has tenido los mejores días siempre puedes ir a quejarte a la pila del mono.

Marcela Torres, Colombian Globetrotters.

Referencias imágenes:

Ventana azul: Imágen propia de nuestras redes sociales.
Iglesia Las Nieves

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