Explorando la mágica Sintra

Sintra es uno de esos lugares que no os podéis perder de Portugal. Aislada en bosques profundos y encantados con muchos palacios y castillos a su alrededor, la pequeña ciudad se sitúa a menos de una hora en tren desde Lisboa.

Hace un tiempo, Sintra estuvo gobernada por tribus hasta que los romanos alcanzaron los alrededores de este lugar y más tarde los reyes españoles trataron de establecerse aquí. Sintra fue seguro una ciudad de interés para muchos países por toda Europa y cambiaba a menudo de soberano.

Más tarde, en el siglo XIX, Sintra floreció apareciendo, por tanto, muchas mansiones, castillos y palacios construídos por los más ricos reyes y hombres de Europa. El rey Fernando II de Portugal, mandó construir el conocido Palacio do Pena sobre una montaña sobre un monasterio en ruinas para que así la familia real portuguesa pudiese contar con su residencia de verano. Porteriormente, los otros castillos y palacios fueron restructurados o construídos con los mismos estilos arquitectónicos por lo que convirtieron la ciudad en un lugar mágico que era único. Esto hizo que Sintra fuese la cuna del romanticismo en Europa durante el siglo XIX.

Visité Sintra el año pasado ya que, desde que mi mejor amiga vino a visitarme en mi Erasmus en Portugal, supe que teníamos que visitar Sintra en una de nuestras excursiones. Esto fue por lo que decidimos comenzar la excursión a esta mágica ciudad por la mañana temprano para poder ver lo máximo posible.

¿Cómo llegar a Sintra?

Llegar a Sintra es muy sencillo y económico. Podéis coger el tren de Lisboa a Sintra desde la estación de trenes de Rossio la de Oriente. El billete cuesta 2,25 € por viaje y tarda alrededor de 40 o 50 minutos a la estación de tren de Sintra.

Sin embargo, cuando comprar el billete tienes que comprar también la tarjeta Viva Viagem, que es una tarjeta de transportes hecha para turistas y viajeros no frecuentes. Cuesta 50 céntimos y podéis ir añadiendo billetes o dinero. La tarjeta no está personalizada pero sólo una persona puede utilizarla, por lo que tened esto en mente. La tarjeta es válida durante un año desde la fecha de compra, por lo que podéis quedaros con el ticket por si acaso. Hay que validar la tarjeta en los accesos que hay por la estación antes de subir al tren. No os olvidéis de ello porque es obligatorio.

El transporte en Sintra

Si os estáis preguntando si necesitáis o no usar el transporte público una vez llegados a Sintra, no lo hagáis. ¡Lo vais a necesitar seguro! Estoy hablando en serio aquí. Lo primero de todo, Sintra es una ciudad montañosa y no es fácil moverse por sus estrechas calles. Segundo, si queréis visitar varios de los palacios, es mejor usar el transporte público, el cual es muy barato y seguro.

Por ello, para ir al Palacio de Monserrate tendréis que coger el autobús 435, que para también en la Quinta da Regaleira y el Palacio Nacional de Sintra. Un sólo viaje en bus son 3 € y si queréis usar el autobús durante todo el día son 5 € Además, el trayecto en autobús son unos 15 o 20 minutos y pasan frecuentemente por lo que no perderéis demasiado tiempo de esta forma para llegar a ellos.

Podéis comprar el billete directamente en el autobús al conductor y es mejor tener dinero suelto en efectivo. La parada de autobús está al lado de la estación de autobuses, justo a continuación de la parada de autobús que va al Palacio do Pena. Si no lo encontráis, podéis siempre preguntar en la oficina de turismo.

Tened en cuenta que el autobús tiene una ruta específica. Este va al Palacio Nacional, Quinta da Regaleira y por último al Palacio de Monserrate. A la vuelta desde este último, va directo a la estación de trenes. Por lo tanto, si queréis ir a Quinta da Regaleira, mostradle al conducto vuestro ticket para el día entero y quedáos en el bus.

En cambio, si queréis ir al Palacio do Pena, hay un camino oculto para ir desde Quinta da Regaleira. Tened en cuenta entonces que tendréis que subir bastante y os llevará cerca de media hora para llegar allí. Ahora bien, os puedo asegurar que si decidís ir por este sendero, no os arrepentiréis, tiene una de las vistas más bonitas de la Quinta da Regaleira desde arriba, Castelo dos Mouros y Pena. Además, tendréis la oportunidad de ver la famosa Villa Sasseti, situada en una colina y va directamente de Quinta da Regaleira.

No obstante, para llegar rápido al Palacio do Pena es bueno coger el bus 434 que para en el Palacio Nacional de Sintra, el Castelo dos Mouros y luego en el de Pena. Si tenéis pensado subir en bus y luego bajar andando, comprar sólo el billete simple de sólo ida que son 3,9 €. La parada de autobús está exactamente al lado de la estación de trenes y la reconoceréis en seguida porque habrá mucha gente esperando allí. El trayecto dura 20 minutos al Palacio do Pena, que es mejor que una hora de subida a pie.

El tiempo en Sintra

El tiempo en Sintra puede ser bastante impredecible. La primera vez que estuve allí, estaba soleado al principio del día y luego empezó a llover de repente y empezó a hacer mucho frío asi que tuve que comprarme unos pantalones largos. Sin embargo, esta última vez hacía más sol que nunca y hizo calor durante todo el día. Aunque os recomiendo que llevéis una chaqueta por si refresca por la tarde.

Después de todo, Sintra no está tan cerca de la costa pero es muy montañosa asi que podéis esperar mal tiempo allí y de repente aparezca una mística niebla por la ciudad de la nada. ¡Asi que hay que estar preparados!

¿Cuál es la mejor época para visitar Sintra?

He visitado Sintra dos veces, una a mediados de junio y otra a comienzos de octubre y podría decir que la mejor época es en primavera o principios de otoño. Para justificar sto, Seré honesta con vosotros y os diré que no importa cuándo vayáis a Sintra, siempre hay mucha gente. Sin embargo, en primavera u otoño no habrá tanta. Ir en verano a Sintra no es buena opción porque puede hacer un calor insoportable, humedad y estar abarrotado. Por lo tanto, no lo disfrutaréis del todo.

Además, intentad quedaros en Sintra al menos dos días si queréis visitar la mayor parte de sus bonitos lugares de interés porque pienso que en una sóla excusión de un día es demasiado agotador. Es importante también, ir por la mañana temprano para evitar la multitud o ir más tarde por la tarde cuando la mayoría de la gente ya se haya ido. Evitad ver los monumentos desde las 11 a las 3 de la tarde porque este es el periodo de mayor afluencia y no querréis esperar las filas para todo durante mucho tiempo.

¿Dónde y qué comer en Sintra?

Encontraréis un montón de sitios para comer en Sintra, la mayoría de ellos caros pero hay alguno barato, Depende de dónde tengáis planeado comer o cenar y de vuestras preferencias.

Por ejemplo, mi amigo y yo fuimos a comer al restaurante Metamorphosis y estábamos ya muy hambrientos. Este restaurante esta cerca de la estación de trenes de Sintra. No nos pusimos a buscar más sitios porque este quedaba cerca también de la parada del autobús para ir a Quinta da Regaleira. El restaurante es muy bonito y tradicional, así como el personal y está lleno de diferentes opciones de comida, carne, pescado y postres.

Elegí el Bacalhau à Brás, que es un plato tradicional portugués de bacalao, patatas y huevos. Incluso tenían la famosa Francezinha que es típica de la zona norte de Portugal.

Luego, si tenéis antojo de algo dulce tenéis que ir a Casa das Queijadas de Sintra, donde encontraréis las típicas queijadas de Sintra. Debo decir que se ha convertido en uno de mis dulces favoritos de Portugal. Siendo sincera, prefiero ahora esta que el pastel de nata.

¿Qué ver en Sintra en un día?

En Sintra, veréis algunos de los más coloridos y fascinantes palacios de castillos así como sus cautivadores jardines que se extienden alrededor. La mágica ciudad es definitivamente uno de los lugares que os harán sentir en un sitio totalmente diferente o en otra dimensión.

La ciudad no es grande pero visitar sus lugares de interés toma tiempo, por eso, es bueno poder gestionar correctamente vuestro tiempo para poder ver la mayoría de los monumentos de Sintra. Para ello, os dejo aquí abajo los lugares que he visitado en el orden en el que fui a ellos. Creo que siguiente este order, tendréis tiempo para todos y no tendréis que correr para ir de un sitio a otro.

El Palacio Nacional de Sintra

Después de nuestro viaje en tren, nos dirigimos al centro de Sintra, donde vimos el llamativo Palacio de Sintra. Tengo que decir que es uno de los palacios medievales más bonitos que he visto nunca. Era también el destino preferido para muchas familias nobles en el pasado e incluso uno de los reyes portugueses residió allí por un largo tiempo.

Desafortunadamente, no entramos al palacio porque no estaba abierto todavía pero el precio era de 10 € por persona. Por ello, lo que hicimos fue caminar por los alrededores del palacio y fuimos por debajo de los arcos que llevan a la parte trasera del palacio. Por la tarde, podéis esperar ver mucha gente por allí debido a que se considera un punto de encuentro entre grupos turísticos y locales.

Después, nosotros dimos vueltas por las calles del centro histórico de Sintra hasta que volvimos a la estación de tren para encontrar la parada del autobús hacia el Palacio de Monserrate.

Palacio de Monserrate

Cogimos el bus 435 a poca distancia de la estación de trenes y en menos de 20 minutos estábamos ya en el Palacio de Monserrate. El precio de la entrada son 8 € y está abierto desde las 9:30 de la mañana. En consecuencia, como llegamos pronto no había casi gente allí por lo que empezaba nuestra aventura.

Cuando entramos, tuvimos que andar bastante siguiendo las indicaciones para llegar al palacio. Como no teníamos prisa, dimos una vuelta por los jardines de alrededor y charlamos de cosas de chicas, hasta que llegamos al palacio más fascinante que he visto nunca. Fue construído en una arquitectura de estilo del romanticismo tan típico de la región y a ambas nos parecía un palacio de estilo árabe o indio, con toques góticos. Luego, fuimos a explorar las estancias en su interior, las cuales tenían diversos estilos. Mi parte favorita del castillo fue el pasillo con preciosos arcos en la parte de arriva y los jardines de su patio.

Después de ello fuimos a explorar los jardines del palacio, el más cercano que era el jardín de las rosas que está decorado con muchas palmeras enormes y cactus. Yendo más lejos, vimos un pequeño estanque y después subimos bastante para llegar arriba. El camino nos llevó a la cascada de esta mansión y tras un rato, volvimos a la parada de bus para continuar nuestra aventura.

Quinta da Regaleira

Después de dos horas de aventura, cogimos el bus 435, que nos llevó a la estación de trenes y nos quedamos en el bus para poder ir a Quinta da Regaleira. En menos de quince minutos bajamos del bus en Regaleira y fuimos a comprar la entrada que quedaba un poco lejos de la parada. Como era previsible, había mucha gente en la cola para comprar los tickets pero en la taquilla eran rápidos y nos costó 8 € la entrada.

Empezamos por un camino rodeado de frondosos y altos árboles y luego fuimos hacia la derecha para llegar al pozo de iniciación que está situado en la parte norte del parque. El "pozo" nunca se usó como recurso de agua sino que era un lugar secreto para los rituales del dueño de la propiedad. Es una estrecha escalera en espiral que te lleva a su fondo y en una cueva desde la que se pueden tomar un par de caminos. Nosotras seguimos el grupo de gente que iba delante nuestra y terminamos en un lago artificial y una cascada desde la cual tenéis que pasar entre las piedras para salir de allí y volver al camino. Fue realmente divertido pasar por allí pero a la vez tenía miedo de caerme al lago y estropear mi cámara pero en general me divertí saltando como un niño.

Comenzamos a subir a la parte alta del parque hasta llegar a la torre de Regaleira. Construída en su típico estilo gótico parece realmente algo misterioso y hermoso. Asi que no podíamos esperar a llegar a la parte de arriba para ver las vistas que ofrece. La subida no es demasiado dura pero las escaleras de caracol eran tan estrechas que fue difícil subirlas y toca esperar a que las personas bajen. Cuando estuve allí me había bastante gente y había delante unas seis personas para subir. Asi que os podéis imaginar lo verdaderamente pequeña que es la torre. No obstante, fuimos a ver el castillo morisco situado en lo alto entre rocas y bosques frondosos junto al Palacio do Pena y villa Sassetti.

Continuamos nuestro agradable paseo para llegar a la fuente de la Abundancia donde hicimos un breve descanso después de tanto subir y andar. Si tenéis la oportunidad, fijáos en los pequeños detalles y colores de la fuente. Os quedaréis asombrados por su originalidad y misterio, ya que hay muchos símbolos extraños por todo el parque.

Luego andamos al Patamar dos Deuses, es decir, el sendero de los dioses. Este es un camino lleno de estatuas de dioses griegos y romanos de la mitología clásica junto a la estatua de un león que pertenecía a la Baronesa de Regaleira. Puedo decir que esta parte del parque es una de mis favoritas, ya que realmente muestra el belleza real y la idea y significado que hay detrás de las creación del parque.

Por último pero no menos importante, estuvimos dentro del castillo. Es del típico estilo gótico y tiene una bonita alta torre que le aporta aún más belleza, muchos arcos y gárgolas que lo hacen misterioso. Una vez que entras, quedas fascinado con la forma de las estancias y no os podéis olvidar de mirar los techos, ya que la mayoría de ellos están pintados a mano. ¡Una verdadera obra maestra!

Mi parte favorita del castillo son los salones, junto con la chimenea y los enormes balcones con vistas a los jardines. Este castillo es en definitiva un lugar de ensueño y seguro que os hará sentir en otro mundo.

Además de eso, tenéis que saber que este castillo fue vendido a un rico hombre portugués del que se conoce que era masón. Él redecoró y añadió muchos túneles subterráneos, "pozos" y caminos secretos alrededor de la propiedad como parte de sus ideologías y creencias en el misticismo.

Vila Sassetti

Una vez que terminamos nuestro tour por Quinta da Regaleira, caminamos por la carretera hasta que llegamos a la entrada de la Villa Sassetti. El camino que va por los jardines de la villa hacia el Palacio do Pena no es conocido ni está concurrido y está un poco escondido por loo que es en definitiva una agradable experiencia y una oportunidad para escapar de la multitud. La villa no es tan famosa y no demasiados turistas eligen visitarla pero es uno de los paseos más bonitos por lo que podéis ir. Sin embargo, estábamos preparadas para subir muchas cuestas y sudar un poco ya que no es un camino sencillo pero es el camino más rápido para llegar al Palacio do Pena.

Por el camino vimos jardines preciosos de la villa llenos de rosas y muchas otras flores bonitas. La villa en sí está construida en el distintivo estilo arquitectónico romántico de los palacios y castillos de Sintra y tiene una hermosa fuente delante de ella.

Nos llevó cerca de media hora hasta llegar al cruce de caminos donde tuvimos la oportunidad de elegir si ir al Palacio da Pena o el castillo morisco. Además, desde allí teníamos unas vistas de todo Sintra y de algunos de los más famosos castillos alrededor de la ciudad. Finalmente, tomamos el camino hacia el Palacio do Pena para visitarlo.

Palácio da Pena

El Palacio da Pena es otro ejemplo más del estilo de arquitectura del romanticismo que es tan distintivo de todos los palacios de Sintra. Es interesante compartir con vosotros que el palacio era antes un monasterio que fue destruído por el enorme terremoto de Lisboa. El rey Fernando II decidió crear un palacio de verano para la familia real portuguesa. Por lo que, a mediados del siglo XIX, el palacio estaba casi finalizado incluyendo su decoración.

Llegamos allí siguiendo el camino desde Villa Sassetti, que termina cerca de la entrada del Palacio da Pena. Como era ya última hora de la tarde, conseguimos los tickets sólo para ver el parque y las terrazas del Palacio, lo cual costó 7,5 €. Si tenéis curiosidad por visitar las estancias del palacio, entonces la entrada son 14 €.

Empezamos nuestra caminata hasta el castillo primero visitando el estanque enorme en la entrada que está llena de ruinas antiguas. Luego, continuamos viendo los jardines del palacio y sus frondosos bosques. Así que en poco tiempo, estábamos allí arriba frente a su puerta principal que era bastante sólida y llena de adornos.

Yendo más lejos, me fascinaron los vivos colores con los que el palacio está pintado y también lasenormes estatuas, especialmente las estatuas de gárgolas. Otra bonita parte del exterior del palacio es la torre del reloj y la terraza de la reina, que cuenta con unas de las mejores vistas panorámicas, especialmente al atardecer. estuvimos paseando por los jardines del palacio por un rato y decidimos volver a la ciudad, ya que empezó a hacer frío y viento.

Después de esa larga excursión de un día, puede decir sin ninguna duda que me sentía satisfecha, aunque me dolían ya las piernas. Sintra quedará para siempre en mi corazón y, en concreto, los palacios de Monserrate y da Pena que son absolutamente maravillosos junto a sus jardines.

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