Un fin de semana espectacular en el sur de Italia: Salerno, Costa amalfitana (Positano) y Pompeya

Aquí os dejo un poco mi experiencia de un fin de semana en el sur de Italia, alojándonos en Salerno de viernes noche hasta el lunes por la mañana. Aunque es poco tiempo, da para mucho. Os dejo algunos consejos de qué hacer, dónde alojarse, qué visitar y dónde y qué comer. ¡¡Espero que os sirva!!

Salerno

Como llegar

Para llegar a Salerno, el aeropuerto más cercano es el de Napoli Capodichino. De Nápoles a Salerno se tardan aproximadamente 45-60 minutos, y se puede llegar en tren o en autobús.

Otra opción para los más valientes es alquilar un coche. Nosotros alquilamos un coche, y yo personalmente no lo recomiendo (al menos que seas alguien con mucha experiencia al volante y te veas capaz). Hay que tener en cuenta que aquí se conduce muy diferente que en España.

 Los coches no se respetan, van rapidísimos y los cruces y giros son un peligro. En los pasos de peatones, por ejemplo, el peatón tiene de todo menos preferencia (el coche nunca para, es más, acelerará). Bien es cierto, que sabiéndolo y yendo con precaución es posible. Mi padre conducía el coche y no tuvimos ningún grave problema. Y es cierto que poder desplazarse en coche es más cómodo, sobre todo cuando no te puede fiar de cómo funcionan los buses aquí.

Otra cosa importante para saber si te estas planteado coger coche, es que la gasolina es algo más cara, y el parking de lo más caro que puede existir. Aparcar en la calle es cosa imposible (yo personalmente lo intenté y te pedían una tarjeta que jamás supe cuál era), y los aparcamientos que hay cuestan 2euros/hora.

Nosotros aparcamos en un junto al lungomare que por lo menos era 1euro/hora (después de mucho buscar y gracias a que un amigo italiano me lo dijo), así que recomiendo este parking sobre todo si tenéis el alojamiento cerca. Os dejo la ubicación de este aparcamiento por si os sirve: Parcheggio Interrato Lungomare Tafuri ex Cementificio. Lungomare Clemente Tafuri, 84127 Salerno SA.

Donde alojarse

Hay un hostal que no está mal que se llama Ave Gratia, situado en Via dei Canali, justo en el casco antiguo. Mas económico que esto no lo vais encontrar. No obstante, si venís unos días con la familia no lo recomiendo.

 Nosotros alquilamos un lujoso apartamento en lungomare, que es mucho más agradable ya que podéis convivir y además desayunar/comer/cenar en casa, cosa que si estás en un hostal u hotel no. La diferencia en precio no es que sea abismal, quizás estamos hablando de 15 euros más por persona por noche, pero merece la pena. Además, hay que tener en cuenta que como puedes comer en casa te lo ahorras en comida.

Nos alojamos en Luxury Apartment La Concordia. Un apartamento con un amplio salón, comedor, cocina bien equipada, dos cuartos con camas de matrimonio y un sofá cama enorme en el salón y dos baños (¡¡uno con jacuzzi!!). No obstante, para mí lo mejor eran las vistas. Podías estar comiendo y ver el mar, y al tener justo enfrente el puerto, se puede ver como salen y llegan los barcos al puerto.

Además, la ubicación es perfecta. A tan solo unos minutos de la estación de tren. Alrededor hay muchos restaurantes por si apetece cenar algo cerca si estáis cansados.

La casera además vive cerca, y fue encantadora con nosotros. Llegamos por la noche muy tarde y allí estaba para recibirnos.

Que ver

En Salerno como tal tampoco hay mucho que ver. Nosotros paseamos por el casco antiguo y vimos la catedral. El barrio como tal (Carmine) no es muy bonito y no hay nada que ver. Lo más bonito es ver el Castello de Arechi (por las vistas de la ciudad), y pasear por el lungomare.

Donde comer

La primera noche decidimos cenar en casa ya que llegamos tarde y estábamos cansados. Hicimos un poco de pasta farfalla (mariposa, muy típica aquí), y lo más rico de aquí, la Mozzarella di bufala.

Hay que probar la de las tiendas oficiales como La Contadina, no la del supermercado que, aunque seguramente también esté buena, ésta es la auténtica. No es muy barata (1kg=16 euros), pero recomiendo probarla 100%.

Al día siguiente desayunamos en el apartamento, pero compramos los dulces típicos de aquí, los que hay que probar sí o sí. Fuimos a pastelería Romolo, que está al lado y además esta buenísima. Probamos tres diferentes:

1.       Babà: resulta similar a una magdalena y se prepara de dos maneras, con limoncello y con ron. A mí personalmente, me gustó más con limoncello, pero lo ideal es probar las dos. Es típica de Salerno.

2.       Canollo siciliano: una especia de hojaldre algo más duro y dentro una crema de leche o chocolate buenísima. Mas típico de Sicilia, pero se ha reconocido oficialmente como uno de los productos italianos tradicionales por el Ministerio de alimentación (así que hay que probarlo sí o sí).

3.       Sfogliatella: dulce típico de la pastelería italiana, crujiente por fuera y con una crema por dentro. Típico de Napoles y se suele preparar en periodo de Navidad.

También se debe probar el típico helado italiano. Fuimos a una heladería que estaba justo en lungomare que se llama Ice Cream. El trato no fue muy bueno y resultó caro para la cantidad de helado que nos pusieron. Por lo menos, estaba bueno.

Cenamos dos noches pizza, que en Italia no puede faltar. Fuimos a la pizzería Criscemunno situada al lado de la catedral. Pedimos para llevar porque había muchísima gente y lista de espera para tener mesa. No tardaron nada en prepararla y están super bien de precio (4-8 euros aproximadamente). Un sitio muy recomedable.

La última noche decidimos cenar de forma cómoda, es decir, al lado del apartamento. Por ello fuimos a un restaurante que estaba al lado de lungomare y nos sorprendió para bien. Se llama Spunzillo y cenamos muy a gusto, y los precios eran buenos. Las pizzas cuestan entre 5-8 euros, y también pedimos una carne buenísima por 15 euros. Además, sirvieron muy rápido. Desde luego un sitio rápido, bueno y económico, muy recomendable.

Positano

El sábado hacía un día espectacular, así que decidimos coger el barco para ir a Positano. Es una visita muy recomedada y además es uno de los 25 sitios que son imprescindibles visitar en Europa según Viajero Callejeros (https://www.viajeroscallejeros.com/pueblos-que-visitar-europa/ ).

Como llegar

Se puede ir en coche, bus o barco.

Mi recomendación es que no vayáis en coche, sobre todo si es verano. La carretera es muy peligrosa, son todo curvas en el borde de un acantilado y los coches van muy rápido.

Además, es la única carretera que hay conectando estos pequeños pueblos de la costa amalfitana y siempre está atascada. Si vais en verano seguramente estéis horas parados. Si es fuera de temporada, se puede ir, pero sigue sin ser mi primera recomendación. Se tarda 1h, 1 y 30 minutos sin tráfico.

El bus es la opción más barata, pero es un caos. Los horarios de los buses no son de fiar, además siempre van llenos y tienes que ir de pie y tanta curva marea mucho. Y desde luego también son un peligro.

Yo personalmente, recomiendo sin lugar a duda coger el barco. El barco se coge en el puerto de lungomare y son bastante frecuentes. El billete cuesta 12 euros ida, pero es lo más agradable y seguro.

Además, si te gusta navegar es la mejor opción. Puedes ponerte en la parte de arriba del barco y disfrutar de las vistas. Pasa por toda la costa amalfitana y puedes ir viendo todos los pequeños pueblos de la costa, y encima hace una parada en Amalfi. Desde el puerto de Amalfi puedes llevarte una impresión de cómo es e incluso se llega a ver la catedral. Así que se podría decir que se ve Amalfi también. El trayecto dura unos 70 minutos.

Que ver

Lo más espectacular de Positano son las vistas. El simple hecho de ver las casas en la montaña de diferentes colores, con las montañas de fondo, la playa abajo, y el mar de frente. Tiene un encanto natural.

La playa es las más grande de la zona, y si tienes tiempo y hace calor ¡¡aprovecha para darte un baño!!

Las calles en sí tienen mucho encanto, son empinadas, estrechas y con muchos árboles en los techos y plantas alrededor.

También se puede visitar la catedral.

Las tiendas también tienen mucha gracia. Son pequeñas pero muy coloridas, y venden cosas preciosas. Eso sí, ¡¡todo es carísimo!! Una taza puede costar 20 euros y un cuadro 300 euros. Así que siempre preguntad el precio antes de comprar algo. No obstante, yo me compré dos cuadros pequeños preciosos (debían ser copias) por 2,5 euros justo en la tienda en frente de la playa.

Donde comer

No sabíamos dónde comer, y estuvimos mirando muchos sitios y todos carísimos (12 euros una pizza margarita). Al final decidimos buscar en TripAdvisor y la verdad que dio en el clavo con el sitio.

 Fuimos al número uno que recomendaban, que se llama Casa e Bottega. Tampoco es barato, pero por lo menos merece la pena. Es decir, es mejor pagar 16 euros por un plato novedoso y de buenísima calidad que 12 euros por una simple pizza margarita.

Pedimos cuatro platos diferentes y todos unos éxitos. Para mí, estaban especialmente ricos los raviolis con tomate y los espaguetis de calabacín. Además, el sitio es agradable y se come muy a gusto.

Pompeya

Como llegar

Para llegar a Pompeya hay un tren que deja justo en la puerta. Nosotros fuimos en coche y tardamos solo media hora, con Google Maps no tiene pérdida. Lo malo de ir en coche es el aparcamiento…al que fuimos que estaba justo al lado de la puerta cuesta 3 euros cada hora, un robo, pero no queda otra.

Las entradas cuestan 15 euros, y 9 euros si eres estudiante. El primer domingo de cada mes la entrada es gratis y te ahorras mucho dinero, pero ojo, porque ese día seguramente esté hasta arriba de gente y no se podrá ver igual de bien.

Que ver

Nosotros vimos Pompeya en unas 6 horas (realmente es imposible verlo todo en un día). Hay gente que incluso pasa allí la noche. Hay que tener en cuenta que es una ciudad, y por eso es muy grande.

Al principio todo es emocionante, pero después de muchas horas estás muy cansado de tanto andar y andar y se empieza a hacer un poco pesado. Por ello es mejor ir con calma y aunque veas menos, disfrutar en todo momento. No por querer ver más vayas a ir con prisas y agobiado porque no merece la pena.

Es increíble pasear por Pompeya, viendo las diferentes ruinas y entrando en las casas donde aún se pueden ver las habitaciones, donde cocinaban, las termas. Es alucinante imaginarse a gente viviendo aquí hace tantísimo tiempo.

Se puede ver muy cerca el Monte Vesuvio, el cual erupcionó en el 79 d.C sobre la ciudad de Pompeya destruyéndola y matando a tantísima gente. Además, se puede visitar, aunque en el mismo día no lo recomiendo porque debe ser agotador, y al final acabas saturado.

Personalmente recomiendo coger un guía, o sino un audio explicativo (en grupo cuesta 6 euros cada uno) porque si no sabes lo que estás viendo pierde mucho interés. Con el audio vas comprendiendo cada casa, la función que tenía y te puedes imaginar allí a la gente viviendo.

Por ejemplo, te explican como han hecho los “calchi” humanos. Son figuras de yeso que muestran a humanos que sufrieron la erupción del Vesuvio, y fueron quemados con la lava. Se puede ver sus posiciones de alerta e incluso sus caras de terror.

Donde comer

Estábamos agotados, así que fuimos a comer al sitio que estaba justo en frente de la salida de Porta Marina. ¿Turístico? Si ¿Caro? También, aunque tampoco es disparatado.

 Por 10-15 euros comimos, y la verdad que está fenomenal ubicado, así que si estáis muy cansados y tenéis mucha hambre es el sitio perfecto.  Nos atendieron muy rápido y fueron simpáticos.