Roma aeterna. Parte I

Roma aeterna

Parte I: Roma Roma Roma

¡Hola a todas y a todos! Quiero hablarles sobre una de mis ciudades favoritas de la vida, pero como es tan especial, estaré dividiendo mis entradas sobre Roma, y aquí ha llegado la primera.

Dado que Roma es "la ciudad eterna", sería imposible hablar de ella en tan solo una entrada en este blog, por lo que decidí dividirlo en varias partes. Esta primera parte tratará de datos generales de Roma, tales como sus monumentos históricos más importantes (con algunos datos curiosos al respecto) y su gastronomía.

¿Por qué visitar y revisitar Roma?

¿Quién no ha escuchado hablar sobre el Coliseo o el Vaticano? Seguramente todos han visto alguna vez la pintura de “La creación de Adán” de Miguel Ángel o alguna foto o video de la cúpula de San Pedro. Todos conocen algo sobre Roma, pero estoy segura de que nadie, nadie, nadie conoce TODO sobre Roma.

Lo que pasa que es verdad eso que dicen cuando llaman a Roma “la ciudad eterna”. Es una ciudad que nunca acaba. Uno como turista puede dedicarle más tiempo que a otras ciudades, y lo cierto es que nunca terminará de descubrir todas las maravillas que hay ahí. Ni siquiera estoy segura de que los locales sean capaces de conocer toda la belleza de su ciudad.

Roma es una ciudad enorme, y no me refiero solo al tamaño, sino al número de atracciones y actividades que ofrece para todos. Quienes ya hayan estado ahí deben saber a lo que me refiero.

 Testigo de miles de años de historia

Roma al día de hoy tiene 2772 años de edad. Casi tres milenios han pasado por encima de ella, la han quemado, ha soportado guerras, ha vivido tantos cambios, y sin embargo sigue ahí, acompañada del río Tíber, construyéndose y reconstruyéndose, creciendo y renovándose a cada momento. Tiene algo de cada época y corriente por la que ha pasado. Conserva recuerdos de la historia y de la humanidad cambiante que ha pasado por ahí. 

A continuación hablaré un poco sobre los monumentos históricos más sobresalientes de las épocas que han transitado sobre Roma, acompañados de datos curiosos tanto históricos como de turismo.

1. Edad Antigua: la construcción más popular de esta época es el Coliseo. Visitarlo es como transportarse en el tiempo. Es un lugar increíble y que echa a volar la imaginación. Cuando yo fui me pregunté cómo era posible que se llevaran a cabo batallas navales ahí dentro. Considero que es imprescindible saber al menos un poco de su historia antes de ir, porque eso permite reconocer lo maravilloso de esta "Maravilla del mundo" y sorprenderse ante todo lo que contiene. 

Dato curioso: originalmente se llamaba “Anfiteatro Flavio”, pero se le llamó después el “Coliseo” porque ante él se encontró en época romana una escultura de Nerón denominada “coloso”.

2. Edad Media: construcciones medievales como tal no hay muchas que sean célebres, pues los templos que había en la Edad Media fueron reformados en el Renacimiento y ya no se conserva mucho de la época medieval más que en la base de estos lugares. 

Dato curioso: recomiendo visitar la Basílica de Santa María en Araceli, que se encuentra cerca del Foro Romano y la Plaza Venecia. Su historia me parece bastante interesante, por lo que se las quiero compartir aquí: en un inicio fue un templo romano a la diosa Juno Protectora ("Juno Moneta" en latín, de donde viene la palabra “moneda” porque era en este templo donde se producía el dinero), y encima de este en la Edad Media se construyó el templo a la Virgen María. Así que si quieren conocer el lugar donde se originó la palabra con la que designamos al dinero y al mismo tiempo conocer una iglesia llena de detalles y belleza romana... este es un lugar que no se pueden perder.

3. Renacimiento: de esta época tan característica de Italia quedan innumerables monumentos, de los que hay que destacar la plaza de San Pedro y su basílica en el Vaticano, así como muchas de las obras de arte que ahí se resguardan, como la escultura de “la Piedad” o los frescos de la Capilla Sixtina.

Dato curioso: al contrario de lo que muchos piensan, la pintura de “La creación de Adán” no es grande ni resalta, sino que simplemente forma parte de las muchas pinturas que hay en la capilla sixtina, por lo que, vista desde abajo, desde donde las personas podemos verla, es diminuta e incluso implica cierto empeño para poder ser encontrada entre todas las pinturas del techo.

(No se pueden tomar fotos adentro de la capilla Sixtina. Nosotros tomamos esta sin querer, y aunque no se ve nada claro, se puede tener una idea de las muchas diferentes pinturas que hay en ese techo. ¿Ustedes pueden ubicar "La creación de Adán"?).

4. Durante el periodo Barroco fue que se construyó una de las fuentes más famosas del mundo (si no es que la más famosa): la fuente de Trevi, donde cientos de turistas lanzan monedas cada día, pues la tradición dice que si quieres volver a Roma debes lanzarle una moneda.

Dato curioso: a esta fuente se le lanzan monedas que suman aproximadamente cuatro mil euros cada día; ustedes pueden sacar la cuenta de cuántos euros al año consigue la fuente gracias a puros deseos y ganas de regresar a Roma por parte de los turistas. Se dice que el dinero es donado a asociaciones de caridad, y ojalá en verdad sea así. Yo no he lanzado ninguna moneda y sí he tenido la oportunidad de regresar, pero igual hay gente más supersticiosa que prefiere asegurar su regreso...

(Recomendación: entre más temprano se llegue a la fuente de Trevi, más fácil es encontrar poca gente y aprovechar para tomar buenas fotos sin que aparezcan turistas tomándose fotos de fondo).

5. Un monumento del siglo siguiente, es decir, del s. XIX, es el “Altar de la patria” o “Monumento Nacional a Vittorio Emmanuele II”, que se ubica en Piazza Venezia. A pesar de que no es tan célebre como los otros monumentos mencionados, es también muy visitado y para muchos turistas resulta una de las plazas más llamativas de la capital italiana.

Dato curioso: durante mi viaje escuché opiniones de italianos a quienes no les gusta mucho este monumento porque sienten que rompe con todo el estilo auténticamente antiguo que hay en el resto de los monumentos importantes de Roma; por esto y por su color blanco y columnas en hilera es que me dijeron que muchos lo llaman “la dentadura postiza de Roma”.

Por lo que respecta a atracciones más modernas en esta ciudad, se puede mencionar el parque temático “Cinecittà”, un parque de diversiones con la temática del cine, o el parque acuático "Hydromania", ideal para los días de calor. Yo no fui  a ninguno, por lo que no puedo hablar desde mi experiencia, pero sí puedo opinar que tal vez sería preferible conocer en Roma esos otros monumentos que comenté, esos que la hacen una ciudad única, y dejar para último momento este tipo de atracciones más modernas que realmente no tienen nada de particular y se pueden encontrar en cualquier otra ciudad. 

Además de lugares... ¿qué hay en Roma?

Ir a Roma implica caminar mucho, sorprenderse y también comer muy muy rico. Lamentablemente es una ciudad muy cara, pero siempre se pueden encontrar opciones no tan caras para poder disfrutar de la gastronomía italiana en su capital.

Comer en el centro o cerca de los lugares turísticos siempre es más caro, por eso si es posible alejarse de estos lugares para buscar un lugar para comer es lo más recomendables. Las pastas típicas de la región Roma son la “pasta all’amatriciana” y la “pasta alla carbonara”. La primera lleva salsa de tomate y guanciale (una especie de tocino), mientras que la segunda tiene como ingredientes principales el huevo y también el guanciale. Sobre pizzas habría mucho que decir, así que solo les digo que hay una gran variedad para vegetarianos y no vegetarianos, y todas son deliciosas. Los lugares donde se pueden encontrar las pizzas al mejor precio son aquellos donde venden Kebab.

Para postres hay dos opciones célebres: gelato o tiramisú. Heladerías hay por toda Roma, pero desde luego hay unas mejores que otras. Las que puedo recomendar porque he estado ahí y me ha fascinado todo lo que probé son los helados “Giolitti” y “Della Palma”, ambos lugares situados en el centro de Roma y con precios no  tan económicos, pero tampoco tan caros. Los helados ahí son una verdadera maravilla y valen cualquier gasto. La heladería “Della Palma” ofrece más de ciento cincuenta sabores de helado (¡así es, ciento cincuenta!, yo tampoco lo creía hasta que fui y lo vi con mis propios ojos), por lo que es el lugar perfecto para quien busca variedad. En los helados “Giolitti” no hay tanta variedad de sabores de helado, pero sí hay una gran variedad de postres italianos, entre los que recomiendo los famosos cannoli sicilianos; ¡son de los más ricos que probé en toda Italia!

(Este delicioso helado, como se puede apreciar, contiene dos de los 150 sabores que ofrece la heladería "Della Palma", ubicada cerca de la Fuente de Trevi).

Por lo que respecta al tiramisú, el lugar más famoso y recomendado es la cadena “Pompi”. Tienen tiramisú de distintos sabores: desde el original hasta uno con plátano o con fresa. Hay variedades con y sin alcohol para todo tipo de dietas. Para mi gusto resultó más caro de lo que valía, pero eso ya es una opinión personal y he conocido a gente que, al contrario que a mí, sí le han gustado mucho estos tiramisús. Lo que sí no puedo negar es que el tiramisú es uno de los postres que toda persona debe probar en su viaje a Italia.

Yo he tenido la oportunidad de estar en Roma más de una vez, y a pesar de eso sigo sorprendiéndome de su belleza cada que la vuelvo a ver. No importa cuántas veces pase por el mismo edificio, entre a la misma iglesia o vea la misma fuente, hay tantos detalles en cada detalle de esta ciudad que de verdad no se puede terminar de conocer, y en consecuencia es imposible dejar de sorprenderse de todo.

Hasta aquí mi primera entrada sobre Roma. Quédense al pendiente para ver las siguientes.

¡Gracias por su atención y hasta la próxima!

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