De fiesta en Puerto Vallarta

Anteriormente había hablado un poco de ir a bailar en Puerto Vallarta, a la fecha de hoy, ya tengo más información acerca de la vida nocturna por lo que esta publicación se va a tratar principalmente de: salir de fiesta en el Malecón. 

El malecón de Puerto Vallarta tiene dos personalidades muy distintas, de día es un recorrido familiar con eventos al aire libre, deportistas en bicicleta, madres paseando a sus hijos en carreola, perros y sus dueños disfrutando del sol, parejas de enamorados compartiendo el atardecer,  etcétera; pero de noche, las tiendas de curiosidades y artesanias cierran y las remplazan los antros y bares, y comienzan a desfilar lindas mujeres arregladas y galanes también con sus mejores outfit. La mayoría de los turistas  (porque los antros del malecón se llenan más de turistas que de locales, ya que estos prefieren ir a los que no estan ahí) comienzan a hacer fila para ingresar a alguno de los principales antros: mandala, zoo o vaquita; los cuales están relativamente juntos, si han ido a Cancún puede que el Mandala y la Vaquita les suenen familiar y eso es porque allá también hay y el concepto es básicamente el mismo, pero para los que no tienen ni idea, no se preocupen que para eso es esta publicación.

Mandala.

El lugar es bastante amplio en realidad, ocupa de largo una cuadra y de ancho tiene como entre quince a veinte metros, tocan música variada pero tirandole más a lo popular del momento, así que es probable escuchar reggeaton, pop, algunas de luis Miguel (famoso cantante mexicano que volvió a tener mucho auge por su serie en Netflix) hip-hop, etcétera. No se si sea de diario,  pero no pusieron nada de house y si recuerdo bien, tampoco electrónica. 
Cuando fuimos nosotros tuvimos que pagar un cover de cien pesos, el cual puedes saltarte si desde un inicio vas con la idea de pagar botella, es un alivio que no manejara el mismo cover que en Cancún,  dónde es mayor a cuatrocientos pesos y arriba de mil con barra libre. 
El antro/club nocturno/boliche, tiene áreas de diferentes alturas, inclusive hay un segundo nivel desde el cual tienes una vista casi completa del lugar, con un espacio amplio por si te sueles engentar, pero si no me equivoco solo es por si estas dispuesto a pagar botella (no muy baratas por cierto). 

Vaquita.

Este lugar diría que se llena más de jóvenes, y se debe principalmente porque no cobran cover en el ingreso,  lo que indirectamente segrega a los que ingresan, ¿a que me refiero? A que los que no tienen capacidad monetaria suficiente (en este caso jóvenes que aun estudian y su fuente de ingreso es sus papás)  suelen ir a dónde no hay cover, y entre más elevado sea el costo del cover, más "exclusivo" es el lugar. 
Nosotros ingresamos primero aquí pero era imposible moverse entre la gente, por mas que recorrimos todo el lugar en busca de espacio,  nuestra búsqueda fue en vano.La música que suelen poner es reggeaton lo que le da un ambiente de "cachondeo" y los precios son similares a los de todos los antros, con tragos arriba de los setenta pesos y botellas de mil y tantos en adelante. 

 Zoo.

 No los voy a engañar a este antro simplemente lo vemos desde afuera el cover tenía un costo de $200 y el ambiente no se veía tan bueno, por lo que escuchado de otras personas suele ser un lugar divertido pero teniendo em cuenta que la música que ponen cuando nosotros pasábamos era electrónica, pero al parecer por lo que me han comentado otras personas es un lugar muy variado y el cover va dependiendo de la temporada,  el costo de la barra libre y también la música,  así que la única verdadera identidad que tiene son los animales en la entrada y las "jaulas" en las plataformas para las personas exhibicionistas o que les guste bailar sin prejuicios.