El viaje y la llegada..."BONNE ANNÉE"
El viaje y la llegada..."BONNE ANNÉE"
Ayer les contaba de mi partida desde el aeropuerto de México (con por lo menos 4 o 5 chamarras encima de mí, para que mis maletas pudieran pesar lo adecuado), con mi mochila en la espalda, mi almohada confortable en el brazo y no podía faltar lo indispensable, mi libro para el largo trayecto.
Dispuesto a experimentar todo lo posible me subí al avión si bien contento por mi viaje, un poco preocupado por lo que dejaba atrás y por el miedo de encontrar un lugar nuevo con un idioma el cual no dominaba para nada bien en esos momentos.
Y después de aproximadamente 9 horas de vuelo me encontraba la madrugada del 29 de diciembre en el aeropuerto de barajas, con un frio que calaba hasta los huesos, para esperar 2 horas el cambio de mi vuelo a parís; Que en realidad se pasaron demasiado rápido ya que entre que salía del avión, el camioncito que me llevo a las terminales y la búsqueda de la puerta se me fue casi una hora y media, (siempre la primera vez que llegas a un aeropuerto nuevo y no conoces las puertas tardas por lo menos 1 hora en encontrar la de tu vuelo, por lo menos eso es lo que me pasa a mí, claro está si el aeropuerto es grande, ya que si es uno pequeño es claro que no se tiene este problema).
Espere aproximadamente otra hora y me dirigí a la puerta para tomar mi avión a ¡PARIS!, que después de otras cuantas horitas me encontraba en la terminal de Orly contentísimo por mi recorrido a través del mundo.
Tome mis maletas y afuera de la terminal ya me esperaba una amiga Parisina para llevarme a su departamento, salimos del aeropuerto, compro boletos para el bus (estos los compras en unas maquinas afuera del aeropuerto, las cuales se encuentran por todo parís y te sirven para viajar ya sea en el metro o en los diferentes buses de Paris) y nos dirigimos a su departamento.
Una vez llegados, deje mis maletas en el cuarto y me quite mis veinte mil chamarras que llevaba puestas, lo cual fue motivo de risa de por lo menos una hora.
Estuvimos platicando de mi viaje un buen rato, comimos y hasta tuvimos tiempo de jugar “lapins cretins” ya por la tarde mi amiga me pregunto si no estaba muy cansado por el viaje y por el cambio de horario (8 horas mas) y le dije que no, a lo cual me propuso una cena con uno de sus amigos “cremaillere” ya que celebraba la renta de su nuevo apartamento (Festejo muy común entre los franceses) llego la noche, salimos listos al festejo, y llegamos de pasada por los aperitivos, un poco de vino, y una pizas congeladas para preparar, tomamos el tren y “Voila” llegamos junto con su amigo.
En ese momento yo solo sabía decir “Bonjour” y por suerte mi amiga hablaba español (no lo mencione antes, pero ella ya había estado en México hacia un año o dos, y era muy amiga de una amiga mía, he ahí el vinculo de cómo la conocía) entramos y si, era un apartamento muy bonito, nos hizo el recorrido y pasamos a la sala a los aperitivos, comenzaron la plática y yo calladito sin decir nada, ya que no comprendía gran cosa (de vez en cuando mi amiga me traducía algunas cosas) pero bueno, entre señas y traducciones probé por lo menos cuatro o cinco tipos diferentes de quesos, dos vinos tintos y uno blanco, y pastelitos que no tenía ni idea de que eran pero estaban riquísimos (Deben de saber que los franceses tienen una infinidad de productos de panadería exquisita, que a mí me encanta, y si tienen el placer de conocer Francia tienen que degustarlos TODOS!) Se hacía tarde, y nos despedimos (2 besos en la mejilla, cosa que no se acostumbra en México), tomamos de nuevo el tren y de regreso a su departamento.
Al día siguiente nos levantamos no muy temprano, tomamos el “p’tit dejauner” (Leche, café, o té, con un baguette, mantequilla y mermelada o nutella “típico desayuno francés”) y posteriormente me dedique a conocer parís, y he aquí algunas fotos.
Como era de esperarse comí en la calle y si bien esperaba comer algo francés, termine comiendo en un restaurante de comida rápida, (Quick, decisión tomada gracias a un amigo que me dijo que con tarjeta de estudiante recibes descuentos, y así fue, por menos de 8 euros comí dos hamburguesas, papas fritas y refresco, que a mi gusto no estaban mal “Cosa que de vez en cuando hago cuando no tengo ganas de cocinar”)
Al anochecer regresamos cenamos algo típico mexicano “quesadillas” que es un platillo con dos tortillas y al centro queso rallado y jamón.
Al día siguiente era la víspera de año nuevo y para mi sorpresa me tope con que iríamos a una fiesta temática en la cual teníamos que disfrazarnos, tema de la fiesta “sucesos del 2011” y yo no tenía ni idea de que disfrazarme…
Sugerencia de mi amiga fue ir a una tienda de disfraces que no se encontraba lejos de su apartamento, caminamos tres o cuatro bloques de calles y llegamos a una tienda diminuta en la cual había una fila de 30 o 40 personas intentando entrar (al parecer es típico en Francia disfrazarse en las fiestas y más que nada en año nuevo) comenzamos a esperar y después de por lo menos 40 minutos logramos entrar a la tienda (repleta de disfraces) y entre tanto no sabía que elegir; ,Mientras yo me decidía, mi amiga compro una peluca enorme y al final yo termine comprando un par de gafas redondas, (me disfrazaría de Steve Jobs), salimos de la tienda y nos dirigimos a su casa.
Entre tanto llegaron más amigos de mi amiga, y comenzamos con los aperitivos, mientras las chicas se preparaban para la fiesta.
Llego la noche, tomamos el metro y no mucha gente estaba disfrazada como yo lo pensaba, por lo contrario todos nos miraban como bichos raros, pero la verdad no me importo mucho; llegamos al edificio de la fiesta, y al entrar todo mundo estaba disfrazado.
Mi amiga me presento de uno a uno a sus amigos (de beso de nuevo, lo digo porque se me hizo extraño y tarde en adaptarme a este tipo de saludo, tema del cual hablare otro día) y mientras ellos se divertían de mi acento raro y enseñándome insultos en francés (Uno los tiene que aprender algún día, solo que nunca pensé que al tercer día lo haría, lo cual me causo mucha gracia) yo comía y probaba todo lo que podía, (muy rico por cierto) y entre changos, astronautas, tin tin, entre otros llegaron las doce y todos nos felicitamos el nuevo año (Mi año empezaba de lo mejor, con uno de mis sueños cumplido).
Se termino la fiesta, regresamos al departamento de mi amiga (en el cual también se quedaría esa noche otra amiga más) y al día siguiente todos estábamos cansadísimos por la fiesta por lo cual no queríamos despertarnos muy temprano, pero en cambio a primera hora de la mañana alguien llega y comienza a brincar en la cama gritando:
"BONNE ANNÉE","BONNE ANNÉE", "BONNE ANNÉE"
Terminamos despertándonos todos y después a tomar el desayuno, y a descansar por el resto del día (jugando lapins cretins). Y dormir, para al día siguiente comenzar de nuevo con el recorrido de parís, pero eso lo contare después.
Este año nuevo fue por mucho uno de los mejores de mi vida.
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Comentarios (2 comentarios)
Javier López hace 12 años
¡Gran entrada!
c c hace 12 años
Gracias Javier, en verdad es una experiencia que como he leido por varios blogs, todos deberiamos de experimentar. y lo digo de piel! Esto no se cambia por nada