La ciudad de la ¿luz?

Buenas noches erasmusetes, ¿cómo habéis pasado el día? Yo con muchas agujetas porque ayer me metí una tunda (sin palos ni azotes, pero como si los hubiera habido) de abdominales que no fue ni normal, pero estoy satisfecha. Estaba remirando mis cosas y he recordado que no os he contado nada de mi visita a París (os he hablado de Disneyland y del Cementerio de Pere - Lachaise, pero no de París París).

Viajé a París del 9 de octubre al 13 de 2012, entrenándome antes de irme de erasmus. Fui con dos de mis compañeras y amigas de clase, Noelia y Lydia, planeando visitar a otra de nuestras amigas, Carol, que había empezado ya su erasmus allí. Nuestro vuelo salía el día de la Comunidad Valenciana, pero nunca me importó por perdérmelo la verdad. ¡Qué me iba a París!

Cogimos el vuelo bastante pronto desde Valencia y, como no, viajábamos a Beauvois. Para quien no lo sepa eso quiere decir que viajábamos a un aeropuerto a una hora de Paris, por o que luego debíamos de coger un autobús hasta París city. Cuando llegamos a Beauvois ya nos recibía elmaravillosotiempo francés: lluvia y frío. ¡Oh la la, tres bien! (jajaja, yo sola me acuerdo y me entra la risa).

Comenzamos a hacer la cola para comprar los billetes del autobús al salir del aeropuerto. Ida y vuelta era algo así como unos treinta euros (aquí pagas el suplemento de Ryanair xD).

Fue sumamente gracioso cuando llegamos a la taquilla y mi amiga Lydia comenzó a practicar su francés de instituto. Noelia y yo no teníamos ni idea de francés así que observamos la odisea de aquí Lypepe mientras la taquillera no se enteraba de demasiado. Finalmente los compramos y nos metimos en el bus rumbo aPaguí. 

Al llegar seguimos las maravillosas indicaciones de Noelia para llegar al metro. Primer reto pues. Y bueno, eso fue fácil, el reto de verdad vino para comprar el billete porque allí había más gente que en las rebajas de El Corte Inglés. Lo conseguimos también. Parece que la cosa no iba mal, o iba al menos. 

Entramos, buscamos la dirección que debíamos de tomar y voilà, esperando al metro nos encontrábamos. Pero allí llegó lo mejor. Resulta que en el metro de París hay uan doble puerta de seguridad: una es la del metro y la otra es una que hay en el andén que se cierra muy violentamente  cuando se cierran las puertas del metro. Nosotras no sabíamos eso... Y todas pollos, en lugar de darnos prisa para entrar, nos lo tomamos con toda la caaaalma del mundo.

Lydia y yo estábamos dentro del vagón cuando de repente, las puertas se cerraron bruscamente, atrapando mi abrigo y dejando a Noelia fuera del vagón. El metro se puso en marcha y nosotras observamos entre risas y aspavientos como Noelia nos hacía gestos de que la esperásemos a la siguiente.

Lydia se puso un poco nerviosa y me empezó a decir que la llamara, que le mandase un mensaje... Yo le dije que ya nos había hecho suficientes gestos como para llegar a entender que la esperábamos en la siguiente parada. Total allí los metros pasan cada minuto. En la siguiente paramos, esperamos a Noelia y nos subimos todas juntitas en el mismo metro para llegar a Montreuil, el barrio periférico donde se encontraba el piso de nuestra amiga Carol.

Allí flipamos en colores porque aunque el barrio daba un poco de miedito el piso estaba increíble: era de un guionista francés. Pero no había tiempo para pararnos, porque nos moríamos de hambre, así que fuimos al restaurante... McDonalds :D. Esa es toda la gastronomía de la que puedo hablaros, lo siento jajaja. Bueno de eso y del chino - tailandés en el que mis amigas compraron un día la cena y como véis no es que eso sea demasiado francés.

Esa tarde visitamos la zona del Moulin Rouge (cabaret parisino, construido en 1889 por el catalán Josep Oller, que también era propietario del Olympia. Está situado en el barrio rojo de Pigalle en el Boulevard de Clichy, al pie de Montmartre) y el Café des Deux Moulins que si habéis visto la película Amélie sobran las explicaciones y si no, pues también porque os da igual.

Al día siguiente pasamos a visitar la iglesia de la Madeleine, que parece un parteón romano e impresiona bastante. También visitamos la zona del Sagrado Corazón donde también se encuentra el genial tiovivo de Amélie, de nuevo jaja.

Los días los tengo un poco difusos. Creo que al día siguiente visitamos el Louvre donde, cuando salimos, se puso a llover de tal modo que no pude hacerme la foto con la pirámide transparente. Además, yo no soy demasiado de museos porque no entiendo absolutamente nada de arte, así que me limité a disfrutar de los cuadros sentada en los bancos del museo mientras Lydia y Noelia hacían miles de fotos poseídas. Vimos la Mona Lisa, muy mona ella (juas juas). No me llevé decepción porque todo el mundo me había advertido al respecto de cuan pequeña era.

También visitamos la tumba de Napoleón y los Jardines de Luxemburgo: diseñados en 1615 bajo las órdenes de María de Médicis, son los jardines más céntricos, populares y bellos de París. El Palacio de Luxemburgo, que da nombre a los jardines, es en la actualidad la sede del Senado francés. Es genial la parte en la que los jardines tienen sillas por ahí dejadas. Algo que nadie se imagina que sea posible en España (tener una silla en lugares públicos sin que nadie se la lleve, no hablemos de más de una).

Por supuesto no me olvido de nuestra visita a la catedral de Notre Dame, la cual sí que me decepcionó porque me la esperaba algo más grande. Estuvimos un buen rato dentro observando las vidrieras que son preciosas y la construcción.

El arco del triunfo al que subimos y cuenta con unas vistas maravillosas también lo visitamos y, of course, la Torre Eiffel: diseñada por el ingeniero francés Gustave Eiffel y sus colaboradores para la Exposición universal de 1889 en París. Fue construida en dos años, dos meses y cinco días en controversia con los artistas de la época, que la veían como un monstruo de hierro. Mis amigas subieron, pero yo me quedé abajo porque sinceramente había muchísima niebla y subir para no ver un carajo, como que no me llamaba demasiado la atención.

El último día lo dedicamos a lo que más me gustó (aquí se refleja claramente mi edad mental xD) que fue Disneyland París.

¡Ay que casi se me olvida! Que lo de ciudad de la ¿luz? va porque luz luz lo que se dice luz, pues como que en París no mucha... Más bien lluvia.