Padova - Padua

'Venezia-Padova' se hace muy bien en tren: tienes un billete de ida y vuelta por 9 € desde la estación 'Venezia S. Lucia', lo que es apenas nada para acudir a una pequeña ciudad bastante agradable.

Sólo a unos minutos a pie de la estación, ahí está 'la cosa', por excelencia, que hay que ver en Padua: La 'cappella Scrovegni'.

La capilla 'Scrovegni', es una obra de arte de Giotto Di Bondone. Construída sobre las ruinas del anfiteatro romano, a día de hoy puedes acceder rodeando el parque de la ciudad y siguiendo las indicaciones en el suelo con la palabra "Giotto", pintadas con la técnica del fresco. Los frescos fueron encargados por Enrico Scrovegni a principios del trecento: la realización duró tres años, entre 1303 y 1306.

La visita a la capilla no es tan sencilla. Debes reservar tu billete (puedes hacerlo on-line en este: Enlace). Por 6 € (tarifa de estudiante), puedes realizar una visita de 30 minutos: 15 minutos en una sala de descontaminación, mientras puedes sentarte para ver una pequeña película de presentación de la capilla, de los frescos y de su historia; y 15 minutos en el interior donde puedes sumergirte en esta obra de arte. Es corto, así que aprovéchalo.

Enseguida, el mismo billete que has sacado para la capilla te permite acceder al 'Musei Civici Eremitani', que se encuentra en el mismo recinto que la sala de recepción para visitar la capilla. En este museo se exponen una gran cantidad de antigüedades: etruscas, prerromanas, romanas e, incluso, egipcias.

Justo en frente, hemos podido visitar el 'Palazzo Zuckermann' (siempre con el mismo billete) y en el tercer piso, el 'Museo Bottacin'. En el primer piso, vemos una vasta exposición de arte decorativo (con todas las épocas mezcladas), y en el segundo, una exposición numismática seguida de muebles, de esculturas y algunas pinturas.

Ya en la ciudad, al pasear, pasarás seguramente delante del reloj astronómico ('orologio astrario') de la ciudad, 'Piazza dei Signori', más antiguo que el de Venecia. Data del quatrocento, y se terminó de construir en 1437.

No muy lejos, puedes acudir a la 'Piazza della Frutta', que bordea el 'Palazzo della Ragione' (que se puede visitar por 2 € con tarifa de estudiante). Si pasas por allí al mediodía, bajo las arcadas, tu tarjeta de crédito o tu billetera no podrán resistirse a los manjares que venden, para desgracia tuya.

La ciudad es conocida también por su parque 'Isola Memmia', de casi 9 hectáreas, en consecuencia, el parque más grande de Italia y uno de los más grandes de Europa. La isla, de forma elíptica, está rodeada por un canal limitado a cada lado por una hilera de esculturas (78 actualmente).

No lejos de "l'Isola Memmia", se encuentra 'l'Abbazia di Santa Giustina' y la 'Basilica di Sant'Antonio di Padova' (foto). En esta última, está prohibido tomar fotos, pero puedes visitar la basílica gratuitamente. Una de las capillas está dedicada al relicario de Saint Antoine, con varias reliquias (dedo, lengua, mentón, etc... ).

Volviendo al centro, puedes ir al 'Palazzo Zabarella', que, actualmente, expone pinturas de colecciones privadas (Van Gogh, Monet, Degas, etc. ) Sin embargo, el precio de entrada, incluso con descuento para estudiantes, es de 13 euros, así que realmente hay que tener muchas ganas para verlo. Y, una vez más, no se permiten las fotografías.

Justo al lado, encontramos el 'Palazzo Bo', una de las más antiguas universidades de Europa con un patio interior bastante extraño. Puedes entrar sin pagar, y si deseas visitar el teatro anatómico, debes consultar los horarios de visita que se indican allí mismo.

Galería de fotos