Un paraíso en la Tierra - Nápoles, Italia

Nunca me imaginé que sería capaz de enamorarme de un lugar tan rápido. Pasé una semana en Nápoles (Italia) y me sentí como si hubiera quedado primera en un concurso importante. Volvería a ir si tuviera la oportunidad de hacerlo.

Nápoles, a grandes rasgos, no es, bajo mi punto de vista, muy impresionante. Es una ciudad caótica y un poco sucia. Sin embargo, la comida es excelente y barata. Comí en un restaurante cerca de la estación de tren de la ciudad que se llamaba Lucignolo Bella Pizza donde servían buena pizza y cerveza. Aunque la ciudad es un tanto peculiar, sus alrededores son maravillosos. Visité algunos de los lugares de interés turístico de Nápoles, fui a la isla de Capri y tuve el honor de visitar Pompeya.

Capri es la isla más bonita que he visto en mi vida. Creo que nada de lo que diga será suficiente para hacer justicia a su belleza, pero os dejaré algunas fotos para que os hagáis una idea de cómo es. Se puede llegar desde Nápoles cogiendo un ferri, que dura una hora. Toda la isla está muy limpia y la comida es genial. Si tienes oportunidad de ir, te recomiendo que hagas una excursión en barco por la isla, ¡te encantará! Como ya os he dicho, no hay palabras que la describan, así que mejor os dejo algunas fotos.

Visitar Pompeya fue una de las mejores experiencias que he vivido. Ambos lugares me impresionaron, pero de manera diferente. De Capri me quedo con su elegancia y belleza y de Pompeya con su historia y su arquitectura.

Un poco de información para aquellos que no sepan qué es Pompeya: Pompeya fue una ciudad romana cercana a Nápoles. Tras una erupción del Vesuvio, toda la ciudad se destruyó y quedó sepultada por una capa de lava y cenizas. Tras muchos años, la redescubrieron y en este momento es uno de los yacimientos arqueológicos más bonitos que existen.

Hace falta un día entero para visitarla. Es muy grande y tiene muchas construcciones que merece la pena ver. La entrada no es muy cara. Si eres estudiante y tienes menos de 25 años, tendrás que pagar 2 €. No te olvides de llevar documentación o carnets que permitan verificar ambos requisitos. Si tienes más de 25 años, deberás pagar 15 €.