Mis viajes a Milán

Introducción

Hola a todos, ¡espero que estéis genial!

En este artículo quiero hablaros sobre mi experiencia en Milán y en Italia y lo increíble que fue este viaje. Bien, para ser sinceros, estuve dos veces en Milán, por lo que soy experta en esta ciudad. No he estado en otras ciudades italianas, es decir, las he visto de pasada desde el bus o el tren, pero no las he podido visitar, sabéis a qué me refiero. Quería visitar Venecia e iba a hacerlo, pero cambiaron los planes y decidí ir allí en otro momento, cuando realmente fuera a disfrutarla.

La primera vez que fui a Milán fue con una excursión del colegio, se puede decir que era como una "misión", y la segunda vez fui con mis amigos por pura diversión y por viajar, que fue una experiencia increíble, a la vez que aterradora. Éramos dos chicas viajando tan lejos y solas, no sabíamos qué iba a pasar, y sobre todo no es algo que hagas todos los días, no es como ir al supermercado o algo parecido. Viajábamos a 400 km de distancia, que no es algo que haya que ignorar.

Bien, este era el plan: teníamos que preparar un proyecto y a la vez ayudar a unos niños, todo dentro de un horario. Aun así, teníamos tiempo para dar una vuelta por la ciudad y visitarla, de disfrutar de nuestro viaje a Milán y no solo sentarnos en el hotel a estudiar y escribir trabajos. Estaba ansiosa por ver Milán y visitar todos sus rincones, así que salimos tan pronto como tuvimos una oportunidad y visitamos la ciudad y sus lugares con encanto.

En primer lugar, llegamos al metro de Milán y pasamos a una de sus estaciones. El metro es muy cómodo, rápido y eficiente, y es un buen medio de transporte para moverte por la ciudad. Lo triste es que está bajo tierra y no puedes ver la ciudad en él, la verdad. Sin embargo, si quieres moverte por la ciudad úsalo, llegarás más rápido a tu destino.

Duomo di Milano

La catedral de Milán es el símbolo de la ciudad, y una de las mayores catedrales de Italia y Europa. Es un lugar increíble que todo el mundo debería visitar una vez en Milán, no solo pasarte a verla. La arquitectura es impresionante, y la catedral de noche es preciosa, cuando se encienden todas las luces parece hasta milagrosa.

La Scala Opera

Tienes que visitar la ópera de Milán, un lugar histórico donde famosos compositores, entre ellos Rossini, Puccini, Verdi y Toscanini, han dado conciertos. Se construyó en 1778, y desde entonces ha albergado a estos y otros compositores de renombre. Aunque no he visto el interior, desde fuera es un edificio increíble.

Arco della Pace

Se trata de otro símbolo de Milán. Se ordenó su construcción en 1807 en honor a Napoleón, pero no se terminó hasta 1838. Es enorme, con numerosas ornamentas y buena construcción. Tiene cuatro figuras de hombres victoriosos subidos en sus caballos en negro, mientras que el arco en sí es blanco, que crea un bonito contraste. Si me preguntáis, es otro sitio que debéis visitar en Milán.

Officine del Gelato Milano

Si te gusta el helado, entonces es el momento de ir a Gelato Milano, un sitio por el que hay que pasar obligatoriamente. Querrás probar todos los helados de allí ya que tienen una pinta deliciosa y no podrás decidirte por uno. Además, como no puedes comerte todos, no es suficiente ir una sola vez. Tengo que decir que es el cielo para los amantes del helado.

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