Tengo un hermano gemelo, pero somos totalmente diferentes
Siempre que le digo a alguien que tengo un hermano gemelo, me miran como si hubiese dicho algo increíble. "¿Tienes un gemelo? ¿Os parecéis? ¡Enséñame una foto! ". Pues bien, de hecho no nos parecemos; cuando la gente nos ve juntos, suelen pensar que parecemos más primos que hermanos. Sí que es cierto que nos parecíamos cuando éramos pequeños. Imagínate: dos niños vestidos con la misma ropa pero de distinto color, para que la gente nos diferenciara y se diera cuenta de que éramos gemelos; dos niños con el mismo corte de pelo porque mi madre pensaba que era adorable. De todos modos, ¿qué corte de pelo llevan los niños?
La inteligencia y la fuerza
A medida que pasaba el tiempo, cada uno creció a su ritmo y se desarrolló de forma distinta, tanto física como intelectualmente. A mí empezaron a interesarme cosas que no tenían nada que ver con las que le interesaban a él, o a cualquier otro chaval de mi edad. Soy italiano y no me gusta el fútbol. ¡Que, ¿qué?! Así es. No me va el deporte. Salgo a correr, hice ejercicio durante unos años, pero eso es todo. Me gusta que mi cuerpo esté lo mejor posible, pero no me pidas que vaya al gimnasio contigo todas las mañanas porque no voy a ir. Mi hermano, en cambio, es un apasionado del deporte, no es el más aplicado en los estudios y le encantan las tareas manuales (como levantar pesas, conducir y demás). Yo paso la mayor parte del tiempo con mi ordenador, tengo perfiles en redes sociales que actualizar, estudio en el extranjero, me encantan los idiomas y solía tocar la guitarra. Así que podríamos decir que él es la fuerza y yo la inteligencia, ¿no?
Internacional vs. local
Hablando en serio, yo me fui de intercambio en el instituto. Dejé mi vida atrás y empecé una nueva a los 16/17 años. Luego volví a Milán, me gradué del instituto y me mudé al extranjero, donde empecé a estudiar y a trabajar para cubrir mis gastos. Dentro de poco, me iré de intercambio otra vez gracias al programa Erasmus. Pasaré un semestre en el Reino Unido y, si todo va bien, encontraré unas prácticas en otra parte y me volveré a mudar. Pero él está en casa, siempre ha estado en casa y, casi con total seguridad, se pasará la vida en casa (y me refiero a Milán, no a casa de mis padres, ja, ja). Él piensa que no se le da bien el inglés, o los estudios en general, pero no creo que sea así. Solo necesita un empujoncito de vez en cuando para recordarle que, si la gente puede hacer cualquier cosa, él también podría si quisiera.
Comunicación entre gemelos
Aunque nos gusten cosas diferentes y no nos parezcamos físicamente, somos gemelos. Crecimos en el mismo útero, nacimos el mismo día y casi a la vez. A veces la gente me pregunta: "¿Es verdad que los gemelos os entendéis solo con miraros? ", lo cual es otra forma de preguntar si es verdad que los gemelos no tenemos que hablar sino que nos comunicamos con la mente. Mi respuesta solía ser: "No, eso no es algo que pase". Hasta que un día, cuando estaba de intercambio, sentí algo en el abdomen. Me dolía mucho y no sabía por qué, ni de dónde venía este dolor. Unas horas después, mi madre me contó que mi hermano estaba ingresado porque le iban a quitar el apéndice. No sé si fue una señal, o una indigestión, o si me dí un golpe justo el mismo día en que operaron a mi hermano, pero me gusta pensar que fue el destino y que puedo sentir cuándo mi hermano sufre.
Cosas en común
Aunque cueste de creer, sí que tenemos algunas cosas en común, como por ejemplo:
- Somos bastante tímidos, pero si queremos conseguir algo, lo conseguimos;
- Nuestro animal favorito es el perro (puede que porque tenemos un perro desde los seis años, pero bueno);
- Nos llevamos bien, es decir, si uno necesita un favor, siempre nos ayudamos (aunque siempre finjamos que nos moleste al principio, ja, ja, ja).
- Cristian
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