Feria del artesano

La Navidad, una fiesta con todas sus luces, los regalos que recibes de tus amigos y la nieve que no ha estado cayendo en serio durante años, hace feliz a cada veinteañero como yo, pero si hay algo que supera todo esto, es la llamada “Feria del Artesano”, que tiene lugar en Milán entre los últimos días de noviembre y la primera semana de diciembre. Más precisamente, se lleva a cabo en “Rho Fiera”, que es un área extraurbana, que en sus inmensos pabellones, hace dos años, albergó la EXPO. Esta es una gran exposición de todos los países del mundo sobre artesanías que van desde muebles y cosméticos, hasta alimentos, ropa y diseño. Dado que se celebra en Italia, se establece más de un lugar para realizar “Bel Paese”, con una sección muy visible e inherente a Lombardía. En un día es casi imposible verlo por completo, con la gran cantidad de personas que se mueven en masa en busca de regalos de Navidad, como si las tiendas no estuvieran abiertas afuera. Entiendo la emoción de encontrar algo especial, porque ofrece productos de todo tipo y para todos los bolsillos ya que tiene mucha diversidad de precios, pero si entre ustedes hay alguien que pertenece a la categoría del visitante que viene con el carrito, debes saber que lo odio con todo mi ser y el de la misma manera también a mi padre, que hace lo mismo. Como si fuera Black Friday, las masas de “rebaños” hacen todo lo posible para no perder una sola ocasión de una buena promoción, haciéndose también una foto o publicando un estado en Facebook para testificar su presencia en este “tan esperado evento”. Desde esta perspectiva, puedes encontrarme tranquilamente en la primera fila, porque incluso en el período más exigente que pueda llegar a tener en mi vida en ese momento, lucho conmigo misma para encontrar al menos un día para ir a esta feria. En mi opinión debería pararse el mundo en ese momento, y el tiro táctico nunca falla.

Además de la variedad de opciones que hay, un componente que tiene un impacto significativo, es la entrada gratuita y teniendo en cuenta que en algunos puestos tienen muestras de alimentos en grandes cantidades, una persona puede ir allí gastando solo en transporte y disfrutando de la feria sin gastar ni medio centavo. Entre los espectáculos, la música y las demostraciones, el tiempo vuela rápidamente, excepto cuando estás de camino o de regreso: allí sentirás cada segundo de tu existencia, aplastado como sardinas dentro del metro en la línea roja o en una línea de ferrocarril “Trenord”, tan amado por su puntualidad y organización por los milaneses y sus vecinos.

Durante 12 horas, desde las diez de la mañana hasta las diez de la noche, nos encontramos en medio de una batalla que ni siquiera Alejandro Magno sabría luchar, pero que sin embargo, los visitantes, tan feroces, pero en algunos casos elegantes, sobreviven con dignidad.

Cada nación aporta su especialidad, con autenticidad y también sin la misma, solo debes pensar en la miríada de "katanas" que se ven en las gradas de Japón que no intimidarían nisiquiera al “sarnoso chihuahua” de su querido vecino. Por otro lado, el curioso clásico se puede deslumbrar mirando con admiración la ropa tradicional que venden en cantidades exorbitantes. Si estás buscando una “yukata” de bajo costo, debes dirigirte al área de Vietnam, que no solo ofrece ropa del Sol Naciente, sino también de China y sus alrededores. Un sombrero imprescindible de Vietnam, es el sombrero que usan los agricultores de arroz, siempre hay alguien que lo compra y lo usa, o lo recicla para un “cosplay”, muy ingenioso. Si te encantan los marcadores, bolsos, bolsas de lona y tarjetas de felicitaciones, estás en el lugar correcto, porque los precios están literalmente muy por debajo de lo normal. Si estás buscando algo un poco más llamativo, ve a la sección de India y estarás bien atendido, deslumbrándote con todo el arsenal de accesorios que hay en los armarios. Y para darle un toque extra a tu aspecto, puedes comprar cosméticos y kits para hacerte tatuajes de “henna”, simplemente moviéndote un poco más para el Medio Oriente. Y mientras esperas a que se seque tu obra maestra, puedes disfrutar de las cosas que venden en las áreas adyacentes, incluyendo por detrás de usted.

¿No te gustan las citas y está buscando algo más exótico, algo por lo que cualquiera persona se atreva a conversar sobre la comida con usted durante la misma? En el mismo pabellón en un continente diferente, precisamente en Australia, puedes probar el mundo de la carne de avestruz o canguro, rodeado de papas fritas, que nunca faltan. Y poco después del área de Oceanía encontrarás el área de América, tanto del norte como del sur, con todos sus sombreros de vaquero, placas de todas partes, camisas claramente impresas, suéteres de hilo de alpaca y varios adornos. En cuanto al tema de las "comidas", las hamburguesas son las maestras, pero nunca tanto como el churrasco y la pastelería, que contiene más productos químicos que cualquier otra cosa. Además, encontrarás un café latino, cuyos granos han sido cultivados con mucho amor por los ángeles, ya que es demasiado bueno.

Al regresar a Asia, desde un punto de vista gastronómico, nunca faltan los vietnamitas, con sus largas colas y su olor a comida frita que se empapa en la ropa sin desaparecer nunca más. Es como una maldición y te perseguirá de por vida, pero los platos son tan buenos que puedes pasar por alto ciertos detalles. Personalmente, soy un cliente fiel de la comida india y de “Sri Lanka”, un concentrado de especias que funcionan muy bien cuando saboreas todo mientras tomas “lassi”, una bebida de yogur de frutas (generalmente de mango o fresa). Por solo €10 tendrás el menú completo de aperitivos, primer plato, segundo plato y guarniciones.

Un detalle que nunca entenderé son los diversos puestos que venden pequeñas guitarras y libros y ropa "medieval", que tiene algo de mágico y otro tanto de vergonzoso. Un verdadero golpe en los ojos y un insulto al buen gusto. Lo siento por aquellos que aprecian este género, pero cuando escribo, me siento obligada a ser sincera, para mantener mi conciencia a salvo.

África y el Cercano Oriente están unidos al Viejo Continente y, en general, exhiben decoraciones y muebles para el hogar de estilo étnico. Además también exhiben alfombras y utensilios de uso indefinido, y para algunos, se permite pensar maliciosamente sobre estos objetos. Para comer, tendrás más oportunidades de tomar un refrigerio o una merienda, ya que en áreas como Marruecos pueden sentarse y tomar el té con algunos dulces que se derriten en la boca.

¿Eres más tradicional y no quieres aventurarte? Europa te recibe con los brazos abiertos con sus inevitables sándwiches de carne y “chucrut” en Alemania o paella en España; también está la opción de “gulash” en Hungría. No te pierdas los bocadillos de vodka en Rusia y las maravillas de la panadería francesa y austríaca. Y como postre están los crepes y churros franceses, empapados en aceite y azúcar, que te harán permanecer en el gimnasio durante dos semanas las 24 horas del día sin abandonarlo. Si hay un “must-have” que no te puedes perder, es la "tartiflette", en Francia, un plato a base de queso "reblochon" (típico de Saboya), tocino, papas y cebolla, en definitiva, felicidad. El primero, derritiéndose, une todo en una mezcla de miedo. Además, puedes disfrutar de degustaciones de ostras y “fois gras”, solo para sentirte por un momento más importante en medio de la “plebe” que ronda los pasillos entre los puestos.

En cuanto al lado artesanal, no puedo dejar de mencionar Portugal, donde encontramos una pareja, esposo y esposa, que hacen esculturas de arcilla pequeñas y medianas, cuyos protagonistas son siempre hombres pequeños involucrados en diversas actividades. Francia es el maestro de la cosmética, entre las infinitas variedades de jabón y perfumes provenzales directamente de “Grasse”, una de las tres ciudades que alberga la escuela para convertirse en "nariz", la que gracias a su sentido del olfato distingue y crea nuevos perfumes. Rusia nunca se da por vencida con los osos, las pieles y las “matrioskas”, y de la misma manera que Gran Bretaña lo hace con su exorbitante cantidad de tazas y juegos de té.

Pero si la terquedad es tu postura y amas Italia con todo tu corazón, olvídate de la “focaccia” convencional en Liguria, ya que es bueno, pero no del todo, y de la misma manera que las envolturas en Emilia Romagna, enfócate todo en “pizzoccheri y sciatt” en Lombardía. Para los que no lo saben, los primeros platos son un plato que consiste en pasta de trigo sarraceno, papas y espinacas, todo sazonado con queso (posiblemente el llamado Casera, típico de la zona), y un poco de mantequilla, donde junto con algunos ajos, se los mezcla para freírse juntos. Estos últimos son trozos de Casera frita, y son envueltos en una masa a base de cerveza. En resumen, son todo un lujo. Dejando a un lado el patriotismo, los amantes del sur encontrarán pan y “pagelle” para sus clientes que adoran Sicilia, así como “arancini” (“arancine” para nazis sicilianos). También encontrarás productos a base de pistacho en todos los sentidos: helados, cremas para untar en varias concentraciones y pasteles. Si tuviera que elegir una región para el tipo de sabor que más aprecio, Calabria ciertamente ganaría, entre todos los diversos sabores de cremas picantes y no picantes que tiene. En primer lugar, en lo que respecta a los quesos, colocaría Cerdeña, con todos sus quesos de oveja en varias edades que posee. Si eres demasiado fuerte para tragar, embebé tu boca con otros alimentos: todavía se está procesando un turrón que te ofrecerá una mujer sarda con ropa tradicional. En el centro de Italia, quienes tienen un premio por la fiambrería que fabrican, puedes conseguir muy buenos fiambres, y si cuestan demasiado para ti ya sea un trozo de jamón o salame, puedes ir disfrutando y probando pequeños bocados que ofrecen alrededor como muestras, y verás que te llenarás en menos de un momento.

Desde un punto de vista no culinario, Italia cuenta con una sección por derecho propio sobre diseño, que incluye ropa, accesorios, muebles y lámparas, además de tener entre una región y otra bancos que están llenos de herramientas para el diseño de pasteles y para la realización de tareas domésticas, hechos con arcilla polimérica, así como libros muy diversos. Las regiones del norte que promueven las escuelas para aprender a tallar madera y, por otro lado, Cerdeña por su artesanía, especialmente con las telas.

Incluso aquellos que aman el juego, encontrarán cómo entretenerse jugando y comiendo a la vez, gracias al stand que anuncia en el Casino "tal dei tali", que les dará “gadgets” y chocolates cuando gane “blackjack”, que afortunadamente participa sin apuesta de dinero, porque es una promoción simple y saludable.

Independientemente de la ubicación del mundo, encontrarás muchos puntos de información sobre el turismo, que los harán soñar con las mejores vacaciones del mundo, gracias a todas las imágenes en los catálogos y postales, pero solo el 1% de las personas realmente se movilizarán para organizar el viaje después de haberse informado del mismo en la feria. Justamente para permanecer inmerso en sus películas mentales, las propuestas son muy variadas, entre los escenarios paradisíacos que tiene Indonesia y la atmósfera invernal que el Tirol del Sur te hace respirar con solo mirar una fotografía.

Si estás buscando el día correcto al nivel de participación para ir a la “Feria del artesano”, te recomiendo ir durante la semana y no el 8, ya que es un feriado nacional y por las mejores ofertas que encontrarás los últimos días, incluso si es un fin de semana.

En resumen, prepárate para este año, faltarán casi diez meses, pero los buenos momentos no tardan en llegar, especialmente cuando se trata de exposiciones. Inscríbase en un curso de defensa personal, entrene con los militares en su área y espere.

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