Londres

Imagina que tienes la oportunidad de visitar el Reino Unido, pero no puedes ir de excursión a Londres porque tienes que coger el vuelo de regreso a casa ese mismo día. ¿De verdad volverías a tu país sin haber visitado la capital del Reino Unido? ¡Estoy segura de que no!

¿Cómo no iba a visitar Londres? ¡Era lo que yo deseaba! Ver el Big Ben, la Torre de Londres, el Puente de la Torre, la Abadía de Westminster, el Palacio de Westminster, el Palacio de Buckingham, Trafalgar Square, el London Eye y demás. Así que mis dos amigos y yo nos dirigimos allí en tren.

¡Y ahí estaba! ¡Londres! ¡La ciudad de mis sueños! ¡Quería verlo todo!

Ir a Londres supuso algo así como un reto para mí, porque de alguna manera estaba sola. Solo éramos tres y teníamos 16 años. Nada de padres, supervisores, profesores, etc. que nos guiaran. Así que podríamos decir que estábamos solos en aquel país extranjero a kilómetros de Georgia. Supongo que en aquel momento nos dio igual. ¡Todo era nuestro y nosotros éramos los reyes! Si hubiese una película sobre nuestra excursión a Londres, la banda sonora sería "The World is Mine".

Llegamos a King's Cross. Es el lugar donde Harry Potter intenta llegar al andén 9 3/4 y atravesarlo para ir a Hogwarts. Nosotros buscamos ese andén por todas partes, pero, obviamente, tampoco pudimos encontrarlo.

Nuestro amigo nos estaba esperando allí para guiarnos por Londres. Debo decir que hizo un buen trabajo al llevarnos de turismo por la ciudad, porque la verdad es que allí es difícil ver muchas cosas en un solo día.

La primera parada fue Baker Street, lugar en el que se encuentran el Museo de Sherlock Holmes y el Madame Tussauds.

Creo que lo primero que vimos fue la Torre de Londres. La estaban restaurando y no se veían algunas partes, pero aún y así era increíble. Y cuando pensé en cuánta gente había muerto o había sido ejecutada allí, me pareció aterrador. He leído también las conocidas historias acerca de Ana Bolena, y de cómo el rey Enrique VIII hizo que la encarcelaran en la Torre de Londres y la ejecutaran.

Cuando estuvimos allí en 2010, el Puente de la Torre estaba pintado de color rojo, blanco y azul. Sé que durante la primavera del 2010 fue restaurado y devuelto a sus colores originales.

La Catedral de San Pablo es alucinante. ¡Es enorme! Quedé maravillada por su arquitectura y su belleza.

El cruzar el Puente del Milenio mientras recordaba las películas de zombis "28 días después" y "28 semanas después" fue imponente. El Támesis se veía tan tranquilo y grande que yo lo miraba casi paralizada.

Por supuesto, entre los lugares emblemáticos de Londres tenemos el edificio del Parlamento y el Big Ben. De noche son impresionantes, con la iluminación y todo eso.

El teatro Globe, el Palacio de Buckingham, el London Eye... No puedo ni contar los lugares a los que fuimos y el asombro con el que los observábamos. Fue uno de los mejores días de mi vida.

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