Porto Venere, una joya próxima a las Cinque Terre

Seguramente, las Cinque Terre sean un destino muy deseado por el turismo tradicional, pero ¿no existen otros pueblos tan pintorescos como estos en los alrededores? Pues bien, Porto Venere tiene mucho que ofrecer y yo, personalmente, la prefiero antes que a las Cinque Terre.

Territorio

Este pintoresco pueblecito de altas y coloridas casas se encuentra al final de un peñasco, entre La Spezia y el parque natural de las Cinque Terre, lo que lo convierte en una localidad muy tranquila y acogedora. Al igual que Monterosso, Vernazza, Manarola, Corniglia y Riomaggiore, Porto Venere, con sus islotes, es Patrimonio de la Unesco.

Historia

Los primeros años de asentamiento se remontan al siglo II d. C. Probablemente, su nombre, del latín Portus Veneris, se deba a la presencia de un templo del que posteriormente nació la iglesia de San Pedro.

Aparcamiento

Teniendo en cuenta la falta de espacio en los pueblos de la costa de Liguria, al llegar por La Spezia, aconsejo aparcar en via Olivo, y de ahí bajar calle abajo hasta el paseo marítimo con vistas al interior del pueblo.

Descripción del pueblo

Lo primero que notas nada más llegar es la muralla, que aún se mantiene intacta con la torre y la puerta, todo hecho de piedra.

Paseando desde el puerto, frente al pueblo, se pueden ver sus coloridas y altas casas, reforzadas en la base con muros de contención inclinados. Si echáis un vistazo al interior de alguna casa, os daréis cuenta de que las hicieron muy estrechas y de cualquier manera.

Al final del pueblo, hay una ermita perdida entre las rocas del peñasco: se trata de la ermita románica y gótica de San Pedro. Está muy concurrida, muchas parejas se casan allí por las espectaculares vistas al mar. De hecho, en la entrada de la ermita hay un pórtico de bellos arcos que enmarca la perspectiva al mar.

Además, tras el pueblo y la iglesia hay un conjunto de acantilados y grutas que el mar azota. Es un lugar tan estimulante para el romanticismo y la creatividad que el poeta inglés George Gordon Byron se refugiaba allí a menudo para componer su poesía.

En lo alto del pueblo, el robusto castillo Doria cierra el triángulo defensivo que forma junto a la muralla y la escollera. Se encuentra junto a la calle trasera de la parte rocosa que da al mar. Desde el bastión se puede ver Porto Venere desde las alturas.

Por último, pero no menos importante, os aconsejo que os perdáis, literalmente, entre las calles de este pueblecito: en cada rincón encontraréis panorámicas únicas para sacar fotos espectaculares sin necesidad de buscar monumentos en particular.

¿Qué decís? ¡Vamos para allá!

Y ya que estáis, ¿por qué nos os pasáis a ver uno de los lugares abandonados más bonitos del mundo? ¿Dónde? ¡En Génova! Leed el artículo para saber más.

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