Es la tercera vez que hago referencia a mi ciudad, Huelva, pero esque estoy tán loca por ella, que no puedo dejar de escribirle, sí como estoy enamorada, mi amor se llama Huelva.
Hoy os traigo uno de los lugares más emblemáticos de esta pequeña ciudad, y esque en un rincóncito de mi tierra, allá por la Revolución Industrial, los ingleses, que no son para nada tontos pusieron su punto de mira aquí, en un bello pueblo denomidado Río tinto , ¿y por qué el, por que no Lucena?, Fácil porque tiene un río cuyas aguas tienen un llamativo color rojo que se asemeja bastante al color del vino tinto, esto parece ser debido a la presencia de minerales como el cobre en sus aguas, además parece ser que sus aguas son bastente silimares a la minoritaria cantidad de agua que ha sido encontrada en Marte hasta el momento.
Bueno y los ingleses vinieron pero no sólo explotaron las minas, sino que trajeron sus tradiciones, su arquitectura... un trozito de su cultura, ¿por qué decimor que el Recreativo de Huelva es el decano del fútbol español?, claro, es que fue el pirmer equipo que existió en el país y esto si señores, no ocurrión ni en Sevilla, ni en Madrid, ni siquiera en Barcelona (con lo rapidísimos que son los catalanes), esto ocurrió en Río Tinto (Huelva), y este equipo cuyo precursor fue Dr. William Alexander Mackay, allá por 1889, y sí, como veís, la pequeña Huelva también tiene una historia, por cierto muy intensa e intersante, la cual les invito que conozcaís.
Además los inglesitos también nos dejaron ciertas expresiones, por ejemplo, la expresión "manguara", así le llamamos, en Huelva, como dice la sevillana del grupo onubense que acogió este mismo nombre "un buchito de aguardiente y un porquito de agua fresca" y es que cuentan las lenguas antiguas que claro, a los ingleses en ya en aquella época les llamaba la tención que en Huelva se bebiera tanto aguardiente (sobretodo por las mañanas y los hombres) y ellos empezaron a llamar "man water"(agua de hombres), los xoqueros, no sabían pronunciar bien esta palabra terminaron transformándola en lo que es ahora "manguara".
El barrio Reina Victoria, barrio Obrero o bien Barrio Inglés, también es conocido como el Barrio del Polvorín, debido a que en él se encuentra una iglesia de la cual sale todos los Miércoles santos una maravilla de hermandad, la hermandad de la Victoria, la mas bella de todas, os soy incondicionalmente Vitorina como decimos aquí, y hago distinción puesto el Miércoles Santo Huelva se divide entre La Virgen de la Victoria y la de la Esperanza...
Que bonita, que bonita esa época en la que todo el barrio inglés se vieste de gala para recibir a la señora, y esa fecha tan bonita en tantísimos rincones de andalucía no entontrarás nada más bello que ver derrochar elegancia a esa virgen de la Victoria saliendo del Polvorín, acompañada por supuesto de su incondicional cristo de la Himildad....
Esa estampa, esa estampa, que se aprecia desde abajo del arco, que cierra el precioso barrio Inglés, esos tejados a dos aguas con sus ventanas de colores , ¿y su gente?, gente humilde, trabajadora, con fé, con amor, con pétalos, con ganas, muchas ganas, reciben tanto al cristo como la virgen.
Y mirar arriba y ver detrás del arco esos colores, esos colores que yo llevo en lo más hondo de mi corazoncito, ese azul y ese blancom tan característico de mi ciudad y por supuesto los colores de nuestro único equipo. Volver a mirar hacia arriba y ya con las lágrimas saltadas ver al cristo venir derrochando su correspondiente belleza, al compás de las marchas tán increibles que existen y arropado de toda su gente, que con tanta fé y sentimientos que lo hacen todo aún más bello y esas saetas en el "mataero" a mi virgen bonita, esas "petalás" y esos vivas desde su salida de El Polvorin hasta su salida por el arco...
Que bella estampa, y no se puede contar de forma alguna como me siento solo de revivir esos momentos, en los que el cristo de la Humildad después de su gran penitencia se despide con los bailes de los costaleros más preparados y sentimentales que pueden existir y otra vez ahí su gente, su gente de ese barrio tan humilide, a la par de encantador lo despide.
¡Ya se respira inquietud!, ya la gente está llorando, ya huele a rosas de los pétalos que le están regalando,con su palio bailando y difuminando el cielo azul de esta ciudad con tanto arte se despide, hasta el año que viene, mi virgen, mi guía, hasta el año que viene mi virgen de la Victoria.
¡VIVA LA REINA DEL POLVORÍN, VIVA LA VIRGEN DE LA VICTORIA, VIVA LA MADRE DE DÍOS!
No sé, no me lo explico, que tiene esta ciudad, ¿Qué será?, que es capaz de pasar de ser la ciudad más pequeña y vacía del mundo a llenarse de sentimientos, arroparte en sus brazos, a empaparte de su cultura, enseñarte a amar sus costumbres y hacerlas tuyas propias, adorar esos aromas marineros fusionados de aire limpio y puro, necesitar de sus paisajes para iluminar el brillo de tus ojos, y adaptarte a su forma de vida, su tranquilidad y su folclore...
Sí, es que sí, lo digo y lo digo y lo vuelvo a decir, si esto ocurre jamás podrás desacerte de ella, HUELVA ENAMORA.