El mundo entero en Graz

No miento cuando digo que, cuando paseas por la calle o por los jardines y universidades puedes encontrarte con gente de muchos países distintos y descubrir culturas increíbles, diferentes mentalidades. Los austriacos también son simpáticos.

Cafeterías modernas y al día, mercados, restaurantes. Los precios son más baratos que en mi país, Jordania, y aún no puedo creerlo.

Estudiar en la Universidad de Graz es impresionante y, al mismo tiempo, difícil. Pero no me preguntéis como, puedo olvidarme de lo positivo a mi alrededor en cualquier lugar.

Cuando visites Graz no querrás marcharte o, simplemente, volverás en cuanto te marches. Yo volveré pronto.

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