Dónde quedarse en Ginebra: Auberge Communale Genève

Después de pasar seis meses en Ginebra, era la hora de hacer las maletas e irme seis meses de aventura Erasmus a Madrid. El caso es que puede que calculara mal la duración de mi estancia con respecto al alquiler, así que acabé teniendo que reservar en un hotel durante mis últimos días, no obstante, resultó ser algo positivo porque me permitió descubrir un tesoro escondido. El Auberge Communale de Carouge es un hotelito pintoresco que apenas aparece en internet, por lo que tuve mucha suerte y lo encontré al pasar por la puerta durante seis meses de camino a mi residencia en Carouge.

Este hotel es probablemente lo más parecido a sentirse como en casa. Está ubicado en el barrio italiano de Carouge, los dueños pusieron mucho empeño en crear la sensación de estar en casa en un hotel con 13 habitaciones decoradas de manera distinta. Lo que adoro de este hotel es que cada habitación tiene su particularidad y se ha decorado para reflejar el arte del distrito de Carouge. Entre ellas se encuentran la habitación Fashion, la habitación Diseño, la habitación Teatro, la habitación Escultura y la habitación Relojes.

Yo me quedé en dos de las habitaciones, en la habitación Escultura y en la habitación Relojes y sus peculiares decoraciones eran lo hacían que este hotel fuera un verdadero tesoro, ya que está claro que prestan mucha atención y ponen mucho cuidado en cada detalle. La habitación Escultura es más bien pequeñita con una cama y un armario de madera blanca, así como con una ventana que da a la Rue Ancienne. La habitación Relojes, por el contrario, es más espaciosa, industrial y de estilo más contemporáneos con un armario de metal y una ventana que da a la Rue Ancienne. Cada habitación tiene su propia calentadora de agua, bolsitas de té, una tele, un secador y Wi-Fi gratis.

El grupo de dueños italianos valoran la autenticidad y la tradición, y de hecho, llevan estos valores directamente desde Italia con su restaurante de alta calidad Vicolo 39. Es a través de su pasión por la comida que Vicolo 39 tiene una comida de alta calidad, sofisticada y que usa los mejores ingredientes locales y de origen italiano. Mi plato favorito era el risotto con setas calabaza, salchicha y queso scamorza. El plato estallaba con sabores sublimes y el añadido del queso scamorza hacía que este plato fuera una autentica exquisitez. El pulpo a la parrilla con salsa verde y puré de patata también está riquísimo y es una opción perfecta para una cena ligera. El restaurante también ofrece menú infantil, con porciones algo más pequeñas y menos complejas. La carta de postres no podría ser más tradicional, tienen tiramisú, panna cotta y babá napolitano de ron entre otras cosas.

El hotel es perfecto para tomar algo al solecito, sentado en la terraza exterior, en compañía del típico Aperol Spritz italiano o del Campari Spritz con una selección de fiambres italianos o la clásica tabla de quesos.

Galería de fotos