Visitando Annecey

Si te mudas a Ginebra, tendrás la necesidad de irte de escapada y aventurarte, ya que si no tus días acabarán siendo demasiado monótonos. Pero estás de suerte, ya que Ginebra está situada en el corazón de Europa, por lo que será mas fácil moverse. Ya sea para conocer el resto de Suiza, Francia, Italia o Alemania, definitivamente debes planear alguna escapada.

Mi amiga vino a visitarme un fin de semana, y después de pasar el día explorando Ginebra, decidimos salir de ahí y descubrir algo diferente. Había oído cosas muy buenas sobre Annecy, y unos amigos míos habían estado la semana anterior, y dijeron que era visita obligatoria. Así que miramos en BlaBlaCar, y encontramos precios bastante baratos para ir a Annecy (4 euros por cabeza), así que reservamos y fuimos a pasar el día. Tardamos aproximadamente hora y media, y llegamos allí a las 14:00.

Al entrar a la primera cafetería nos dimos cuenta de que nos habíamos quedado embobadas por su belleza. El lago Annecy está rodeado por verdes montañas, y un río cruza el pueblo dejando los edificios mas bonitos a uno de sus lados. La ciudad rebosa color, vida e historia.

Historia de Annecy:

Annecy tiene mucha historia debido a su localización, entre Ginebra e Italia. En el año 1 d. C. fue una colonia romana. Durante la Edad Media, perteneció al Sacro Imperio Romano Germánico. En el año 1400 comenzó a formar parte del territorio de Saboya, que reconstruyó la ciudad después de haber sido devastada por un incendio. En 1860 se convirtió en territorio francés gracias a un tratado firmado entre Napoleón III y Camillo Benso (conde de Cavour). Debido a su pasado histórico, la arquitectura de Annecy ahora tiene un toque medieval, lo que la convierte en una ciudad muy especial. Parece sacada de un cuento de hadas.

Qué visitar en Annecy:

Lago Annecy

Caminar alrededor del lago y sentarse en los jardines europeos son cosas que debéis hacer. Simplemente sentaos y admirad las espectaculares vistas. No os olvidéis de visitar el ayuntamiento, Hotel de Ville si estáis por allí. Es un edificio impresionante que fue construido en 1855. Si hace buen día podéis alquilar una bici para andar por el lago, o un hidropedal para navegar por éste.

Puente de los Amores

Fuimos a pasear por el lago y también por el puente de los Amores. El puente de los Amores es un puente muy conocido por la leyenda que dice, que si dos enamorados se besan en el puente, estarán juntos para siempre. Es un concepto bonito, pero el puente en sí ya es algo digno de ver, por sus vistas sobre el lago y las montañas.

Palais de L'Isle

Una de las primeras cosas que verás al entrar en el centro de Annecy es el Palais de l'Isle. Es uno de los edificios más antiguos de Annecy, construido en 1132. Ahora se ha convertido en un museo, pero este edificio ha servido como casa para el señor de Annecy, cárcel, juzgado, y la zona administrativa para los condes de Ginebra. Es un paisaje muy simbólico de Annecy, y merece la pena verlo.

Castillo de Annecy

La primera parada que hicimos fue para ver el famoso castillo de Annecy, en el que podrás disfrutar de unas magníficas vistas de la ciudad. A día de hoy, el castillo lo ha comprado la ciudad y lo ha convertido en museo, que alberga una exposición de arte, una de mobiliario y una sala de armas. Además, había una segunda exposición sobre la historia de la pesca y la vida acuática del lago Annecy, la cual me pareció bastante más interesante debido a su singularidad y a su interactividad.

Catedral de San Pedro

Mientras paseas hacia el centro, no puedes olvidarte de visitar la catedral de San Pedro, que fue construida en el siglo XVI. Solía ser un templo, pero se convirtió en iglesia católica romana en 1822. Es otro paisaje importante de Annecy que debéis visitar.

Un paseo por el río

Mientras volvíamos caminando hacia el centro, cruzamos los puentes del río y exploramos las callejuelas. Annecy también es conocida como la "Venecia de los Alpes", debido a sus similitudes con la única e irrepetible Venecia. Mientras vas caminando por la orilla, te rodean casas de color pastel y pequeñas cafeterías. De hecho, comenzamos a sentirnos hambrientas sobre las 16:00, y encontramos una crepería muy mona llamada Bar La Sapiniere, así que nos sentamos fuera (las mantas de pelo llamaron nuestra atención), y decidimos descansar mientras tomábamos una crepe. Yo me pedí el de plátano y miel, mientras que mi amiga decidió pedir un clásico, la de Nutella. Si buscáis un lugar en el que sentaros y contemplar las vistas, recomiendo este lugar, ya que el precio es más que razonable y las crepes estaban deliciosos.

Basílica de la Visitación

Después de la crepe pensamos que estaría bien seguir descubriendo sitios antes de tener que volver a Ginebra. Así que pusimos rumbo hacia la basílica de la Visitación. Es una impresionante iglesia construida entre finales de los 1800 y principios del 1900. Es una iglesia espectacular de estilo gótico.

Iglesia de San Francisco

Por otro lado, este es un edificio muy interesante, que fue construido en 1614, y durante la Revolución Francesa sirvió como barraca, y más tarde como taller. De todos modos, en el siglo XIX fue convertida en iglesia italiana.

Después de haber visitado todos estos preciosos monumentos y gemas arquitectónicas, sacamos algunas fotos y volvimos a la estación, donde cogeríamos nuestro autobús de vuelta a Ginebra. El autobús también es una manera rápida y eficiente de transporte si tenéis opción de usarlo, pero desafortunadamente no hay muchas opciones en Ginebra.

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Resumiendo, Annecy me impresionó mucho, a mí y a mucha gente que ha visitado la ciudad, así que si encontráis un día en el que podáis ir, os recomiendo encarecidamente ir y explorar esta bonita ciudad.

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