Primer día en Florencia

¡Muy buenas a todos! En este post os cuento mi primer día en la segunda ciudad que visité durante mi experiencia de un Interrail por Italia. En mi opinión, Florencia es una de las ciudades con más belleza y encanto no solo de Italia, ¡sino del mundo! La ciudad en sí es un museo al aire libre, ya que cada plaza, calle o rincón tiene muestras de arte a cada paso que das, ya sea esculturas, pinturas o monumentos, que hacen de Florencia un lugar lleno de cultura, historia y arte. 

Antes de conocer la ciudad, varios amigos nos contaron que existe una enfermedad llamada síndrome de Florencia, la cual produce vértigos, mareos o desmayos al ver tantas obras de arte expuestas en un mismo lugar. Bueno, creo que no me vi afectada por el síndrome, ¡pero por poco! ya que Florencia tiene tantísimo arte que es muy difícil no alucinar cuando la visitas. 

Siempre hablándoos desde mi experiencia, os cuento mi itinerario de dos días en Florencia, qué hicimos o visitamos, lugares para comer, consejos variados, etc. 

Para seguir mi estancia en la ciudad del arte, podéis leer aquí mi Segundo día en Florencia

Itinerario

Primer día

La primera parada de nuestro Interrail fue Roma, por lo que partimos en tren desde la Estación Roma Termini para llegar a nuestro próximo destino, Florencia. Esta ciudad tiene dos estaciones, por un lado se encuentra la de Florencia Santa María Novella, y por otro Florencia Campo di Marte.

Nuestro tren llegó a esta última, la cual quedaba más alejada de nuestro hotel, por lo que tuvimos que coger un bus para llegar a nuestro alojamiento, llamado Hotel Andrea. Situado en la plaza de la Independencia, y a tan solo 10 minutos andando del casco histórico, este hotel es una opción que recomiendo muchísimo a todos aquellos que estéis buscando dónde dormir en Florencia, ya que la calidad-precio es inmejorable. 

Una vez hecho el check-in y haber dejado las maletas en el hotel, eran las nueve cuando nos pusimos en marcha hacia el (sin lugar a dudas) punto más turístico de toda la ciudad: la Catedral de Santa María del Fiore, uno de los monumentos más impresionantes que he visto en toda mi vida.

La apertura de dicha catedral es a las diez de la mañana, así que nos pusimos a la cola mientras admirábamos el sinfín de detalles arquitectónicos de esta catedral. Aunque tienes que pagar una entrada por la subida al Campanile de Giotto o por la entrada al Baptisterio de San Giovanni, el acceso a la catedral es completamente gratuito. 

Tras salir de la catedral, seguimos andando por las calles de Florencia hasta llegar al Palacio Tornabuoni y al Palacio Strozzi para admirar sus fachadas, después continuamos hasta la Plaza de la República, una de las más importantes de la ciudad. Acto seguido, fuimos a probar suerte a otro atractivo turístico de la ciudad: la Fuente del Porcelino, donde encontrarás a cientos de turistas frotando el hocico de la escultura del jabalí y echando monedas dentro de la boca del animal, para atraer la buena suerte y asegurar el regreso a Florencia.

A continuación, visitamos la Plaza de la Señoría, para mí la más bonita de Florencia, donde puedes encontrar el Palacio Vecchio, la Loggia della Signoria (un pequeño museo al aire libre) o la fuente de Neptuno.

Una vez cruzada esta plaza, nos dirigimos hacia la basílica de la Santa Cruz, en mi opinión una imitación en miniatura de la Catedral de Santa María del Fiore, pero con muchísimo encanto, tanto por fuera como por dentro. Tras descansar un poco en las escaleras situadas a los pies de esta basílica, almorzamos y volvimos al hotel para resguardarnos de las horas de más calor.

Sobre las cinco de la tarde, retomamos la ruta dando una vuelta por el centro de la ciudad, viendo el exterior de la Galería de los Uffici, merendando el típico helado italiano reglamentario si vienes a este país, y cruzando algunos de los puentes sobre el río Arno, como el famoso Ponte Vecchio o el Ponte alle Grazie. 

Justo al lado de otro de los puentes florentinos, en concreto el Ponte alla Carraia, se situaba la parada de bus que nos llevaría hasta nuestro último destino del día: la Piazzale Michelangelo, un mirador desde donde podrás disfrutar de las mejores vistas de Florencia. Nosotros cogimos el bus número 12 desde la parada Pescaia Di Santa Rosa, que te lleva directamente hasta este mirador. Os recomiendo acabar el día en este sitio y venir a ver uno de los que podréis ver en Florencia, ¡sin duda os encantará!

Tras ponerse el sol, cogimos el bus de vuelta y volvimos al hotel para reponer fuerzas para nuestro segundo día en Florencia, el cual os cuento en el siguiente post. ¡Gracias a todos!

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