Descubriendo Edimburgo

Existe un país al norte de Europa donde nunca para de llover, el viento es húmedo y el sol se hace de rogar. Yo que amo el sol, siempre me he preguntado cómo hace la gente para vivir en semejantes condiciones climáticas. Así armado de curiosidad preparé mis maletas y me lancé a la aventura. Han pasado tres meses y puedo decir que sigo vivo y orgulloso de haber descubierto este paisaje tan sublime y estilo de vida único. El clima temperamental no tiene nada que ver en absoluto con los lugareños, gente amable y acogedora que siempre me ha ofrecido sus brazos abiertos.

Después de haber vivido todo esto, me gustaría compartir con vosotros lo que sería un fin de semana perfecto en la capital de Escocia: Edimburgo.

Cuándo venir y cómo

El verano es sin lugar a dudas la estación más agradable. Por eso os aconsejo de venir en julio y agosto. En cuanto al alojamiento, podéis optar por un AirBnB en el centro de la ciudad. El casco viejo es el mejor lugar donde alojarse, de esta manera no tendréis que depender de los transportes públicos para disfrutar de vuestra estancia.

Una vez hayáis llegado al aeropuerto de Edimburgo, la mejor manera para ir al centro de la ciudad es utilizar el tranvía. Cuesta 7 libras, pero es un precio razonable en comparación con el resto de transporte en Escocia.

Lugares para visitar los días de lluvia

• Camera Obscura

"Camera Obscura" es una atracción turística muy popular de Edimburgo. Se trata de una experiencia durante la cual te enfrentarás a todo tipo de ilusiones ópticas. Es una mezcla ingeniosa en la que "la tecnología del siglo XXI se alía con las ilusiones clásicas y la ciencia histórica". A pesar de que el precio de entrada sea algo caro (se aproxima a las 15 libras), merece verdaderamente la pena. La experiencia fue hilarante, estimulante y sobre todo intrigante. Puedo decir que salí más que satisfecho.

• Museo Nacional de Escocia

Este museo es la visita más cultural que os propongo. Me parece una visita desde luego interesante. El museo es una fusión entre el museo real y el museo nacional de Escocia, por lo que aprenderéis sobe la historia del pueblo escocés, su cultura y su reino. ¡Y la entrada es gratuita!

• Princess Street

Princess Street es la avenida principal de Edimburgo. Por un lado encontraréis el Princess Street Garden, un parque de más de 120 000 m2, césped bien fresco para dar y regalar, centenas de árboles (algunos centenarios) e, incluso, pequeñas ardillas adorables. Hay para todos los gustos. Tampoco hay nada mejor que salir un poco de compras los días más lluviosos.

Lugares para visitar los días de mejor tiempo

• Arthur's Seat

Arthur's Seat es una colina situada en el centro de Holyrood Park. La leyenda local dice que en la Edad Media el rey Arturo tenía la costumbre de venir a lo alto de esta colina de 251 metros de altitud para ver mejor si llegaba algún enemigo.

Algunas páginas web estiman que se tarda 45 minutos en llegar a la cumbre, pero no es verdad. Con 20 minutos será suficiente para llegar a ver Edimburgo desde arriba. ¡Es un buen lugar para los amantes de la fotografía! Os aseguro que es un "seat" encantador.

• Edinburgh Castle

El castillo de Edimburgo es un lugar que uno no puede perderse. Es como ir a Paris y no visitar o ni siquiera ver la Torre Eiffel.

Tras pasar el primer arco del castillo, os encontraréis en medio de un verdadero paisaje de película: un viaje al pasado al tiempo de los caballeros e hidalgos. Además las vistas que ofrece desde arriba son para dejar sin aliento. También se puede visitar la prisión y la cámara real, admirar la colección de coronas y joyas, visitar el Museo del Ejercito de Escocia desde la Edad Media hasta la actualidad e, incluso, tocar los cañones de aquella época. La entrada vale bastante: 30 libras por persona.

• De paseo con las alpacas

¿Os gustan los paseos y amáis los animales? ¡Entonces no tenéis más que ir a la granja "Bob & Cat"! Venid a disfrutar de una experiencia fuera de lo común a tan solo diez kilómetros del centro de la ciudad. Adentraros durante dos horas en las montañas escocesas mientras lleváis una alpaca con vosotros. Pero estar al tanto, porque si de verdad queréis ir, ¡no dudéis y reservad cuanto antes! Este paseo es muy conocido entre los turistas, por lo que a menudos están completos durante meses. Yo mismo fui víctima del éxito de las alpacas y, por desgracia, no tuve la oportunidad de ir de paseo con ellas. ¡Es de lo que más me arrepiento de mi estancia en Edimburgo! No cometáis el mismo error que yo y lanzaros a la aventura para compartir el camino con estas adorables bolas de lana.

• Victoria Street

Victoria Street es una calle encantadora situada en el corazón de Edimburgo. Su fama la debe al color de sus edificios: uno rojo, otro verde, otro azul... Los colores se suceden los unos a los otros para formar un gran arcoíris. Además la calle es también conocida por sus tiendas dedicadas a la gloria de la saga de Harry Potter. ¡Es el paraíso de cualquier fan! Encontraréis capas, varitas, bufandas y jerséis. ¡Una verdadera mina de oro!

Dónde saciar el apetito

Comer en Edimburgo es una misión un tanto complicada. ¡Los escoceses comen muy pronto! Si queréis comer más tarde de las 22 os deseo buena suerte porque no encontraréis nada. Por otro lado, si sois amantes de la buena comida os pido que seáis un poco tolerantes. No obstante puedo decir que después de haber vivido tres meses conozco algunos lugares interesantes. Allá van:

Para los que tienen prisa, os recomiendo comer una pizza. "Civerinos Slice" es una pizzería que se da un poco de aires y tira a hípster situada en Forrest Road. Las pizzas están de rechupete.

Para los amantes del marisco, os recomiendo "Fish In the City". La comida está muy buena y cuentan con una buena carta de vinos y buenas raciones. Los precios son relativamente correctos, preved entre 30 y 35 libras por persona.

Por último, si lo que buscáis es una velada romántica, no hay nada mejor que un restaurante italiano. "Divino" es una buena opción. Se encuentra justo debajo de un puente y es más bien discreto. El interior del restaurante no está muy iluminado. De hecho, si vais, comeréis a la luz de una vela y compartiréis un momento romántico con buena pasta y la persona que amáis. Es una cocina refinada y de calidad. En cuanto al precio, es también razonable al oscilar una treintena de libras por persona.

¿Por dónde salir?

Os propongo empezar la noche bebiendo algunas cervezas en el "Oz Bar" en Candlemaker Row. El ambiente es acogedor y cuenta con dos billares. Es el momento ideal para piques entre amigos mientras bebéis buena cerveza.

Hacia las 22 h, podéis empezar yendo a un bar un poco más marchoso. En el "Finnegan" en Vitoria street podréis quemar la pista al son de una orquesta. El ambiente es buenísimo y muy jovial.

Por último no tenéis más que ir a una discoteca para acabar la noche.

Entre las opciones disponibles contáis con "Le Hive" una discoteca conocida por ser para todo el mundo y muy solicitada entre la juventud gracias a sus precios económicos. El tipo de música es tirando a comercial.

Si no también podéis decantaros por el "Why Not", una discoteca con más clase, un techo bajo con luces de neón y una gran pista de baile con un patio exterior para los fumadores. El precio por copa ronda los 10 euros y la entrada no es gratuita. No obstante esta discoteca merece la pena.

El Edinburgh Fringe

El festival Edinburgh Fringe, también llamado "The Fringe", se celebra cada agosto en Edimburgo. ¡Es el festival artístico más grande del mundo! Cada año atrae a más de un millón de visitantes y artistas del mundo entero.

Se trata de un gran punto de encuentro entre espectáculos de todos los tipos y colores: desde el teatro al baile, pasando por el canto y la comedia. ¡Hay para todos los gustos! Por esta época del año las calles se abarrotan y empiezan a abundar los espectáculos errantes. Paseaos o, quizás debiese decir, intentad hacer un camino entre los monociclos, músicos, escultores de globos y malabaristas. Dejad que os imbuya el espíritu del Fringe, un festival que llena de calor las calles de Edimburgo y mantiene los bares abiertos hasta pasadas las 5 de la madrugada.

Edimburgo es una buena ciudad, rica en cultura, patrimonio e historia, pero sobre todo con muy buena gente. Os deseo a todos visitar algún día Edimburgo.