10 lugares que no te puedes perder de Croacia II

¡Hola a tod@s!

Hoy os traigo la segunda parte de los 10 lugares que uno no se puede perder si visita Croacia. Probablemente os suenen más los lugares de este post pues es donde incluyo algunos de los más turísticos y conocidos. He de decir que es mi parte favorita, creo que os gustará.

Split

Split es probablemente, junto con Dubrovnik por supuesto, la ciudad más famosa de Croacia. Famosa por su vida nocturna, por su pasado romano y su puerto marítimo.

Además, es una ciudad muy bien conectada con los puntos de mayor interés turísticos de Dalmacia. De hecho se encuentra a solo media hora de Trogir y a una hora de Sibenik.

En mi visita a Split pensaba que quizás un día no sería suficiente para ver bien toda la ciudad, pero para nada. Se puede ver perfectamente en un día, ¡incluso en un tarde diría!

En primer lugar os hablaré, como no podía ser de otra manera, del Palacio de Diocleciano.

Es al menos para mí, el lugar más especial de la ciudad. No solo por la belleza del lugar, que más que un palacio parece una especie de fortaleza, sino en general por el encanto del lugar.

Por el día está bastante lleno de gente como se puede apreciar en la foto, pero por la noche el ambiente cambia totalmente. Hay un bar en la plaza del palacio y en las escaleras de este ponen varios cojines donde la gente se sienta a tomar algo. Es muy frecuente que justo allí se realice algún tipo de espectáculo, a mi me coincidió esa noche ver un concierto de un chico a la guitarra y otro cantando. Eso sumado al lugar, el ambiente, la increíble acústica de la plaza y la iluminación… Ya os podéis imaginar.

Se puede acceder también a una especie de sótano a través de unas escaleras, donde hay un mercado con tiendas de suvenires y de productos típicos.

Como dato, esta es otra de las localizaciones donde se rodó Juego de Tronos, como veis gran parte de las ciudades croatas han servido de escenario para la famosa serie.

El palacio es accesible desde cuatro puertas distintas que se conservan como entradas al casco histórico. La puerta principal se llama puerta de oro, las demás reciben el nombre de puerta de plata, bronce y hierro respectivamente.  Desconozco la razón por la que son llamadas así, en realidad son todas hechas en piedra.

En el palacio se conserva todavía el famoso Templo de Júpiter.

No podéis perderos tampoco la catedral de San Duje y su torre desde las que se puede disfrutar de unas vistas inigualables de la ciudad. Hay pagar 6€ para acceder a la catedral y torre.

Otra de las visitas imprescindibles de la ciudad es pasear por su paseo marítimo. En esta zona es muy común encontrar a gente ofreciendo excursiones en barco a las famosísimas islas de Hvar, Brac o Vis. Si lo tuyo es lo de regatear no te costará conseguir rebajarles el precio. Nosotros hicimos la prueba y nos rebajaron muchísimo el precio de una excursión al decirles que otra compañía nos había ofrecido un precio mejor.

También recomiendo visitar el mirador de la colina Marjan. Hay que caminar bastante y la cuesta es un poco durilla pero vale le pena. Además de las buenas vistas hay algunos atractivos históricos que visitar por la zona y un par de bares donde tomar algo disfrutando del paisaje.

Otro lugar muy conocido es la Plaza de la República, que recuerda un poco a la Plaza San Marco en Venecia.  Aquí se celebran varios espectáculos al aire libre, el más conocido: el Festival de Split, a principios de julio.

Otras de las cosas que se pueden hacer en Split es visitar la calle “déjame pasar”, una calle súper estrecha muy curiosa.

Omis

Ahora voy a hablaros de una de mis ciudades favoritas de Croacia. Se localiza en la desembocadura del río Cetina  y esto es lo que hace esta pequeña ciudad tan especial.

Se forma un cañón en el que se pueden realizar actividades al aire libre como rafting, kayak, piragüismo, escalada, barranquismo, parapente… De hecho la ciudad es famosa por la práctica de estos deportes de aventura y el turismo activo, en el centro hay prácticamente una agencia ofertando estas actividades en cada esquina.

Además de pasear por su encantador caso histórico y relajarse en la conocida playa de Omis, para admirar la belleza de esta pequeña ciudad es necesario subir a alguna de sus fortalezas.

Nosotros pretendíamos subir a la más alta de todas, la fortaleza Starigrad, que se encuentra en lo más alto de la colina sobre Omis y en el pasado sirvió como puesto de vigilancia para localizar a los piratas que se querían acercar a la ciudad y así impedir su entrada. Es por esto que a Omis se le conoce como la ciudad Pirata.

Sin embargo, no subimos hasta esta fortaleza sino a la fortaleza de Mirabela que se encuentra a solo unos 200 metros de altitud. Fue una pena ya que las vistas desde la de Starigrad son inigualables, pero viajábamos todos lo Erasmus, hacía bastante calor y muchos estaban cansados de todo el viaje que llevábamos haciendo desde hacía unos días.

Aún así, la fortaleza Mirabela es preciosa también, al igual que sus vistas. El precio por subir es de unos 2€ por persona si no recuerdo mal. Desde aquí se puede ver toda la ciudad, el río, su cañón, el mar… ¡No tiene precio!

Makarska

Mi vista a Makarska fue un poco improvisada y bastante breve. Aún así pude disfrutar de su casco histórico y su puerto.

Pero esto no es lo único interesante de la ciudad: Makarska es famosa por sus increíbles playas como la playa de Buba o la de Nugal frecuentada por nudistas. También es conocida por su ambiente nocturno y la cantidad de actividades que ofrece como senderismo, bicicleta de montaña o windsurf.

No os podéis perder su monasterio franciscano y el jardín botánico de Biokovo.

Ston

Otro de mis lugares favoritos (aunque es cierto que los 10 lugares que pongo en este post me parecen increíbles).

Lo curioso es que Ston no es de las ciudades más conocidas de Croacia, y por lo general los turistas lo tienen más como un lugar de paso que como una parada indispensable del viaje. Por mi experiencia os recomiendo visitarlo sin ninguna duda, es diferente al resto de sitios que visitaréis por el país.

Ston se encuentra a unos 60 km de Dubrovnik y unos 100 km de Makarska. Es conocido por su muralla de más de 5 kilómetros. Actualmente se pueden recorrer unos 3 kilómetros de esta (el resto se encuentra en construcción, así que quizás en unos años se pueda recorrer entera) pagando una entrada de 40 kunas, es decir, unos 5-6€.

Esta muralla se construyó con la función de proteger su gran producción de sal. Se la conoce como la “muralla china europea”, incluso se le considera la segunda más grande del mundo.

He de decir que subir por la muralla no es sencillo y menos si lo hacéis con el calor que hace en temporada alta, pero una vez pasado los tramos más duros de fuertes pendientes, contemplaréis las vistas y se os pasará.

Ston es conocido también por sus famosas ostras. Hay multitud de restaurantes por el centro histórico donde degustarlas y a buen precio. En marzo se celebra aquí el festival gastronómico llamado “El Día de la Ostra”.

Dubrovnik, La Perla del Adriático

No podía faltar en esta lista la ciudad más visitada de Croacia y que ha sido declarada Patrimonio de Humanidad por la UNESCO. Se le conoce como “la perla del Adriático”.

Su extraordinario casco antiguo rodeado de murallas defensivas es una de esas cosas difíciles de olvidar. No es de extrañar tampoco, que esta ciudad haya tenido un papel protagonista en la exitosa serie Juego de Tronos pues se han rodado aquí las secuencias claves de “Desembarco del Rey”, concretamente en el fuerte de Lovrjenac, las murallas que dan al mar y el arboreto de Trsteno.

En primer lugar, un poco de historia. En 1991 la ciudad sufrió varios ataques del ejército serbio que dejaron la ciudad prácticamente en ruinas, por eso la mayoría de los edificios históricos son reconstrucciones.

Sin embargo, paseando por la ciudad no se tiene en absoluto la impresión de estar en una ciudad nueva o reconstruida, sino todo lo contrario. En general todas las reconstrucciones que se llevaron a cabo en Croacia tras los destrozos en la guerra de Yugoslavia son alucinantes, apenas te das cuenta si no conoces la historia.

Dudamos en entrar a las murallas para ver la ciudad desde otra perspectiva ya que la entrada para acceder era de unos 18€, pero al final decidimos que valía la pena y que debíamos aprovechar la oportunidad. Nuestra sorpresa es que si tienes el carnet joven europeo o bien como en nuestro caso, una tarjeta universitaria croata, el precio quedaba en 10€.

Sin duda, fueron unos 10€ bien invertidos pues obtuvimos unas perspectivas de la ciudad muy diferentes. Si eres fan de Juego de Tronos la subida a la muralla es obligada, y si no también, porque las vistas son alucianantes.

El recorrido es de casi 2 km, y no se hace duro hasta que hay que subir al Fuerte Revelin que no se encuentra anexo a las murallas. Pero igualmente, os animo a acabar allí el recorrido por muy cansados que estéis ya que disfrutaréis de unas vistas como las de esta foto. No hay mejor forma de decirle adiós a la ciudad.

¡Esto ha sido todo por hoy! Espero una vez más que os haya gustado y gracias a todos por leerme.

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