Copacabana

Lago Titicaca y las islas del sol y la luna.

Había platicado un poco del lago Titicaca en la publicación anterior, considerado como maravilla natural del altiplano y el lago más alto del mundo, se comparte entre el país de Bolivia y Perú, y cuenta con paisajes increíbles para visitar, y entre la historia se cree que en este lago nacieron Manco Cápac y Mama Ocllo, los fundadores del Imperio Inca.

Algo que ver en este majestuoso lago, son las islas flotantes de los Uros, que son conocidas por estar construidas a base de tortora, un junco que crece bajo las aguas del lago, el conjunto de islas suma un estimado de cuarenta, donde se puede encontrar iglesias, colegios, casas, toda una comunidad.

El lago tiene lo que se cree una profundad de casi trescientos metros, y tiene una amplia variedad de aves, peces oriundos del lugar, y otros tantos anfibios entre los cuales se encuentra una rana gigante que puede pesar hasta tres kilogramos.

Isla de Taquile.

Esta es una de las islas más habitadas y populares del lago, sus habitantes organizan todo lo relacionado con el turismo, su principal fuente de ingreso, acogen a los visitantes en sus propias casas y procuran preservar sus milenarias costumbres incas, en la isla se pueden apreciar ruinas incas y sus pobladores, organizan paseos y excursiones para darlas a conocer.

Su población es de aproximadamente dos mil personas, con fuertes arraigos culturales y una actitud muy acogedora a todos los visitantes, para llegar se debe tomar una lancha desde el puerto de Puno, y se demora casi dos horas, hay que llegar al puerto a muy temprana hora para conseguir buenos descuentos y que no te quedes sin ver esta isla, ya que las lanchas solo salen por la mañana.

Como nota, no olviden traer bloqueador solar, un gorro y agua para no sufrir el trayecto por el camino empedrado.

Isla del Sol.

Ya pasando al lado boliviano, se encuentra otra Isla que no puede dejar pasarse por alto, esta a una hora y media en bote desde Copacabana y se llama la Isla del Sol, igual que la isla anterior, hay que procurar ir temprano porque si no mal recuerdo el último bote sale a las dos de la tarde y únicamente si hay mucha gente que vaya. Había comentado en la publicación anterior, que yo me hice amigo de un grupo de chilenas, con las que aproveche para ir consiguiendo descuento en los viajes, por fortuna al llegar al puerto de Copacabana, logramos encontrar un bote que nos pudiera llevar a la isla del Sol, y ya en el bote conocimos a un “joven” de Polonia o República Checa no recuerdo bien, que ya llevaba un tiempo recorriendo Sudamérica y fue gracias a él que no pasé la noche desamparado en la isla.

Voy a explicar un poquito más la situación, yo no tenía idea de que existía la Isla del Sol, y que además se podía acampar en ella, mis nuevas amigas chilenas parece que si tenían una idea al respecto pero no estaban demasiado preparadas porque a su casa de campaña le faltaba el plástico superior para cubrirla de la lluvia, la cosa es que ellas nunca me informaron del todo y yo iba muy confiado en que iba a poder acampar con ellas, al momento de que llegamos a la isla, se arrepintieron de la idea de acampar y comenzamos a buscar hospedaje, el problema es que ya era tarde al momento de que llegamos y pues si de por sí no ha muchos lugares para hospedarse, en ese momento eran aún menos, recorrimos por varios puntos de la isla hasta que al final encontramos un lugar pero no tenían suficientes lugares, para no hacer el cuento más largo, nuestro nuevo amigo polaco o checo, me ofreció alojarme en su casa de campaña. La historia desafortunadamente no termina ahí, y menos acaba en una historia feliz, pues como yo no iba preparado para visitar la isla, no tenía ni más remota idea de las temperaturas del lugar, y es que resulta que en las noches es frecuente que llueva en el lugar y la temperatura baje por ahí de los cero grados, ¿Alguna vez han acampado con frío y bajo una rotunda tormenta? Pues a quien lo haya hecho sabe que no es una experiencia muy agradable, el suelo de la tienda de campaña se enfría, humedece y te genera una sensación de incomodidad muy grande, si a eso le sumamos el hecho de que hace mucho frío, la situación empeora considerablemente. 

Al final no pude dormir casi nada, pero, aun así, antes de la mala experiencia, se organizó una fogatada con varias de las personas que también se encontraban acampando en el lugar, las vistas son impresionantes y la gente que va muy agradable, así que si al contrario de mí, van preparados, puedo asegurarles un viaje inmemorable.

La isla del Sol era un santuario con un templo con vírgenes dedicados al dios Sol, en la actualidad es una isla poblada por indígenas de origen quechua y aymara. donde puedes realizar diversos recorridos para conocer el templo de Pilocaina, las escalinatas del Inca, Chincana, o se puede observar la Ciudad Sumergida.

Me gustaría poder darles una opinión personal de esos lugares, pero como lo comentaba en un inicio, yo no tenía ni idea de que hacia por esos lugares, digamos que termine ahí por coincidencia y me dediqué únicamente a disfrutar de mi entorno y no preocuparme de que tenía que visitar o conocer.

La isla tiene muchas bellas vistas que ofrecer, y como muestra las siguientes fotografías:

Una de las ventajas de encontrarte en un lugar alejado de las poblaciones y la contaminación visual, esque las noches son más estrelladas y los atardeceres se perciben mejor, no cabe duda que la naturaleza es realemnte sorprendete y hay que saberla apreciar. En la fotografía se ven algunas de las casas de campaña de los turistas y si se observa con atención, en la parte alta de la montaña, se aprecia un grupo de casas que son usadas como centros de acampado, te ofrecen instalaciones como baños, regaderas y agua caliente, por un precio de no recuerdo cuanto.

Un claro y puro cielo azul llenaba de dramatismo las vistas, en la fotografía se pueden ver algunas de las casas de campañas de los turistas.

Otra foto más de casas de campaña, el colocar tu casa de campaña o carpa como le dicen en algunos paises, no tiene costo adicional y es una actividad bastante recurrente por lo que se puede apreciar en la fotografía.

Esta fotografía la tomé mientras ibamos en el barco con rumbo a la Isla del Sol, me extrañó la forma en la que parece que estan tallados los cerros, me recordabó a las topografías de las maquetas que he visto en mi profesión de arquitectura.

Les dejo una foto para que entiendan de lo que les estoy hablando.

Un día más en tierra.

Finalmente pasó la noche, y al siguiente día teníamos que tomar el bote como a eso de las diez de la tarde para poder ir con tiempo a Copacabana y tomar el autobús a mi siguiente destino (La Paz), y porque como muchos de los viajeros se quieren regresar al mismo tiempo, hay que apartar espacio y no quedarte esperando demasiado tiempo o en el peor de los casos, quedandote sin medio para moverte por ese día.

Ya en Copacabana preguntamos en diferentes lugares por los precios del autobús a La Paz, como lo había mencionado tomé ventaja del hecho que eramos un grupo grande (habíamos conocido una pareja de italianos en el bote de regreso y los integramos a nuestro grupo de viaje) y pudimos negociar un descuento mínimo en el autobús y que este nos dejara justo en la terminal principal (luego te dejan en las afueras de la ciudad y de ahí tienes que encontrar tu la manera de moverte al centro de la ciudad o de donde se encuentra tu hospedaje. 

Nos subimos al autobús y recorrimos por un largo perido con dirección a la capital del país de Bolivia...

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