Un domingo en Berlín (Mauerpark)

¡Hola de nuevo a todos!

Ayer domingo, día de rememorar cosas y ver fotografías, me topé con las que hice este verano en un viaje a Alemania. Concretamente, su capital, Berlín.
Como ya veis en el título pone qué hacer un domingo en esa ciudad. Y es que Berlín te puede ofrecer mucho pero este plan de domingo es genial. Se trata de Mauerpark.
Viajé a Berlín con una amiga y llegamos un domingo sobre las 16:00 horas. Entre que encontramos el hostal, dejamos las maletas, etcétera, el día ya se había casi ido. No sabíamos qué hacer y le pregunté a mi hermano que ya había estado. Por casualidad nos dijo que había un parque, no recordaba el nombre, que algún día hacían una especie de karaoke... Pero que tampoco recordaba el día ni nada. Pero, ¡BINGO! Nos pusimos a buscar por internet y nos aparecían mensajes del estilo: SUNDAY KARAOKE AT MAUERPARK.
Estaba lloviznando y entre que no estaba muy cerca de nuestro hotel, aún no estaba lo suficiente orientada, y a esas horas quizás ya era tarde para encontrar algo, a mí no me parecía del todo bien arriesgarnos. Pero mi amiga insistió y...¡Qué suerte que finalmente fuimos!
Berlín nos recibió con un karaoke al aire libre y con mi canción favorita: Wonderwall.
Os voy a explicar un poquito más. En Mauerpark (parque del muro) cada domingo hay un mercadillo donde podéis encontrar cosas únicas (ropa, decoración, souvenirs, etc.) durante el día. Nosotras llegamos a las 18:00 horas aproximadamente y ya estaban recogiendo. Intentamos comprar un par de cosas pero nos decían que ya estaban recogiendo y que para la próxima (super estrictos con el horario... Aún tenían las cosas expuestas, no les hubiese costado nada, pero bueno...). Así que nosotras no vimos mucho de este mercadillo pero tanto los locales como los guías turísticos que tuvimos lo recomendaban muchísimo. Justo a la entrada también hay un bar (algo carillo) y hay espacio suficiente para hacer picknick, así que puede ser el plan perfecto para pasar el domingo entero al aire libre.
Y aquí llega la parte donde disfruté como una enana. Me atrevería a decir que fue la experiencia más bonita o que más en mi lugar me hizo sentir mientras he estado de viaje. Continuamos caminando y escuchamos como se oía de lejos Wonderwall. Así que como ya sabíamos lo del 'Karaoke' nos dirigimos hacia allí. Y alucinamos.
Había como unas 200 personas sentadas, disfrutando de la música, cantando y bailando en una especie de bancos-escalera (parecido a un amfiteatro) y la persona que cantaba. Era un macro karaoke. Podía salir a cantar quien quisiera, la canción que quisiera, y la gente podía unirse al 'escenario' a bailar.
Me alucinó tanto porque la gente hacía lo que realmente sentía, sin importar el qué dirán. Me dió muchísima sensación de libertad. Y con lo que me gusta a mí la música y cantar... De verdad, una experiencia inolvidable. Y lo mejor de todo es que no cuesta nada unirse al espectáculo. Aunque sí puedes gastarte dos euros en botellas de cerveza de medio litro, para acompañar la ocasión, eso nunca viene mal.
Por último, al salir o al entrar del parque hay como una exposición del muro de Berlín, ya que como he dicho el nombre del parque significa eso y pasaba por allí. Con vídeos, fotografías y escritos... Muy interesante.

Os escribo pronto sobre más de esta preciosa ciudad.
¡Adiós!