Buscar alojamiento para el Erasmus

Buscar alojamiento para tu estancia Erasmus

Habla con los de tu entorno

Para encontrar un alojamiento antes de ir de Erasmus, lo mejor es hablar con la gente de tu entorno. Seguro que tienes amigos o conocidos que saben de alguien que vive o ha vivido en tu ciudad de destino.

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Pide ayuda a tu universidad de acogida o a tu universidad de origen

Algunas universidades ofrecen una ayuda financiera o un programa de esos de "todo incluido" para los estudiantes de intercambio. Infórmate bien.

Algunas universidades de acogida, a la hora de asignar las residencias y los pisos compartidos que ofrecen, dan prioridad a los estudiantes que vienen de intercambio.

Puede que tu universidad de origen sepa los nombres de otros estudiantes que han ido de Erasmus a la misma ciudad que tú y te puede pasar sus datos para que te pongas en contacto con ellos y les preguntes sobre dónde se quedaron durante su estancia.

Busca en Internet y en grupos de Facebook

Los jóvenes se pasan la vida en Internet y en Facebook, por lo que puedes encontrar muchos anuncios online.

Algunos particulares publican ofertas y muchos estudiantes buscan compañeros de piso.

Haz tus búsquedas en el idioma del país en el que vayas a pasar el Erasmus para que tengas el máximo de oportunidades posibles de encontrar alojamiento.

Pide que te añadan a grupos de WhatsApp

La gente cada vez usa más la aplicación WhatsApp. Las organizaciones de acogida de estudiantes Erasmus han creado muchos grupos Erasmus. Además, hay muchos estudiantes, que están en la misma situación que tú, y que buscan un sitio en el que vivir durante 6 meses o un año.

Contratos de 6 meses o un año

No tienes que preocuparte por si la duración de tu estancia te impide encontrar alojamiento. Siempre hay alguna manera de llegara un acuerdo con los propietarios, si les explicas tu situación. Están acostumbrados a ver casos como el tuyo. Y, si no funciona, siempre puedes buscar a a otro estudiante de intercambio que complete la otra parte del contrato.

Sé tú el que busque a los compañeros de piso

Si eres ambicioso, puedes ser tú el que alquile un apartamento o una casa con varias habitaciones y ponerte a buscar estudiantes para que compartan el alquiler contigo.

Vivir con locales o con estudiantes Erasmus

Tienes que pensarlo con antelación. ¿Quieres vivir toda tu estancia con locales para conocer mejor la ciudad y practicar el idioma? O, ¿prefieres pasar tiempo con otros estudiantes Erasmus con los que ir descubriendo todo y que sean tan curiosos como tú?

Ambas opciones tienen ventajas y desventajas. ¡Buena suerte en tu elección!

Aspectos que tener en cuenta sobre la convivencia

Compartir piso es muy distinto a vivir en tu casa: cada uno tiene que cumplir con sus tareas, respetar a los demás, etc. Prepárate para no estar satisfecho nunca (uno no ha limpiado esto, a otro se le ha olvidado hacer aquello, etc. ). Pero, sé indulgente (seguro que hay cosas que tú tampoco haces a la perfección).

La convivencia tiene sus más y sus menos. A veces, tus compañeros de piso te molestarán y, otras veces, te lo pasarás muy bien con ellos. Pero no lo puedes predecir.

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Debes estar listo para largarte

Si la situación se vuelve insostenible, no te compliques la vida y no te cierres la puerta a vivir una buena experiencia en otro sitio.

De todas formas, si no te sientes a gusto, irte a otro sitio solo puede mejorar las cosas.

Elegir la ubicación

Seguro que te lo preguntarás mil veces: ¿una habitación cerca del campus para levantarte más tarde o en la zona del centro para salir de fiesta todas las noches?

Una vez más, cada situación tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Eres tú el que tiene que reflexionar sobre los pros y los contras en función de las ofertas de alojamiento que vayas encontrando.

¿Reservar con antelación o buscar una vez que estés en el sito?

Hay dos tipos de personas a la hora de buscar alojamiento para el Erasmus.

Están los estresados y muy organizados que quieren estar seguros de tener un techo y un cama en cuanto lleguen a la ciudad. Esta opción te permite estar tranquilo (te quitas un gran peso de encima) una vez que llegas a tu ciudad de destino. Pero, puede ser estresante también si, cuando ves lo que has reservado, te das cuenta de que no se parece a lo que viste por Internet (o donde lo hayas buscado).

Por otro lado, están los que son un poco más tranquilos y prefieren empezar a buscar cuando llegan a la ciudad de destino para ver con sus propios ojos los pisos y conocer a los inquilinos y los propietarios. Pero, esto puede llegar a ser agobiante si van pasando los días, ya has examinado todos los anuncios, en todos los barrios de la ciudad, y todavía, no solo no has encontrado nada, sino que, encima, tienes que seguir pagando el albergue, en el que te alojas con todas tus pertenencias.

Está en tus manos decidir qué te conviene más, teniendo en cuenta los pros y los contras de cada opción.

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El aspecto financiero

Obviamente, como todo estudiante que se precie, te preguntarás cuánto te va a costar.

Algunas ciudades Erasmus son famosas por su reputación de "ciudad barata" y otras, por el contrario, destacan por ser las ciudades en las que más dinero se gasta.

Según cuál sea tu destino, compara varias ofertas e intenta averiguar cuál sería el precio medio para saber si los anuncios te están intentado estafar o si, por el contrario, crees que son muy sospechosos por tener un precio tan bajo. Así, sabrás, más o menos, cuál es el precio "normal de un piso de estudiantes".

Algunas universidades te conceden una beca mensual, que te sirve para hacerte una idea del coste de la vida en esa ciudad. Tendrás que organizarte y guardar una parte de la beca para pagar el alquiler.

Normalmente, a los estudiantes les sale más rentable compartir piso. Los pisos compartidos y las residencias universitarias suelen ser las opciones más baratas.

Te toca decidir si prefieres ahorrarte un dinerillo y vivir en un ambiente más modesto o elegir un sitio en el que te sientes realmente a gusto y dedicar menos dinero al resto de gastos.

Lee bien los anuncios

Nunca lo diremos lo suficiente, pero tienes que leer bien los anuncios. A veces, los gastos no van incluidos en el precio, el cuarto de baño se comparte, etc.

No firmes cualquier cosa

Ten cuidado. Lee y relee el contrato mil veces, si lo necesitas. Pero, al final, tienes que estar seguro de que estás de acuerdo con las cláusulas que firmas.

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Mi alojamiento en Granada

Granada es una ciudad muy barata. Los pisos normales (que ofrecen habitaciones amuebladas para estudiantes y el resto de pisos compartidos) cuestan en torno a los 200 euros en la zona universitaria y pueden subir hasta a 250-300 euros en la zona del centro.

Yo encontré mi alojamiento antes de irme de Erasmus y pagué una fianza para reservarlo.

Lo encontré con la ayuda de estudiantes españoles que estaban de Erasmus en mi ciudad. Hice un intercambio lingüístico con una chica española que vivía en una residencia del barrio universitario (de la ULB) en Bruselas. La residencia estaba llena de estudiantes de intercambio hispanohablantes, con los que pude hablar sobre mi búsqueda de alojamiento.

Una chica de Granada, que estaba de intercambio en Bruselas, me dio los datos de contacto de una chica, que estudiaba con ella en Granada, y que estaba buscando compañeros de piso para el siguiente semestre. Me puse en contacto con ella y llegamos a un acuerdo hablando por Facebook y por WhatsApp.

Encontré una casa compartida por menos de 150 euros al mes; creo que conseguí el alojamiento más barato de la ciudad. Estaba un poco retirada del centro y situada junto al campus de la Cartuja. Había que sumarle los gastos, pero aun así no salía muy caro. La casa no eran nada del otro mundo, pero estaba bien para que un estudiante pasara allí 6 meses.

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El barrio estaba muy bien y vivía con gente de Granada.

La propietaria era bastante comprensiva con la situación de cada uno.

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