Toulouse para todo el mundo

Me fui de vacaciones a Toulouse en pleno febrero y fue una experiencia genial. Todo el mundo dice que Toulouse no tiene nada de especial. Pero realmente a mí me pareció una ciudad encantadora y llena de escondites preciosos. Es verdad que en un par de días te la has podido recorrer entera, pero si quieres, puedes pasarte varios días descubriendo lo que hay escondido entre las calles más conocidas. 

Cuánto me costó el viaje

Esta es una de las gangas que digo, que si tienes algunos días libres entre semana, puedes encontrar fácilmente. A nosotros nos coincidió que pudimos cogernos los días en el trabajo y que en la universidad no teníamos asistencia obligatoria. En total fueron 20€ el viaje de ida y vuelta. El alojamiento que cogimos en AirBnb (https://www.airbnb.es/) estaba en pleno centro y nos costó 90€ dos noches (entre dos personas). Como estábamos en el centro, no teníamos que coger transporte público para nada, e íbamos a todas partes andando. 

Después, la comida solíamos comer fuera y ahí si que nos subía un poco el precio: entre la comida, el vino, el postre... Pues unos 45€ por comida, más o menos. Pero es cierto que ahí no teníamos problemas de dinero y nos lo podíamos permitir, si hubiéramos quierido reducir costes, no nos habría supuesto gran problema. Las cenas, por su parte, las solíamos hacer en casa para ahorrar y porque ya estábamos cansados de tanto caminar por ahí.

Es cierto, que en un principio nuestro viaje era de 3 días y 2 noches. Pero allí coincidimos con otros amigos, y entre y unas y otras, nos convencieron para cambiar nuestro vuelo hasta dos días después, horas antes de que saliera nuestro avión. Así que finalmente estuvimos 5 días y 4 noches. Así que, gastamos otros 20€ en el cambio de billete (algo completamente innecesario, pero que me encantó). 

Lo que no te puedes perder de Toulouse

Hay algunas cosas que son totalmente necesarias en Toulouse. Por ejemplo, ver el atardecer desde la orilla del río. De repente el cielo se vuelve complentamente morado y la ciudad y los tejados parece que sean todos rosas. 

También es super recomendable el Jardin Japonais, que como su propio nombre indica es un jardín con temática japonesa. Te sientes totalmente dentro y da mucha paz, porque no suele haber gente. 

Las tiendecitas y los callejones, fueron sin duda alguna mi parte favorita de la ciudad. Nada en concreto, pero la tranquilidad que desprendían al pasear me hipnotizó. 

Lo que más me gustó

Además de las tiendas y las callecitas pequeñas, lo que más me gustó de Toulouse fue la comida y el vino. 

Se lesda especialmente bien hacer que se te deshaga la boca de lo bueno que está todo. Hay un tipo de "crepes" que se llaman galettes que según nos contaron son originales de Toulouse, y la verdad que por mi parte se llevaron un 10. 

Además, el paté, el pato, el queso fueron otras de las delicias que probé estando allí. Creo que la comida tenía un sabor muy característico de allí, y que el mismo plato cocinado en otro lugar no sabría igual. Me da esa sensación, porque todo estaba hecho de una manera "muy francesa".

Pero, desde luego, no puedo terminar esta entrada sin mencionar algo que estoy deseando volver a comer. Los gofres de chocolate. No comimos un gofre que nos hicieron en el momento, y que en lugar de llevar el chocolate echado por encima, lo llevaba en barritas por dentro. No sabría ni cómo explicar lo buenísimo que estaba aquel gofre. Estaba calentito (con el frío que hacía, se agradecía bastante), para nada dulce, un chocolate que sabía mucho a chocolate... Fue el mejor gofre que he comido nunca, y yo he comido muchs gofres...

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