Taller de baile en Salamanca

Llevo bailando desde que era pequeña. He probado diferentes estilos, desde ballet, pasando por bailes latinos hasta hip-hop. Sin embargo, el taller que se impartió el sábado pasado en la academia Azabache fue toda una experiencia para mí ya que pude familiarizarme más con krump, dancehall y wacking. Fui al taller con la hermana de mi novio, que también es bailarina, así que lo pasamos muy bien bailando juntas.

Como dejé de ir a clases de baile cuando dejé Hungría, fue una tarde muy importante para mí, y por esto, me gustaría dedicar este post a dedicar una breve introducción a cada estilo de baile y a contar mi opinión sobre ellos y las clases.

[Este era el flyer del taller. ]

Krump

Empezamos con krump, con el que ya estaba un poco familiarizada, ya que vi un documental hace un par de años. (Si a alguien le interesa, se llama Rize y va sobre la subcultura del krump en Los Ángeles. ) La verdad es que era un poco reacia a hacerlo, porque es un baile muy agresivo, intenso y rígido que requiere unos músculos fuertes y expresión facial. Otra dificultad que presenta este baile es que tiene un número muy limitado de pasos y movimientos básicos, y el resto es puro freestyle. La profesora era Vero, que nos explicó que el krump lo inventó Ceasare “Tight Eyez” Willis y Jo’Artis “Big Mijo” Ratti a principio de los 2000 en Los Ángeles. Fue una sorpresa para mí, ya que pensaba que al igual que el dancehall, el krump había evolucionado de la vida diaria de la gente. De todas formas, a pesar de todos mis miedos, me uní al grupo y fue una buena decisión; me lo pasé muy bien, incluso con 60 minutos de clase donde solo pudimos aprender los pasos más básicos y hacer una pequeña coreografía.

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Dancehall

La siguiente clase fue la de dancehall, la que más ilusión me hacía. La verdad es que me encanta el dancehall desde hace muchos años, gracias a una de las mujeres más impresionantes del mundo, Laure Courtellemont. Probablemente sea la bailarina de dancehall más importante ahora mismo. ¡Lo hace genial! Pero sin importar cuánto la admiro, voy a centrarme a hablar del estilo en general. El dancehall es, originalmente, un género de música jamaicana, pero hoy en día también se usa para referirse a su correspondiente baile. Laure fue la pionera que empezó a popularizar este estilo de música y su cultura, e intentó introducir un nuevo concepto, un estilo de baile nuevo originado de la incorporación de movimientos frescos un poco relacionados con el hip-hop. Así es como nació ragga jam.

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La clase fue muy divertida y fue la que más me gustó. La profesora, Alejandra, creo una atmósfera muy buena y nos olvidamos de todo lo que pasaba por nuestra cabeza. ¡Qué ganas tengo de ir a su próxima clase!

Waacking

Desde mi punto de vista, esta fue la clase más extraña. El Waacking es un estilo de baile que básicamente consiste en mover los brazos sobre los hombros a ritmo de la música, a veces inexplicablemente rápido. La otra parte de este estilo de baile consiste en posar - tanto y tan sexy como puedas. Creo que esta es la mejor forma de describir el waacking. Bueno, he de decir que tanto como espectadora ni como bailarina encuentro este tipo de baile interesante o cautivador. Quizá sea incompetente en waacking, ya que es muy difícil para mi mover mis brazos tan rápido como tendría que hacerlo.

A pesar de esto, tengo que admitir que la profesora lo hizo genial cuando bailaba. Era rusa, y no hablaba español muy bien - por lo menos algo que con lo que me sentía identificada, - pero que dominaba a la perfección el lenguaje del waacking. Solamente por el hecho de ver como movía los brazos tan rápido y como posaba como una estrella mereció la pena ir a su clase.

Y estas fueron mis experiencias de baile el sábado en Salamanca, solo por 18€.

Definitivamente recomiendo echar un ojo a la academia de baile Azabache, que también está especializada en flamenco, un baile tradicional del sur de España. Esta es la dirección: Calle Consuelo, 11, Salamanca.

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