¿Por qué viajar?

Viajar es una actividad maravillosa, estimula todos nuestros sentidos más profundos y personales, nos permite experimentar y vivir con un sentimiento de libertad total, nos permite conocer gente y ponernos en contacto con situaciones nuevas.

Muchos de mis amigos me preguntan a menudo: "Pero, ¿por qué viajas tanto? ¡Gástate el dinero en otra cosa!"

Lo que siempre digo y contesto es que cada uno de nosotros es libre de hacer aquello que más quiere con su propio dinero y a mí, que nunca me he sentido muy adherido a mis bienes y gastos materiales, me encanta gastar e invertir mis ahorros en viajar, en una aventura que se quedará conmigo a lo largo de los años, en mis recuerdos y pensamientos.

Hoy, me gustaría proponer el tema de "¿por qué viajar es algo bello?". Aparentemente, podría parecer un tema y una pregunta fácil e intuitiva, pero os juro que, a veces, la respuesta no es así de obvia para todos.

Hay quien viaja porque es algo que hacen todos, hay quien viaja porque no sabe qué hacer y hay quien viaja, como yo, que tiene una pasión por hacerlo.

Me gustaría, por tanto, explicaros las razones que considero importantes respecto a "por qué viajar" es una experiencia positiva.

Ahora, sin más preámbulos, ¡os explico los motivos por los que considero que viajar es maravilloso!

1) Reduce el estrés

¡Os cuento la siguiente anécdota!

Hace un tiempo, cuando era mi primer año en la universidad, recuerdo que había un periodo que estaba lleno de cosas que tenía que hacer. Cada día tenía que llevar documentos a la secretaría de mi facultad para pasar a otro curso de estudios que siempre estaba en zona Ostiense.

Ostiense es un barrio de Roma; se encuentra a muchos kilómetros de mi casa y, para llegar hasta allí, tardo alrededor de media hora en tren o dos horas con cualquier otro medio de transporte.

En resumidas cuentas, levantarse a las seis de la mañana cada día para llegar a la secretaría no es, desde luego, coser y cantar.

Cuando acabaron esas dos semanas, sentí un deseo en mi interior y, en particular, una voz que me gritaba que debía dejar todo atrás y lanzarme en una aventura.

¡Dicho y hecho! Una vez hechas las maletas, me fui a Florencia, que queda a una hora y media de Roma en tren.

Mientras estaba viajando, ¡recuerdo haber dejado todo aquel estrés a mis espaldas, haber adelgazado 3 kilos al menos y haber sido súper feliz!

El estrés destruye nuestras capacidades mentales y nos obliga a vivir una vida frenética y caótica. A veces, un viaje es aquello que nos sirve para cambiar de rumbo y volver a un equilibro físico y psicológico.

2) Harás nuevos amigos

¡Hacer nuevas amistades y tener muchos amigos es una de las cosas que más nos llenan de satisfacción!

Estar rodeado de personas que quieren lo mejor para ti, te hace sentir verdaderamente querido y amado.

¡Y todo esto es posible viajando! Tengo amigos repartidos en algunos rincones del mundo: Austria, Alemania, Las Filipinas, Francia, España y cuando organizo un viaje en un determinado país, siempre trato de reencontrarme con los amigos que viven allí.

Volver a vernos después de tanto tiempo y contarnos en cuestión de segundos el resumen de nuestras vidas es increíble.

Es un intercambio recíproco que desemboca siempre en momentos alegres y libres de preocupaciones.

3) Descubrirás sitios nuevos

¡Qué bonito es descubrir un lugar por primera vez, qué bonito es sentir emociones y estados de ánimo nuevos!

Cada viaje tiene como objetivo visitar atracciones turísticas por excelencia. Cuando uno se encuentra ante un monumento como una catedral o simplemente un paisaje, se tiene la impresión de visitarlos con todos los sentidos que dispone el cuerpo humano y uno se queda boquiabierto, inmerso en un torbellino de sensaciones.

4) Conocerás nuevas culturas

Me he dado cuenta de que las personas que han viajado tanto tienen más capacidad a la hora de argumentar un discurso. Esto es lo que pienso y es la impresión que me da, pero tras hablar con varias personas que se han aventurado en la naturaleza, he podido constatar que así es.

Al fin y al cabo, viajar implica organización y muchas ganas de hacer y de conocer.

Conocer algunos idiomas nos ayuda a articular y argumentar un pensamiento o una frase.

Es como si uno fuera más libre desde un punto de vista expresivo de la comunicación.

5) Ampliarás tus habilidades y competencias personales

He sido scout durante muchos años y he vivido y ganado competencias y habilidades manuales impresionantes.

He aprendido a hacer nudos, a construir presas; sé cocinar y manejar con destreza las herramientas de trabajo útiles.

Estas competencias nos pueden ayudar en nuestro día a día y hacernos crecer aún más en el ámbito académico.

Usar las manos y acabar lleno de tierra son sensaciones primitivas que generan en el cuerpo humano un sentimiento de disfrute y de tranquilidad.

Me gusta viajar porque me pongo a prueba y no me queda otra que ingeniármelas para seguir adelante.

6) Saborearás la libertad

Siempre lo digo, viajar es sinónimo de libertad.

Solo cuando se está lejos de casa nos damos realmente cuenta de que somos libres de todo y de todos.

Con un viaje nos sentimos verdaderamente solos, dispuestos a apoyarnos en nuestras propias fuerzas.

Es una emoción fantástica, al igual que la libertad para elegir que nos brinda.

Somos libres, en efecto, para tomar decisiones que están libres de cualquier forma de prejuicios y de las opiniones de los demás.

¡Viajar es una decisión y yo he decidido ser libre!

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