Jueves 26 de Mayo 2016 – Catarsis, estress e impotencia.

Jueves 26 de Mayo 2016 – Catarsis.

Edit: Esta entrada es una catarsis de cosas que han pasado los días anteriores. Admito que me puse a beber y empecé a escribir cosas que tenía dentro, cosas que venían pasando y sentimientos. Especialmente por algo muy negativo que pasó este día. He estado considerando la idea de cortar ciertas partes porque la entrada es bastante larga. Pero al final he decidido tan solo corregir alguna que otra frase. Es como una “impronta” de cómo me sentía en ese momento, con la rabia e impotencia. También he decidido no ponerle negritas a esta entrada. En este texto puede que los eventos están escritos de forma algo caótica, pasando de una linea de eventos a otra. Pero en ese momento tan solo quería descargarme contando lo que había pasado y no me preocupé demasiado por eso. Sin embargo si me pusiese a reescribir esta entrada entonces se perdería ese “toque” de frustración y rabia que sufría en el momento.

“Ehh. ¿Y que pasó en los días 23, 24 y 25?” probablemente alguien que siga el blog (y que le preste atención a cada entrada, aunque no tengo ni idea de si este blog tendrá popularidad alguna o si lo visitará alguna araña de google de cuando en cuando y nada más) diga. Pero algo que ocurrió hoy merece una entrada algo larga y una reflexión.
Varias veces escribo entradas de lo que pasó los dos o tres días anteriores de una vez. Recordando lo que ocurrió en esos días, detalles, y si ocurre algo muy interesante lo escribo justo ese día. Pero lo que sucedió hoy me hace querer escribirlo inmediatamente, y además modifica mi humor e impresiones sobre los eventos en los días anteriores. A veces no recuerdo puntualmente lo que escribí sobre el tema, así que disculpen si repito algo que ya he mencionado.

Mi jefe, como sabrán, es un Polaco, el cual tiene problemas. Tiene problemas con la bebida. Pero ese tipo de cosas no vienen así porque si, eso viene por consecuencia de tener problemas con la vida (y con uno mismo, quizás con la falta de autoestima, por ejemplo). Dentro de todo motivos no le faltan; en semana y media lo van a “desahuciar” (de nuevo no recuerdo si lo conté, pero básicamente estuvo trabajando durante casi dos años “como loco”, tratando de comprar el edificio donde vive, y donde está su negocio, el cual estaba disponible a un precio equivalente a 1/6 de lo que realmente vale. Aún a costa de, por lo que ganaba, subir de categoría en pagar impuestos y pagar un “pastón” por eso, todo con tal de demostrarle al banco que gana X cantidad de dinero al año como para que el banco le de un crédito para poder comprar dicho edificio, pero como acá parece ser que los inmuebles no son de venta directa, sino que, por el tema de oferta y demanda, es más cuestión de hacer una oferta y que el dueño puede esperar cierto tiempo hasta que haya otra oferta mejor. Hizo una oferta por la cantidad máxima que el banco le daba por el crédito hipotecario y que vino otra persona e hizo una oferta mayor y el dueño le dio la adjudicación. Y él vio como, según sus palabras, el sueño de su vida se fue “al carajo”, y perdiendo 30.000€ en el proceso (no le entendí esa parte. No sé si fue por comisiones, depósitos, o por los impuestos que terminó pagando. No sé como funciona eso). Y tenía 6 semanas para abandonar su casa)

Edit: Esto ocurrió el fin de semana del 23 de Abril. Y eso fue lo que había ocurrido que mencioné en la entrada del 25 de abril “are you allright?”

Todo esto lo menciono para mínimamente entender las causas de su estrés y lo que ocurrió ayer y hoy, además que la semana pasada. Sumado a que un familiar está tratando de vender un terreno, todo para tener más dinero, y además de que ha estado buscando una casa nueva (ha encontrado una a 20 metros del mar, a un precio que se podía permitir, y que ayer, 25 de Mayo (Lol debería de no haber trabajado aduciendo que era feriado en Argentina) hemos pasado por el banco para hacer un trámite con respecto a sacar la hipoteca camino a un trabajo).
Ayer fuimos a “la pequeña isla” de nuevo e instalamos cajas de enchufes e interruptores de luz. Recordemos que es una oficina donde anteriormente habíamos ido dos veces (creo que el tercer día que fui habíamos tirado los cables en la zona, la siguiente vez fue un par de semanas después donde los carpinteros instalaron los paneles de madera y tuvimos que cortar zonas para instalar las cajas donde empotramos los futuros enchufes, en ese proceso, como era la primera vez en mi vida que utilizaba una caladora manual naturalmente había hecho errores (como hacer los cortes muy grandes y eso).
Cuando salía con el jefe a hacer instalaciones y hacía un error él entraba a putear (insultar) en Polaco, diciendo “¡Kurwa!” Pero en general hasta ahora parecía que entendía que era natural que hiciésemos errores. Era un detalle relativamente menor que no merecía mayor mención en el blog, ni en mi vida.

Al menos hasta ayer, y especialmente hoy.

Ayer hemos vuelto a ese lugar, donde han enyesado las paredes, y hemos tenido que instalar los enchufes (proceso; primero se instala una caja de plástico las cuales tienen unas “lenguetas” que se agarran a los costados del agujero y luego sobre las lenguetas, que tienen agujeros, se instalan las cubiertas, las cuales son jodidamente frágiles porque si uno atornilla fuerte la cubierta se rompe). Como han enyesado de manera rápida varios de los lugares estaban enyesados de más (por ejemplo, un par de esos empotramientos estaban enyesados y tuvimos que arrancar yeso para poder instalar las cajas de empotramiento) Pero en el proceso de arrancar dicho yeso hemos (si, en plural, porque he ido con el otro polaco y en dos cajas le pasó lo mismo) arrancado un poco de yeso de más, a pesar de que fui cuidadoso con eso, y el jefe me ha dicho (en plan enojado) “mira, has arrancado demasiado yeso, y luego el dueño me va a echar la bronca por esto”
Ha sucedido que el jefe me mandó a abrir un nuevo boquete para instalar un enchufe doble, cortando con la caladora, pero hice un error muy tonto; los empotramientos tienen un lado (frontal) más grande, y del otro lado tiene una sección ligeramente menor. Como me ha dicho hice el proceso regular; poner el empotramiento apoyado sobre la pared, usar la niveladora de albañil para que quede recto, marcar los bordes con lápiz y luego cortar con la caladora. Hice todo eso, pero cometí un error; puse el empotramiento al revés (o sea, marcando con lápiz la sección más grande). Mi idea (debido a la experiencia) era que ante la duda debía de cortar DENTRO de la sección marcada, para así, si el empotramiento no entraba, agrandar la sección, ya que ese error se puede corregir fácilmente, pero si cortaba muy grande entonces iba a ser mucho más difícil reparar ese error. Como quería ser cuidadoso y hacerlo bien (para no llevarme una bronca) había tardado mucho (según el jefe) en hacer todo eso. Él vino quejándose de que lo estaba haciendo demasiado lentamente (sus palabras textuales fueron “¡Jesús! ¡Tardas jodidamente demasiado!”. Y entonces me apartó y cortó así de una la sección que marqué. El resultado fue que al intentar meter el empotramiento este “bailaba” ya que quedó demasiado grande dentro de la pared.

Su reacción me hizo temer por mi integridad física.

Al ver que el empotramiento no entraba gritó con todas sus fuerzas “¡¡¡KURWA MACH!!!” (fonéticamente escrito) Donde acto seguido sacó el empotramiento, lo destrozó contra el suelo y lo pateó con todas sus fuerzas mientras hacía todo tipo de gestos al estilo rabieta.
Como creo que mencioné, soy una persona que le importa mucho todo lo que hace. Y al ver que un error mio fue causante de semejante reacción supe que eso era mi culpa. Pero su reacción fue tal que hasta sentí mi integridad y seguridad personal en peligro. De tan enfadado que se puso hasta pensé que me iba a golpear. Me quedé en dicha posición mientras él hacía esa semejante rabieta. Y luego tuve que aguantarme los gritos que me ha dado.

¿Qué hice? Luego de semejantes gritos pensé “Vale, mejor me voy a hacer el resto de los empotramientos” aunque de verdad tenía miedo de cometer cualquier otro error.
Pero hoy fue mucho peor que eso…

Hoy volvimos al gimnasio donde habíamos estado hace un par de semanas (si, aquel donde tuvimos que trabajar en unas escaleras instalando canaletas de metal, y donde además habían pintado las escaleras y constantemente pasaban mujeres diciendo “sorry” queriendo que nos apartáramos. Aunque hoy fue peor ya que esta vez casi todas ellas pasaban con bebés en canastas, no sé que estaba ocurriendo pero eso hacía que tuviésemos que apartarnos mucho más que aquella vez). Las tareas que teníamos que hacer eran; instalar el transformador y el controlador de las luces multicolores que teníamos que instalar en las canaletas que instalamos aquella vez, además de reemplazar 2 luces fluorescentes por leds, instalar canaletas y cableado nuevo e instalar el cableado de los paneles que hemos instalado aquella vez, entre otras pequeñas cosas…

Pero la cosa empezó mal desde el mismo momento en que llegamos y nos bajamos de la camioneta; el Jefe bajó una escalera y una caja de cosas. Mientras me quedé allí, mirándolo, esperando órdenes. Entonces me gritó diciendo “¡¡¡Baja todo!!!” refiriéndose a las herramientas, pero me jodió que asumió que sabía lo que debía hacer aunque NO me dijo de antemano (ni hemos hecho pauta alguna) sobre qué hacer. Parecía que quería que le leyéramos la mente.

Lo que me dijo que debía hacer era instalar el amplificador de luces led y el transformador. Algo que nunca antes había hecho. Si, sabía como debían de ser conectados porque lo había visto en la tienda. Pero lo que no sabía era en qué punto especifico debían de ser instalados ni en como debía hacerlo (o mejor dicho como EL quería que lo haga)
En los días anteriores cuando he cometido un error el jefe más de una vez me ha dicho “¡¡Piensa como deben ser hechas las cosas!! ¡¡PIENSA!!” pero en realidad lo que está diciendo de verdad (al conocer lo muy básico de psicología) es “¡¡Piensa como *YO* creo que deben ser las cosas!!”
La lógica (incluso la de un Vulcano) sería preguntarle a ver como, y en qué punto específico instalar ambas cosas (ya que ha dado por culo por el tema de que además de ser práctico todo tenía que ser bonito, aún cuando lo que he hecho estaba “errado” por unos pocos centímetros). Así que hice lo más lógico que era preguntarle como quería que lo hiciese (incluso le he dicho alguna vez que, como me preocupa hacer bien el trabajo, puede que repita lo que ha dicho tan solo para asegurarme haber entendido correctamente sus instrucciones).

¿Su reacción traducida? “¡¡¡La puta madre!!! ¡¡¡Te he dicho que ahí arriba!!!” (esto, gritando, poniéndose rojo (literalmente), llevándose las manos a la cara, y casi llorar, cosa que sé, por experiencia propia, que el llorar es tener un sentimiento extremo el cual no somos capaces de controlar). De NUEVO me hizo sentir miedo y otra vez sentí temor por mi integridad física, aunque sé plenamente que lo más grave que podría llegar a hacerme es decirme “no quiero verte más, le digo a la empresa coordinadora que no quiero saber nada más de ti”).
Además añadió “Jesús, ¡Son tan niñatos!”.
Todo esto por una simple pregunta. Una pregunta que ha venido de experiencias anteriores, por un deseo de preocuparme y hacerlo bien a la primera y teniéndolo todo en claro (aún con su mal inglés). Y además fue algo que no tenía sentido lógico. Porque era básicamente poner el transformador y el amplificador en un lugar sin agarre alguno. En un lugar donde tranquilamente podrían caerse (al menos a mis ojos).

También debíamos de instalar casi 20 metros de tiras de led sobre las canaletas. Acá también hubo otro problema porque él mencionó que se debía de hacer, pero nada más, no sabía si en realidad tenía que hacerlo yo o no. Como no habla inglés apropiadamente a veces dice las cosas pero sin el tiempo verbal. El resultado es que no me queda claro si está diciendo algo que ya se ha hecho y me lo está contando, o si es algo que se debe de hacer en el momento, o si es algo que se debe de hacer en una futura instalación.

Las tiras de led vienen en carretes de 5 metros de largo. Para poder estirarlas hay que soldarlas y el jefe se olvidó el soldador en el negocio. Así que tuvo que irse con el vehículo para ir a buscarlo al negocio. Básicamente era un viaje de 20 minutos.

Así que instalé ambos aparatos y los conecté, incluso a pesar de haber pasado los cables mal por la canaleta lo corregí. A todo esto con el temor sobre la cabeza de que en cualquier momento el jefe venga y me grite y regañe por “haber tardado demasiado tiempo” como ya ha hecho otras veces. O que me grite diciendo que “piense, que los cables tienen que pasar por tal lado de la canaleta” a pesar de que nunca me ha dicho eso.

Foto del controlador de luces led multicolor. El que le he preguntado donde instalarlo y ha hecho esa rabieta. No me parece lógico dejar esto ahí sin ningún tipo de agarre. Esto está a 4 metros por encima de donde pasa la gente. Si se llega a caer podría hacer bastante daño y no me fiaría que los cables lo eviten.

El jefe tardó casi 2 horas en volver, mientras tanto los demás estaban completando otras tareas que él si les había asignado puntualmente (como estirar otros cables y otros enchufes). Mientras yo estaba allí sin hacer nada.
Cada vez me preocupaba más el no tener órdenes. Y llegado a un punto me encontré en un muy JODIDO dilema con 3 escenarios:

– Escenario 1: No hacer nada, quedarme ahí esperando a que el jefe vuelva con el soldador para soldar los cables y arriesgarme a que se enoje y me grite por no haber hecho absolutamente nada en todo ese tiempo (lo de conectar el transformador y el amplificador tan solo le tomaría a él 5 minutos. A mi me tomó 15 aproximadamente).
– Escenario 2: Al no saber qué hacer, llamarlo por el celular para preguntarle que debía hacer. Para preguntarle por más órdenes. Además del riesgo de que se enoje por no entenderle correctamente por el celular como ya ha pasado con el tema de la mesita de luz, que se enoje y me grite por preguntarle “una pregunta tonta que ya ha explicado” y arriesgarme a que ocurra lo que había sucedido anteriormente. Basado en la muy desagradable situación de lo que acababa de ocurrir momentos atrás esta era la peor situación.
– Escenario 3: Arriesgarme a seguir lo que anteriormente me ha dicho como “comentario” sobre lo de instalar las luces led y medio ignorando lo del tema de tener que soldar las luces cada 5 metros. Además de que había que hacer giros de las luces led en 90 grados de costado en las esquinas. No tenía ni idea de cómo hacer eso. ¿Quizás debía cortar la tira y colocarla en su lugar correspondiente, luego soldar cables para unirlos en el giro de 90 grados?. No me parecía lógico “retorcer” la tira de led arriesgándome a cortar alguna pista de electricidad. Sinceramente no sabía que hacer, se me ocurrió instalar las tiras correspondientes pero de tal manera en que si me equivocaba en algo sería posible deshacer lo que hice, o sea, sin cortar ni nada raro. Arriesgándome a que si me equivocaba él se enoje y me grite por ello. (Por ejemplo, no sabía puntualmente donde iniciar la instalación de la línea de leds, porque no había una zona claramente marcada y definida dónde hacerlo)…

Por lo que habrán podido notar los 3 escenarios posibles desembocaban en todos lo mismo; que el jefe se cabree y se enoje por haber hecho algo mal (o mejor dicho algo que no estaba acorde con lo que él quería puntualmente).

Sinceramente es inaceptable que termine regañado haga lo que haga (o no haga). Todo esto me hizo pensar seriamente en llamar a la responsable de los lugares de trabajo de la empresa coordinadora para decir que renuncio a ese sitio debido a que estaba asustado del jefe.
Si, ahora me suena tonto, pero de verdad tenía miedo del jefe. Para peor, estoy atado a una situación delicada con respecto a lo que es esta relación “laboral” Técnicamente no es una relación laboral, no tenemos contrato ni técnicamente estamos trabajando para la empresa “tutora” (en este caso, el jefe es gerente general, tutor, maestro, responsable de departamento, de marketing, etc. Etc. Etc. Ya que es el único empleado y de dicha empresa). Sino que estamos aprendiendo. De haber sido alguien trabajando en relación de dependencia en ese momento le hubiese dado la mano, le hubiese dicho “It has NOT been a pleasure to work with you” y al carajo, renuncia. A diferencia de mucha gente negativa que conozco estoy muy seguro que, de haber podido obtener ese trabajo en primer lugar, podría repetir los mismos pasos para obtener otro trabajo, en un lugar mejor.
Pero aquí no tenía esa posibilidad. Tengo que mencionar que “El Mendas” me ayudó bastante en esto porque me decía “no vale la pena, tan solo por 3 semanas que te quedan… Mejor “malo conocido que bueno por conocer” (Aunque realmente prefiero lo segundo). Sé que para poder obtener el aprobado en el FCT necesito que el jefe me firme los papeles y la “carta de recomendación”. No estoy realmente consciente de hasta qué punto tengo el poder de hacer las cosas. En TEORÍA podemos poner una evaluación en el centro de trabajo. Pero que se yo, la lógica indica que, a pesar de todo lo que nos han dicho, la palabra del jefe tendrá más validez sobre lo que nosotros digamos por ser simplemente estudiantes (lo que creo que en abogacía se conoce como “La prueba diabólica”) Que tranquilamente yo, como estudiante en prácticas, podría escribir 10 páginas de texto coherente sobre lo que ocurrió, mientras que el “jefe” podría responder a eso con un “no quiero tener más a este sujeto en mi negocio” y con eso su palabra pesaría más sobre la mia.

Y si, todo esto lo he sopesado en ese tiempo.
¿Al final que hice? Me decanté por el escenario número 3. En el cual estaba la menor posibilidad de que me grite y se enoje. Así que empecé a instalar las tiras led. Tardé media hora hasta que el jefe llegó. Y adivinen qué… Empezó a decir “¡¡Kurva mach!!” cuando vió que instalé las luces de manera incorrecta. Especialmente con respecto al giro de 90 grados. En donde le pregunté que hacer en ese caso. En su enojo me dijo que debía de torcer el cable de una manera que NO me pareció lógica. Ya que me pareció que torcer una tira de led de esa manera traería un muy serio riesgo de romper las conexiones internas (En la escuela nos han enseñado que todos los cables tienen que tener un radio mínimo de giro por esto, y que nunca había que hacer giros de 90 grados, incluso por el tema del Reglamento. Aunque vale que aprendimos el reglamento de España, cosa que difiere bastante del reglamento Irlandés, por ejemplo, según el reglamento Irlandés no se puede instalar enchufe alguno dentro del cuarto de baño, lo que explica porqué tanto en la casa de Bandon como en Cork no he encontrado enchufes en el baño).

Resultado, cuando hicimos la prueba una sección de la tira de leds no encendía. Cosa extremadamente casual que fue justamente el giro de 90 grados que el jefe hizo. Exactamente en el mismo punto. Y diciendo que fui yo quien lo había roto (cuando muy claramente fue el).

A este punto estaba muy asustado de hacer cualquier cosa por temor a las quejas (aunque a los demás españoles me habían dicho que cualquier cosa que les diga “les sudaba la polla” y hasta incluso se habían reído de su reacción ante mi pregunta. Cosa que no me causó la mínima gracia). Y a falta de ordenes claras decidí quedarme cerca de lo que los demás estaban haciendo, como instalar cables y canaletas. Más que nada para ayudarlos en lo que podría llegar a ocurrir, o en lo que necesitasen.

En eso llega el jefe y de nuevo me regaña por estar ahí. Diciendo que debíamos de organizarnos mejor. De que si uno estaba haciendo una cosa el otro tenía que pensar como podía hacer más fácil y rápido el trabajo. Me hizo el ejemplo que mientras uno estaba estirando el cable YO podría estar midiendo la sección de la canaleta donde íbamos a pasar el cable para cortarlo y tenerlo listo. Queriendo hacer las cosas lo mejor posible tomé el metro y empecé a medir. Cuando el jefe me regañó de NUEVO diciendo que “si no se instalaba la luz primero no tenía sentido medir el espacio ¡¡PIENSA!!”
En ese momento el jefe comenzó un discurso que ya me había dicho alguna vez, si recuerdo bien el diálogo fue el siguiente;
– A ver… Ustedes tienen que ¡Pensar! ¡No puede ser que tarden tanto en hacer algo y hacer tantos errores! ¡Si fuesen electricistas de verdad tienen que hacer el mayor trabajo en el menor tiempo posible! Si yo hiciese 32 euros de trabajo en una hora y ustedes tardan tanto tiempo en hacer algo tendría que pagarles 28 euros ¿Y que me queda para mi? ¡Nada! ¡Se los digo por su bien!

En ese punto fue cuando no podía callarme más. Ya estaba harto de , pero de forma calmada y le dije lo siguiente:

– Mira… Nosotros somos estudiantes, no tenemos experiencia alguna, no cobramos dinero alguno. Por lo tanto, tardamos tiempo en hacer tal o cual cosa, hacemos errores. Pero justamente por eso estamos aquí, para aprender. Y sobre el tema de hacer errores, hoy estaba asustado sobre usted (Vale, la frase en inglés fue “I was scared about you” cuando debería de haber dicho “I was AFRAID of what you could say” pero era una situación crítica, y más considerando que dudo que alguien como mi jefe, quien muy fácilmente confunde la palabra “bigger” con “biggest” entre muchas otras cosas) Pero principalmente porque estamos aprendiendo…

Lo peor es que no recuerdo puntualmente qué le dije, pero es más o menos entre esas líneas. Lo cual es verdad. También recuerdo que le dije sobre ese dilema. Lo cual no me dio una respuesta convincente. Pero lo muy curioso fue que después de decirle eso su actitud cambió MUY radicalmente…

Seguimos trabajando, él ya estaba más calmado. Hemos instalado una caja de derivación, etc. Luego él compró comida en un supermercado cercano y, mientras estábamos instalando unas luces, nos gritó con un tono musical “¡Hora de merendar!” Cosa que me sorprendió mucho. ¿Cómo puede ser que alguien que estaba al límite de agredirme físicamente esté ahora tan relajado y tranquilo? Conozco lo básico del comportamiento humano, el concepto de la personalidad bipolar. Pero ¡La puta madre! Esto era el límite de todo eso. Incluso nos había preguntado sobre qué queríamos beber.
Yo estaba al límite. Durante esa merienda comí salchichón ahumado con carne y salsa. Pero no lo disfruté, estaba jodidamente tenso de lo que había sucedido. Los demás como “les sudaba la polla” no les importaba que el jefe les haya gritado (que me costa que lo ha hecho, aunque no tanto como lo que sucedió, e incluso uno se reía de la reacción que tuvo. Cosa que a mi no me causaba ni la más mínima gracia). Luego de todo eso la reacción del jefe ante lo que sucedió cambió radicalmente. Me decía “¡Buen trabajo!” por llevar y traer las herramientas, limpiar, etc. Y curiosamente su energía fue bastante afectuosa. Pero sinceramente ya no me fío de todo eso.
Los demás me insistían en que no me moleste. Que tan solo me faltan 3 semanas. Que aguante. Por suerte me convencieron de no llamar para que me cambien de lugar.

Pero el temor continúa; sé que demasiado fácilmente el jefe va a enfadarse y a gritarme ante el próximo error. Por más que le ponga la mejor intención del mundo. Estoy del todo seguro que, debido a mi inexperiencia, terminaré haciendo un error.
No sé si él se olvida de las cosas que he hecho, como prestarle mi celular por un día ya que el suyo estaba en reparación (y lo hice porque sabía que era una herramienta de trabajo). Tenía la intención de hablarle sobre el tema en el camino de regreso a Cork. Pero él tenía que ir a hacer un trabajo menor en un sitio lejano donde solo fallaba un detector. Y que “no quería hacernos quedar trabajar hasta tarde por eso”.

Pero el dilema que tengo ahora es: ¿Debo arriesgarme a contarle mis sentimientos, arriesgándome a activar su ego y que me “despida” del proyecto Erasmus+ si se enoja? ¿O solo debo de tomar la filosofía de que “me chupe la polla”  y no importarme una mierda lo que ocurra total en 3 semanas me voy?. Como me importa lo que hago me inclino más por la primera opción, pero solo si el tema surge por si mismo.
Por lo pronto, dependiendo de lo que ocurren en los siguientes días mi evaluación sobre él (y sé que me va a poner una evaluación de él a mi) ya la tengo decidida; si el tema no se arregla le voy a poner la evaluación más baja, Me encantaría poder contarle a la empresa coordinadora lo mal que es ese sitio como para aprender y trabajar, con los serios problemas emocionales que el jefe tiene, y que el cualquier momento a uno lo pueden defenestrar. Probablemente la empresa coordinadora se pase mi reporte por “el quinto forro del culo” ya que al ser un estudiante soy “el último orejón del tarro” (ambas, expresiones Argentinas refiréndose a que técnicamente soy un don nadie que no tiene autoridad en el tema) ¿Y si se arregla y mejora? Como mucho lo voy a poner como “satisfactorio” que es la segunda peor calificación entre lo que he visto. Pero a este punto no puedo poner a ese sitio como un buen lugar donde trabajar y formarse visto lo visto.

¿Debería de realmente hablar con él más profundamente sobre el tema? Mis valores dicen que si. Pero mi sentido común dice que no debería de complicarme tanto la vida y simplemente aguantar el embate de todo el tiempo que me queda. Por lo pronto he vuelto a casa, he intentado “meditar” con música muy tranquila, me he dado baños con sal marina y me tenido que relajarme con “relajante embotellado” lo cual me dio fuerza para poder escribir esta extensa entrada…

A pesar de todo esto sigo pensando que el jefe, en el fondo, no es malo. Tengo que mencionar algo que ocurrió el Lunes que lo indica en donde nos mandó a hacer un trabajo personal a cada uno; nos dio los planos de una casa y nos dijo que debíamos de hacer el diseño eléctrico de esa casa. Nos explicó que, si entendíamos como es el diseño en papel, podríamos entender la instalación de esa casa y por lo tanto “nuestro valor como electricista mejoraría enormemente”. Teníamos que hacer la instalación unifilar de la casa, con los puntos de luz, interruptores, cruzamientos y enchufes de luz incluyendo el diseño de la caja general de protección. El jefe dijo que hagamos nuestro mejor esfuerzo y que luego nos diría que cosas hemos hecho bien y que cosas hecho mal. Aparentemente no hay mucho reglamento al respecto de lo que hay que instalar. Excepto por el tema del baño el cual aprendí que no debe de instalarse ningún enchufe de electricidad (lo que explica porqué ni la casa de Bandon ni aquí hay enchufe alguno). Y que como mucho pueden instalarse un extractor de aire (el cual en mi habitación actual hay uno) y que si hay un calefactor tiene que poder encenderse mediante un cable de tela por seguridad. Cosa que me parece una exageración absoluta pero bue, el reglamento es todo poderoso.
Hice un primer diseño de tirar cables según sus sugerencias. He notado y apreciado el hecho que le haya dado un buen tiempo y empeño a ver lo que hicimos y también en explicarlos. Ese fue un momento muy agradable y se nota que realmente quería que aprendiésemos algo que sería útil para la profesión.
Si bien he cometido algunos errores (según dijo mi diseño era para muy ricos porque puse muchas líneas de protección, eso fue gracioso) me explicó calmadamente los errores y en dicho ambiente distendido los entendí perfectamente. Incluso en mi esfuerzo por hacerlo bien hice el dibujo de la CGP basado en el reglamento Español. Tanto de electrificación básica (C1 a C5) de hasta…. ¿5750 W? (lo escribo de memoria). Como de electrificación elevada (hasta el C11). Lo que el Jefe nos explicó es que TODAS las casas tienen un equivalente al CGP de 63 amperios (en Irlanda se fijan por eso más que por los Watts) lo cual son 14490 W. Cosa que va en contra del reglamento que, si recuerdo bien de memoria, para tanta potencia ya estaba en un límite de necesitar una línea trifásica. O… Que obligaba a que un dispositivo que requiriese más de ¿5750 W? También necesitaba ser alimentado con una línea trifásica. Y me consta que casi todos los calentadores de agua de las duchas que he visto (excepto de la residencia en la que vivo) consumen alrededor de 9000W lo cual obliga a usar una linea Trifásica…
Pero bueno, son cuestiones menores. Pero en ese momento de verdad sentí ese deseo de mi jefe de querer que aprendamos cosas para ser eficientes en nuestro trabajo (aunque de seguro que no haríamos nada por el estilo con él)… Pero definitivamente lo que ocurrió hoy se sale de la escala.

¿Mis sentimientos? No tengo rencor por lo que ocurrió, lo que ocurrió está en el pasado y ya. Listo. Pero el problema y lo que me preocupa es que en las 3 semanas y 2 días (laborales) que me quedan vuelva a ocurrir algo por el estilo. O incluso algo peor.
¿Mi deseo? Mi deseo primordial sería convencer a mi jefe que firme mis papeles como que he hecho todas esas horas (410 aunque a un promedio de 8 horas diarias se que no llego) y tener la FCT aprobada aunque no vuelva más a ese sitio. Sé que va a ser muy difícil, casi imposible, pero en fin. Ese es mi deseo.

Ni siquiera he anotado lo que he gastado este día. Solo sé que por lo que he gastado mi promedio diario es de 14,43€

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