Haciendo senderismo por el Parque Nacional de Peneda-Gerês

El Parque Nacional de Peneda-Gerês es el único parque nacional y zona protegida de Portugal y se encuentra cerca de la frontera noroeste con España. Hay tres ríos que atraviesan el parque: Limia, Cavado y Homem, que se consideran los ríos más largos de Portugal. Hay muchas ruinas que datan de hasta los 6000 años a. C. y que están muy bien preservadas en el parque.

Cuando decidimos ir al Parque Nacional de Peneda-Gerês no teníamos ni idea de cómo llegar y tampoco había mucha información en su página web. Así que investigamos un poco y descubrimos que la manera más fácil de llegar al parque es yendo hasta Braga y cogiendo un autobús que lleva hasta el parque nacional.

¿Cómo llegamos al Parque Nacional de Peneda-Gerês?

Un día decidimos coger el tren a Braga desde Barcelos lo más pronto posible, que nos costó unos 3 euros solo la ida. También tuvimos que hacer transbordo en la estación de Nine. Nos llevó alrededor de una hora y media llegar a la estación de trenes de Braga y, desde ahí, caminamos unos 30 minutos hasta la estación de autobuses para coger el que iba hasta el Parque Nacional de Peneda-Gerês.

Había unas cuantas empresas que iban hasta el parque nacional en la estación de autobuses pero como era fin de semana solo Transdev hacía el trayecto frecuentemente. Así que esperamos a que llegara el autobús para poder ir al Parque Nacional de Peneda-Gerês. El billete nos costó unos 5 euros y el trayecto duró en torno a una hora y media, así que llegamos al parque más o menos a las 11 de la mañana. Nos bajamos en la parada de autobús de Campo do Gerês y empezamos a ascender lentamente hacia la cima en busca de las famosas cascadas del parque.

Subir hasta el punto más alto del parque no es tarea fácil. De hecho, si no están preparado para ello lo pasarás mal durante la subida. Caminamos durante un rato por la carretera que nos llevaba a la cima del parque hasta que llegamos a la ruta de senderismo en el bosque y continuamos subiendo. Llegar hasta la cima y al Miradouro da Pedra Bela nos llevó unas dos horas o más. Desde él pudimos ver el río Cavado y su enorme valle. Ese mirador es uno de los sitios más conocidos desde los que hay una de las mejores vistas del Parque Nacional de Peneda-Gerês. Nos quedamos allí un rato mientra intentábamos decidir si nos daría tiempo ir a Cascata do Arado, una ruta de senderismo con muchas cascadas.

Por desgracia el último autobús a Braga salía a las 5 de la tarde y tomamos la sabia decisión de bajar poco a poco hasta la parada para no perderlo. Tras caminar una hora nos encontrábamos en la ciudad esperando a que llegara el bus. Como estábamos cansados de la ruta, casi todos nos quedamos dormidos al subirnos al autobús.

Más tarde, cuando llegamos a la estación de autobuses, decidimos explorar un poco Braga, ya que teníamos bastante tiempo hasta coger el tren de vuelta a Barcelos.

Recomendaciones para visitar el Parque Nacional de Peneda-Gerês

Después de ese viaje aprendí unas cuantas cosas sobre cómo llegar al Parque Nacional de Peneda-Gerês más fácil y rápidamente. Una de ellas es alquilar un coche e ir unos días si tienes la oportunidad. Alquilar un coche te costará unos 30 o 50 euros, pero os vendrá bien si sois cuatro o más personas.

La otra es coger el autobús a Braga desde el Instituto Politécnico do Cávado e Ave, que te costará unos 2 euros y en media hora estarás en la estación de autobuses de Braga. Esta opción te ahorrará dinero y tiempo, que es lo más importante.

En general, disfruté nuestro viaje al Parque Nacional de Peneda-Gerês y me quedé bastante impresionada con la flora tan diversa que tenía. Sin embargo, me gustaría haber pasado más tiempo allí, unas cuantas horas son simplemente insuficientes para disfrutar de todo lo que el parque puede ofrecer.

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