Cómo escribir una carta de motivación
Cómo escribir una carta de motivación
Puede que todo el mundo te diga que la carta de motivación es una parte esencial de la solicitud de admisión al extranjero, pero el grado de importancia varía, aunque puede sumar o restar. De ahí la vital importancia de escribir una carta de motivación para destacar de entre los demás. Aunque antes de empezar hay algunas cosas que se deben de tener muy muy claras:
- 1 - una carta de motivación no es el currículo de forma extensa
- 2 - no puedes hacerla muy larga
Hay algunos países como Ucrania o China en los que no es necesaria una carta de motivación. Aquí vamos a hablar sobre cómo escribir una carta de motivación.
La regla básica de una carta de motivación es saber qué incluir en la extensión de la carta y la forma de escribirla. Como es individual, la carta de motivación es una forma de distinguirse de muchísimas maneras. Ni qué decir tiene que tus propias experiencias, tus propios pensamientos e ideas y tus propias inspiraciones van a ser lo que te distinga y te diferencie. Aunque una vez que te pongas a escribirlas, hay algunas pautas que se deberían seguir. Se van a tratar en estos cinco pasos básicos para conseguir escribir una carta de motivación.
Paso 1: Prepara una lista de todo lo que quieres incluir
Una carta de motivación va a ser un documento largo, pero antes de escribirla, estaría genial que pienses y prepares una lista con todas las cosas que te gustaría incluir. Las cartas de motivación sirven como apoyo para expresar el recorrido de tu vida hasta la actualidad y busca el exponer tus metas y aspiraciones, por eso hay tantas cosas que se deben de añadir. Tienes que tener claro qué incluir en la carta, por lo que sería conveniente preparar una lista. Coge un trozo de papel y escribe todos los puntos que piensas que vas a tratar. Debería ser una lista de tus metas a corto plazo (si tienes alguno), tus metas a largo plazo y todas las aspiraciones vitales que necesites incluir. Recuerda, la clave está en escribir cada situación, aunque parezca irrelevante. Aquí no tenemos que preocuparnos en la decisión de qué incluimos o no en la carta.
Paso 2: Tema de la carta de motivación
La carta de motivación tiene que tener un tema. Lo que tratamos de decir con este paso es que debes concentrarte en un método de pensamiento explícito. Seguro que quieres hablar de todo eso pero habrá que tomar una decisión si quieres que tu carta de motivación progrese. Piensa en un tema o punto de partida, aunque es importante que la carta vaya fluyendo por los objetivos. Imagina que solo ese trozo de papel va a contar la historia de tu vida, y que te va llevar a lo más alto, ¿cuáles serían los momentos que querrías destacar? Puede que sea algo que te hizo mostrar interés por ese curso en ciencias aplicadas o puede que el trabajo te enseñara por qué querías asociarse a MBA. De todas formas, buscar un tema es vital y la mejor forma de hacerlo es buscar el propósito que te cambió la vida, y normalmente de eso suele tratar.
Paso 3: Pule esa lista
En este paso necesitamos volver a la lista que hemos preparado antes y empezaremos a pulirla. Una vez que hemos decidido el tema, hay que empezar a retirar esos detalles que puede que no encajen con él. Tan solo tienes que coger un bolígrafo rojo y tachar todas las opciones que no parezcan importantes o que no pegan con el tema establecido. Mantén este paso en la cabeza porque es muy importante seleccionar lo que incluir y no que no incluir como un añadido en la carta de motivación.
Además, normalmente la lista va a cambiar según lo que vayas a solicitar. Por ejemplo, lo que vayas a incluir en la carta para asociarte al MBA va a diferir de lo que incluyas para la que escribas para el MSC. Y no solo eso, la forma de escribir las cartas de motivación para instituciones académicas es totalmente diferente ya que se sacan a relucir otros acontecimientos. Así que, basándote en el curso, acorta la lista.
Paso 4: Analiza tanto el curso como la universidad
En este paso vas a analizar tanto el curso como la universidad: si la cultura, los alumnos (relacionándolo con la cultura) y el prestigio de la universidad tienen relación con el tema que se ha escogido. Puede que te ayude mucho a personalizar la carta y cuaje bien con las metas que se han escogido. Para programas de investigación habrá que incluir también los nombres de los miembros académicos y algunos de sus artículos actuales en el área de investigación. Recuerda, a pesar de que no se pide como tal, da muy buena impresión intentar hacer un análisis de si los miembros de la OMS usurparían el curso que vas a hacer. Las universidades extranjeras tienen en cuenta los análisis minuciosos sobre el programa.
Paso 5: Escribe, edita y reescribe
Cuando termines todos los pasos anteriores, lo único que queda es escribir. Nosotros siempre aconsejamos que nunca enviéis vuestro borrador inicial, ya que es muy importante revisarlo más tarde. No hace falta que lo revises 3 o 4 veces, pero sí se recomienda una vez por lo menos. Y aunque no se vaya a cambiar ni el guión ni las ideas principales, sí hay que revisar el vocabulario y la ortotipografía, aunque esto se debería hacer en todos los escritos: revisar el vocabulario, la ortografía y la puntuación. Una vez llegado el momento, la universidad no tendría ninguna razón para aceptar a alguien con errores tipográficos, así que nunca subestiméis el valor de la puntuación en los escritos o en la carta de motivación.
También os recomendamos hojear la carta de motivación una vez varios días seguidos porque así ya estarás más relajado y serás capaz de fijarte mejor en lo escrito y ver cosas que habría que modificar. Una vez que ya hayas hecho los cambios pertinentes, sólo queda reescribir la carta de motivación. Y así concluiría nuestro borrador.
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