Cascada de los Tilos

¡¡Hola a todos!! En esta publicación os quiero hablar de otro de los fantásticos lugares de La Palma (Canarias): la cascada de los Tilos:

Hacia ahí partimos el tercer día, llegamos estupendamente con GoogleMaps, sin problemas. Eran carreteras de montaña y en un principio en cuanto vimos coches aparcados y personas, paramos ahí deduciendo que ese era el sitio, pero realmente era un poco más hacia delante, hay que llegar hasta el centro de visitantes que no es más que una cabaña donde hay aparcamientos de sobra a quinientos metros más adelante y desde donde salen algunas rutas.

Al ser todo tan húmedo, algunas partes más lisas resbalaban un poco. A La Palma hay que llevarse calzado bueno para andar por la naturaleza.

Donde habíamos parado en un principio solo era un punto desde donde salían algunas rutas que si hubiésemos dispuesto de más tiempo, hubiésemos hecho. Una de las rutas tenía cinco horas de duración, igual que las cascada de colores de la que os habloa en otra publicación de este blog, por lo que a La Palma hay que ir preparados para andar con ropa y calzado cómodo, y con ganas, por supuesto. Aún así, aprovechamos para sacar unas fotos:

Este era un camino que daba inicio a una de las diferentes rutas.

Centro de visitantes

Allí aparcamos y preguntamos. El acceso a la cascada estaba unos metros más abajo. Había también un restaurante aunque se veía un poco caro:

Ruta

La rutita hasta la cascada es de unos quince minutos y muy accesible para todas las edades. Era todo súper verde por la humedad, parecía que estábamos en una selva tropical, nunca antes habíamos estado en un sitio así. Además hay una especie de camino hecho con la superficie muy lisita:

Y ahí llegamos a la cascada que era preciosa, caía desde todo lo alto:

Se puede ir más allá de la cascada, y así lo hicimos, investigando. Esa parte ya no está tan preparada pero era más divertida:

El terreno era todo tal que así a partir de la cascada.

Llegamos hasta donde pudimos y hasta donde nos cansamos y dimos media vuelta:

Fue hasta aquí que nos topamos con esto, a unos quince minutos de la cascada. Algunos nos subimos para hacernos las fotos pero no continuamos más. Se podía, pero ya era todo lo mismo y teníamos que aprovechar el día para ver otras cosas.

Al volver ya no había cascada, tuvimos mucha suerte de haber llegado antes, las personas que llegaron en ese momento se quedaron sin ver la cascada, ya no caía nada de agua no supimos por qué.

Espero que os haya gustado y visitéis esta isla bonita con tantos rincones mágicos.

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